/ martes 7 de noviembre de 2023

Causas del mal comportamiento adolescente

¿Qué opina Usted del mal comportamiento de un niño, niña y adolescente (NNyA)?

Tal vez le viene a la mente una mala educación de parte de los padres, falta de límites, caprichos o hasta papás y mamás inexpertos.

Pero, también debe considerar que una mala conducta es consecuencia de lo que ya hemos abordado en columnas anteriores, es decir, carencias con las que crecen muchos NNyA, que son la causa de un desarrollo poco o nada integral y que, en la mayoría de las ocasiones, el resultado sea ese llamado “mal comportamiento”.

SALUD

Aunque no lo crea, la falta de atención médica para el control prenatal, asistencia al nacer y vigilancia de su desarrollo como infantes o adolescentes, es un factor que puede incidir en sus conductas.

Muchos de nuestros NNyA jamás fueron al dentista, al oftalmólogo, al ortopedista, no recibieron vacunas entre otras y en consecuencia, no pudieron desarrollar todas sus habilidades provocando que sus sueños no se cumplieran.

Aspectos básicos como la lactancia materna, desayuno antes de ir a la escuela, alimentos en casa, una dieta saludable, formación sobre higiene personal e incluso contar con información sobre salud reproductiva no está al alcance de un gran número de NNyA.

Por ejemplo, INEGI reportó en 2021, que el embarazo adolescente, además de los riesgos físicos que conlleva, reduce oportunidades educativas en las mujeres, lo que a su vez genera condiciones precarias de empleo y salarios, las expone a sufrir violencia por parte de sus parejas y a ser vulnerables a una mayor dependencia en general.

En este mismo estudio se establece que existen niñas y niños que son padres a los 10 años de edad.

IDENTIDAD

Otro factor es su registro de nacimiento, porque muchos padres omitieron realizar su inscripción en el registro civil, y a muchos también el padre les negó el apellido para reconocerlos como hijos.

Esto se traduce en una carencia de ciudadanía, de identidad y del reconocimiento de su filiación, lo que se convierte en una causa de discriminación y un factor de exclusión por falta de identidad legal.

EDUCACIÓN

Acceso a la educación por falta de recursos, de planteles educativos, de maestros, de escuelas de educación especial, espacios escolares sin discriminación, todos son también elementos que pueden generar ese “mal comportamiento”.

Muchos abandonan la escuela o no se inscriben porque no pueden pagar cuotas de inscripción, el uniforme o el calzado. En 2019 el INEGI reportó que en zonas urbanas 3.3 millones de niños y niñas no asistieron a la escuela, en tanto que en zonas rurales fueron alrededor de 1.5 millones.

Pero también, quienes sí asisten a la escuela, tienen carencias pues no cuentan con el acompañamiento de los padres para apoyarles en las tareas, en llevar el uniforme, limpiar los zapatos, llegar puntual, dialogar con los maestros y atender sus recomendaciones.

Realizar trabajo comunitario en las instalaciones, acudir a juntas, participar con los demás padres de familia y docentes, entre otros.

En Morelos, la tasa de descensión de 2000 a 2021 es de 1 por ciento en primaria, 4.5 en secundaria, 16.3 en media superior y 6.7 en superior, de acuerdo con el INEGI.

FAMILIA

Carecer de un hogar, afecto de los padres y familiares, para no vivir en situación de calle, o abandonados por su padre, madre o ambos, colocan a nuestras NNyA en situaciones difíciles.

Ellos necesitan de ese núcleo, pero en ocasiones ambos padres trabajan largas jornadas, así que su desarrollo transita en total desamparo y parecería que no son pocos los casos.

La encuesta de 2020 sobre Población y Vivienda del INEGI, estableció que 33 de cada 100 hogares son encabezados por una Jefa de familia, 71.3 por ciento son hogares liderados por un hombre.

Esto lo expone gravemente, ya que el Secretariado Ejecutivo Nacional del Sistema Nacional de Seguridad Pública informó que de 2015 a 2023 un total de dos mil 240 NNyA de 0-17 años de edad fueron víctimas de trata de personas, muchos de explotación laboral y sexual.

DESARROLLO

Nuestras NNyA necesitan también tiempo y apoyo para asistir a actividades recreativas, deportivas y culturales, para tener un desarrollo físico y emocional, reforzar valores éticos y reglas de comportamiento social que mejoraran su interacción.

La mayoría tampoco fue a museos, sitios arqueológicos, actividades culturales, por falta de recursos económicos para el traslado y/o el pago de las entradas.

Incluso no tuvieron el apoyo para convivir con NNyA de su edad o de su comunidad, no solo de la escuela o círculo familiar, para que aprendiera la tolerancia, la igualdad, el respeto a los demás, límites en su comportamiento, compartir y lograr su formación cívica sumada a la formación que reciba en la escuela.

