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La señora Cira Solano Trejo, vecina de la colonia Zapata, en medio de la contingencia del Covid-19, salen a trabajar por que viven al día, venden chilaquiles y tacos acorazados, de este negocio depende la manutención de su hogar compuesto por sus hijas y sus nietos una familia de seis personas entre ellas una persona con insuficiencia renal que se ésta dializando.
Vecina de la colonia Emiliano Zapata, que aún registra huellas de la devastación del sismo, con grandes contrastes en la reconstrucción de las viviendas, Doña Cira, una mujer de 60 años acompañada de su hija y un nieto estudiante de secundaria, quien ayuda a empujar el triciclo donde cargan el negocio portátil de la familia recorren parte de la calle 18 de marzo, Vicente Guerrero, Avenida Morelos y otras calles más del centro de Jojutla ofreciendo sus alimentos.
Famosa por los Chilaquiles verdes, rojos y tacos acorazados, se para en logares estratégicos para recibir a sus clientes, llega hasta la puerta d varios negocios a ofrecer, incluso a domicilios particulares, donde saben que si salen con su plato, les descuenta 5 pesos, dijo al apostar a la reducción de los desechables que aunque biodegradables, no dejan de ser basura, dice convencida en apostar a la protección del medio ambiente.
Ahora con la contingencia de Covid-19, y la campaña #quédate encasa, reconoce que mientras puedan salir a trabajar lo van hacer, porque de este negocio depende sostener a su familia, paga renta y con ella viven sus hijas y nietos, por lo pronto han extremado sus medidas de limpieza, su hija es la que cobra y ella despacha, pero además traen su botellas de agua con jabón, botella de gel.
Reconoce que se han caído las ventas, y en su casa los gastos son los mismos, pero la comida que les sobra de ahí comen y cuando no tienen que comprar y van poco a poco, con altas y bajas. Por lo pronto consiguió para pagar el gas, y solo espera que puedan vender este día para enfrentar estas deudas y los gastos.
Sabe que va llegar el momento cuando las autoridades les prohíban salir, pero mientras les permitan seguir trabajando cuidándose y extremando las medidas de higiene, ya que tiene una hija en situación especial, que la están dializando y aunque trabaja en la limpieza de un banco y gracias a eso tiene seguro social, hay muchos gastos adicionales que tienen que enfrentar como la educación de sus dos hijos.
Sabe que la vida no es tan fácil para muchas familias que como ellas van a día, y que este tipo de contingencias también les pega su ya precaria situación, sin embargo se siete agradecida con Dios y la vida, que le permite tener la salud para seguir trabajando y sacar adelante a su familia.
Por lo pronto bajaron las ventas que ya eran bajas, y apenas saca los 300 pesos para volver a invertir, y seguir trabajando, como lo viene haciendo desde hace 4 años. Ellas el pasado 19 de septiembre del año pasado se puso a regalar chilaquiles para agradecer a la gente que ayudo con el sismo del 19S/17, ya que muchas familias que perdieron sus casas sobrevivieron con esa ayuda humanitaria.
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