/ miércoles 3 de noviembre de 2021

De verdad: ¿Quién es quién en las mentiras?

Es verdaderamente penoso que el presidente de México trate de defender su principal programa de gobierno, la lucha contra la corrupción, con descalificar el trabajo de una organización que ha hecho un trabajo muy escrupuloso del estudio de la corrupción y el estado de derecho en México y en el mundo, World Justice Project. Todo porque, los resultados de investigación colocaron a México en el lugar 135 de 139 países de países con mayor corrupción, superando sólo a algunos países africanos y uno asiático; en América Latina aparece en último lugar. Así se presentó por su vocera en la sección de Quién es quién en las mentiras, diciendo, “el colmo de las fake news, no es falso, pero no es verdadero… [¿¿¿??] de como inventar un índice y darle difusión hasta que se crea que es verdad… ese dato tan celebrado no es digno de tomarse en cuenta.” La vocera descalifica a la organización, primero diciendo que es norteamericana, segundo por las personas que se encuestó, “no es un estudio exhaustivo es el resultado de una consulta a un pequeño grupo de analistas… empresarios, organizaciones patronales, académicos, organizaciones no gubernamentales… que en casi todos tienen animadversión hacia el gobierno” y sus “colaboradores… y entre los especialistas que ayudaron a la conceptualización y elaboración del estado de derecho… Pardinas, del IMCO y director del periódico Reforma, Magaloni del CIDE.” En tercer lugar porque la organización World Justice Project fue fundada por alguien que representó a Microsoft en varios litigios. ¿Y…?

Esta penosa argumentación en contra de World Justice Project tiene un fundamento muy pobre y equivocado, todo porque México resultó como el quinto lugar más corrupto del mundo, tres años después de la lucha contra la corrupción, la principal bandera del gobierno de López Obrador.

La argumentación es muy pobre porque es un error, ¿o será una mentira?, señalar que sólo se entrevista a especialistas. Se entrevista a ciudadanos comunes y corrientes de nuestro país a través de una rigurosa muestra probabilística y a especialistas, que no se escogen en función de su “ideología neoliberal” o su “animadversión” al presidente de México. En Morelos en la encuesta previa se entrevistaron a varios académicos de la UAEM y varios funcionarios de diversas entidades de gobierno, además de algunos representantes de organizaciones ciudadanas y una muestra probabilística de ciudadanos. En riguroso muestreo en la encuesta anterior se entrevistaron a más de 30 mil personas en todo el país, aproximadamente 800 por cada estado para tener representatividad estatal. Además, el Jefe de Investigación de la encuesta a nivel mundial es un mexicano, un investigador de primer nivel invitado a colaborar para toda la encuesta, con un pecado, haber trabajado en el CIDE. He tenido oportunidad de trabajar en investigación con otra publicación de World Justice Project con este investigador y es muy absurdo, pensar que el muestreo y los especialistas que opinaron hayan sido seleccionados por su animadversión al presidente de México y conducir el resultado para que México ocupe el quinto lugar del país más corrupto del mundo. ¡Esto inverosímil y ridículo en términos de investigación, así como presentarlo como algo que no es verdad ni es mentira!

Lo que nos están diciendo los resultados de investigación es que a tres años del mandato de López Obrador no ha producido ningún resultado significativo en su lucha contra la corrupción y que así lo percibe la sociedad mexicana y los especialistas. Tenemos un gran número de ejemplos de ex funcionarios, líderes sindicales… funcionarios en funciones, representantes políticos… que no han sido ni investigados, ni procesados. Existen algunos casos excepcionales de líderes de delincuencia organizada que han sido aprehendidos y hasta vinculados a proceso, como los del “huachicoleo”, pero no he sabido de la aprehensión de sus presuntos cómplices. Existen los dos casos “estrella” y sólo uno de los presuntos culpables en prisión por lo de la “estafa maestra”, pero los demás de esta red, nada. Desafortunadamente algunos de los acusados y denunciados públicamente parecen haber sido cubiertos con el manto presidencial.

El presidente de la República tendría que repetirse a sí mismo, como frecuentemente lo hace, el pueblo es sabio y no se deja engañar, los más de 30 mil encuestados por el World Justice Project con su respuesta sabiamente le están pidiendo cuentas al presidente sobre su lucha contra la corrupción y no argumentos tan pobres e inverosímiles en su conferencia mañanera.