CRECIMIENTO

Muchos hogares dejan en manos del internet el entretenimiento de los pequeños, pero esto es un riesgo porque su intimidad puede ser violada, exponerlos al mundo virtual puede significar revelar su información personal, divulgar imágenes personales y datos a terceros sin la consulta previa a su tutor.

Algunos NNyA no tienen información sobre sus derechos, mucho menos saben qué conductas pueden ser castigadas por el Estado y los procedimientos que puede enfrentar, para que formen conciencia ciudadana.

El año pasado tres mil 413 adolescentes fueron procesados por el Sistema de Justicia Penal en México según la Encuesta Nacional de Adolescentes en el Sistema de Justicia Penal.

CONSECUENCIAS LEGALES

Esta privación de condiciones idóneas para fomentar vínculos socialmente positivos y el pleno desarrollo de sus capacidades, personalidad y sentido de responsabilidad, los abogados y las normas catalogamos como violaciones a sus derechos fundamentales.

Por eso, no resulta nada extraño que con tantas carencias, al llegar a la adolescencia y estando en proceso de construir su personalidad, lo hagan con las herramientas que adquirieron en la infancia y adolescencia, con resultados poco o nada deseables.

Por ejemplo:

  1. Conflictos en la personalidad del adolescente.
  2. Falta de comportamientos éticos y morales por la falta de apoyo familiar.
  3. Falta de valores y principios que frenen la comisión de conductas que afecten las buenas costumbres y la ley.
  4. Falta de diálogo en la familia, inestabilidad emocional, carencia de control de impulsos, aislamiento del joven por conflictos internos.
  5. Desintegración familiar.
  6. Rebeldía.
  7. Falta de destrezas y habilidades para adaptarse.
  8. Embarazo adolescente

Explotación infantil, violación a su intimidad personal, entre muchos otros aspectos.

Vale la pena leer cada apartado y preguntarse (a manera de un test) si estamos cumpliendo como adultos con los derechos que todo NNyA debe gozar para lograr que su desarrollo y formación culmine con un adulto pleno, feliz, responsable individual y socialmente. Cierro con dos preguntas:

¿Qué carencia tuvo usted cuando fue niño, niña o adolescente?

¿Qué le faltó o fue insuficiente para lograr su pleno desarrollo físico, psicológico y social, en condiciones de dignidad?

Los leeré en los comentarios.

¿Qué opina Usted del mal comportamiento de un niño, niña y adolescente (NNyA)?

Tal vez le viene a la mente una mala educación de parte de los padres, falta de límites, caprichos o hasta papás y mamás inexpertos.

Pero, también debe considerar que una mala conducta es consecuencia de lo que ya hemos abordado en columnas anteriores, es decir, carencias con las que crecen muchos NNyA, que son la causa de un desarrollo poco o nada integral y que, en la mayoría de las ocasiones, el resultado sea ese llamado “mal comportamiento”.

SALUD

Aunque no lo crea, la falta de atención médica para el control prenatal, asistencia al nacer y vigilancia de su desarrollo como infantes o adolescentes, es un factor que puede incidir en sus conductas.

Muchos de nuestros NNyA jamás fueron al dentista, al oftalmólogo, al ortopedista, no recibieron vacunas entre otras y en consecuencia, no pudieron desarrollar todas sus habilidades provocando que sus sueños no se cumplieran.

Aspectos básicos como la lactancia materna, desayuno antes de ir a la escuela, alimentos en casa, una dieta saludable, formación sobre higiene personal e incluso contar con información sobre salud reproductiva no está al alcance de un gran número de NNyA.

Por ejemplo, INEGI reportó en 2021, que el embarazo adolescente, además de los riesgos físicos que conlleva, reduce oportunidades educativas en las mujeres, lo que a su vez genera condiciones precarias de empleo y salarios, las expone a sufrir violencia por parte de sus parejas y a ser vulnerables a una mayor dependencia en general.

En este mismo estudio se establece que existen niñas y niños que son padres a los 10 años de edad.

IDENTIDAD

Otro factor es su registro de nacimiento, porque muchos padres omitieron realizar su inscripción en el registro civil, y a muchos también el padre les negó el apellido para reconocerlos como hijos.

Esto se traduce en una carencia de ciudadanía, de identidad y del reconocimiento de su filiación, lo que se convierte en una causa de discriminación y un factor de exclusión por falta de identidad legal.

EDUCACIÓN

Acceso a la educación por falta de recursos, de planteles educativos, de maestros, de escuelas de educación especial, espacios escolares sin discriminación, todos son también elementos que pueden generar ese “mal comportamiento”.

Muchos abandonan la escuela o no se inscriben porque no pueden pagar cuotas de inscripción, el uniforme o el calzado. En 2019 el INEGI reportó que en zonas urbanas 3.3 millones de niños y niñas no asistieron a la escuela, en tanto que en zonas rurales fueron alrededor de 1.5 millones.

Pero también, quienes sí asisten a la escuela, tienen carencias pues no cuentan con el acompañamiento de los padres para apoyarles en las tareas, en llevar el uniforme, limpiar los zapatos, llegar puntual, dialogar con los maestros y atender sus recomendaciones.

Realizar trabajo comunitario en las instalaciones, acudir a juntas, participar con los demás padres de familia y docentes, entre otros.

En Morelos, la tasa de descensión de 2000 a 2021 es de 1 por ciento en primaria, 4.5 en secundaria, 16.3 en media superior y 6.7 en superior, de acuerdo con el INEGI.

FAMILIA

Carecer de un hogar, afecto de los padres y familiares, para no vivir en situación de calle, o abandonados por su padre, madre o ambos, colocan a nuestras NNyA en situaciones difíciles.

Ellos necesitan de ese núcleo, pero en ocasiones ambos padres trabajan largas jornadas, así que su desarrollo transita en total desamparo y parecería que no son pocos los casos.

La encuesta de 2020 sobre Población y Vivienda del INEGI, estableció que 33 de cada 100 hogares son encabezados por una Jefa de familia, 71.3 por ciento son hogares liderados por un hombre.

Esto lo expone gravemente, ya que el Secretariado Ejecutivo Nacional del Sistema Nacional de Seguridad Pública informó que de 2015 a 2023 un total de dos mil 240 NNyA de 0-17 años de edad fueron víctimas de trata de personas, muchos de explotación laboral y sexual.

DESARROLLO

Nuestras NNyA necesitan también tiempo y apoyo para asistir a actividades recreativas, deportivas y culturales, para tener un desarrollo físico y emocional, reforzar valores éticos y reglas de comportamiento social que mejoraran su interacción.

La mayoría tampoco fue a museos, sitios arqueológicos, actividades culturales, por falta de recursos económicos para el traslado y/o el pago de las entradas.

Incluso no tuvieron el apoyo para convivir con NNyA de su edad o de su comunidad, no solo de la escuela o círculo familiar, para que aprendiera la tolerancia, la igualdad, el respeto a los demás, límites en su comportamiento, compartir y lograr su formación cívica sumada a la formación que reciba en la escuela.

CRECIMIENTO

Muchos hogares dejan en manos del internet el entretenimiento de los pequeños, pero esto es un riesgo porque su intimidad puede ser violada, exponerlos al mundo virtual puede significar revelar su información personal, divulgar imágenes personales y datos a terceros sin la consulta previa a su tutor.

Algunos NNyA no tienen información sobre sus derechos, mucho menos saben qué conductas pueden ser castigadas por el Estado y los procedimientos que puede enfrentar, para que formen conciencia ciudadana.

El año pasado tres mil 413 adolescentes fueron procesados por el Sistema de Justicia Penal en México según la Encuesta Nacional de Adolescentes en el Sistema de Justicia Penal.

CONSECUENCIAS LEGALES

Esta privación de condiciones idóneas para fomentar vínculos socialmente positivos y el pleno desarrollo de sus capacidades, personalidad y sentido de responsabilidad, los abogados y las normas catalogamos como violaciones a sus derechos fundamentales.

Por eso, no resulta nada extraño que con tantas carencias, al llegar a la adolescencia y estando en proceso de construir su personalidad, lo hagan con las herramientas que adquirieron en la infancia y adolescencia, con resultados poco o nada deseables.

Por ejemplo:

  1. Conflictos en la personalidad del adolescente.
  2. Falta de comportamientos éticos y morales por la falta de apoyo familiar.
  3. Falta de valores y principios que frenen la comisión de conductas que afecten las buenas costumbres y la ley.
  4. Falta de diálogo en la familia, inestabilidad emocional, carencia de control de impulsos, aislamiento del joven por conflictos internos.
  5. Desintegración familiar.
  6. Rebeldía.
  7. Falta de destrezas y habilidades para adaptarse.
  8. Embarazo adolescente

Explotación infantil, violación a su intimidad personal, entre muchos otros aspectos.

Vale la pena leer cada apartado y preguntarse (a manera de un test) si estamos cumpliendo como adultos con los derechos que todo NNyA debe gozar para lograr que su desarrollo y formación culmine con un adulto pleno, feliz, responsable individual y socialmente. Cierro con dos preguntas:

¿Qué carencia tuvo usted cuando fue niño, niña o adolescente?

¿Qué le faltó o fue insuficiente para lograr su pleno desarrollo físico, psicológico y social, en condiciones de dignidad?

Los leeré en los comentarios.