Es verdaderamente penoso que el presidente de México trate de defender su principal programa de gobierno, la lucha contra la corrupción, con descalificar el trabajo de una organización que ha hecho un trabajo muy escrupuloso del estudio de la corrupción y el estado de derecho en México y en el mundo, World Justice Project. Todo porque, los resultados de investigación colocaron a México en el lugar 135 de 139 países de países con mayor corrupción, superando sólo a algunos países africanos y uno asiático; en América Latina aparece en último lugar. Así se presentó por su vocera en la sección de Quién es quién en las mentiras, diciendo, “el colmo de las fake news, no es falso, pero no es verdadero… [¿¿¿??] de como inventar un índice y darle difusión hasta que se crea que es verdad… ese dato tan celebrado no es digno de tomarse en cuenta.” La vocera descalifica a la organización, primero diciendo que es norteamericana, segundo por las personas que se encuestó, “no es un estudio exhaustivo es el resultado de una consulta a un pequeño grupo de analistas… empresarios, organizaciones patronales, académicos, organizaciones no gubernamentales… que en casi todos tienen animadversión hacia el gobierno” y sus “colaboradores… y entre los especialistas que ayudaron a la conceptualización y elaboración del estado de derecho… Pardinas, del IMCO y director del periódico Reforma, Magaloni del CIDE.” En tercer lugar porque la organización World Justice Project fue fundada por alguien que representó a Microsoft en varios litigios. ¿Y…?

Esta penosa argumentación en contra de World Justice Project tiene un fundamento muy pobre y equivocado, todo porque México resultó como el quinto lugar más corrupto del mundo, tres años después de la lucha contra la corrupción, la principal bandera del gobierno de López Obrador.

La argumentación es muy pobre porque es un error, ¿o será una mentira?, señalar que sólo se entrevista a especialistas. Se entrevista a ciudadanos comunes y corrientes de nuestro país a través de una rigurosa muestra probabilística y a especialistas, que no se escogen en función de su “ideología neoliberal” o su “animadversión” al presidente de México. En Morelos en la encuesta previa se entrevistaron a varios académicos de la UAEM y varios funcionarios de diversas entidades de gobierno, además de algunos representantes de organizaciones ciudadanas y una muestra probabilística de ciudadanos. En riguroso muestreo en la encuesta anterior se entrevistaron a más de 30 mil personas en todo el país, aproximadamente 800 por cada estado para tener representatividad estatal. Además, el Jefe de Investigación de la encuesta a nivel mundial es un mexicano, un investigador de primer nivel invitado a colaborar para toda la encuesta, con un pecado, haber trabajado en el CIDE. He tenido oportunidad de trabajar en investigación con otra publicación de World Justice Project con este investigador y es muy absurdo, pensar que el muestreo y los especialistas que opinaron hayan sido seleccionados por su animadversión al presidente de México y conducir el resultado para que México ocupe el quinto lugar del país más corrupto del mundo. ¡Esto inverosímil y ridículo en términos de investigación, así como presentarlo como algo que no es verdad ni es mentira!

Lo que nos están diciendo los resultados de investigación es que a tres años del mandato de López Obrador no ha producido ningún resultado significativo en su lucha contra la corrupción y que así lo percibe la sociedad mexicana y los especialistas. Tenemos un gran número de ejemplos de ex funcionarios, líderes sindicales… funcionarios en funciones, representantes políticos… que no han sido ni investigados, ni procesados. Existen algunos casos excepcionales de líderes de delincuencia organizada que han sido aprehendidos y hasta vinculados a proceso, como los del “huachicoleo”, pero no he sabido de la aprehensión de sus presuntos cómplices. Existen los dos casos “estrella” y sólo uno de los presuntos culpables en prisión por lo de la “estafa maestra”, pero los demás de esta red, nada. Desafortunadamente algunos de los acusados y denunciados públicamente parecen haber sido cubiertos con el manto presidencial.

El presidente de la República tendría que repetirse a sí mismo, como frecuentemente lo hace, el pueblo es sabio y no se deja engañar, los más de 30 mil encuestados por el World Justice Project con su respuesta sabiamente le están pidiendo cuentas al presidente sobre su lucha contra la corrupción y no argumentos tan pobres e inverosímiles en su conferencia mañanera.