/ martes 22 de noviembre de 2022

Guacamaya Leaks: En Puebla, 15 grupos se disputan el huachicol

Tienen presencia en 18 municipios, principalmente del Triángulo Rojo y en la zona metropolitana de la capital

PUEBLA. Son 15 los grupos delictivos que se disputan el control del robo de hidrocarburos en Puebla, presentes en 18 municipios, principalmente del Triángulo Rojo y de la zona metropolitana de la capital del estado, de acuerdo con información filtrada por la organización Guacamaya.

Reportes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), documentan que entre 2019 y 2020 fueron capturados al menos cinco líderes de estas células criminales, sin embargo, sus estructuras continúan operando.

Te puede interesar: Puebla, número uno en tomas clandestinas de Gas LP en 2022

Tan sólo en los municipios de la zona metropolitana de la capital, que incluye Amozoc, Coronango, Huejotzingo, San Martín Texmelucan, San Salvador el Verde y la ciudad de Puebla, la Sedena y la SSPC ubicaron a 10 agrupaciones huachicoleras activas: Los Cuijes, Los Tarzanes, Los Pelones, Los Oaxacos, Los Villegas, Los Othones, Los Marranos y las células delictivas de El Loco Téllez, El Bukanas y La Loba.

En 2017, Los Cuijes fueron señalados como los autores de la masacre de Huehuetlán el Grande, en la que fueron asesinadas nueve personas como parte de la lucha por el huachicol. Un año después, siete de sus integrantes fueron abatidos en un operativo de la Sedena y la Secretaría de Marina (Semar), entre ellos uno de sus líderes, El Comandante 30.

Los Tarzanes, otra de las bandas que operan en la capital, continúan sus actividades, pese a que su líder, José Benito N, fue detenido por la Procuraduría General de la República (PGR) en 2018 por su responsabilidad en una fuga de gas LP en la colonia Villa Frontera.

Los Pelones es otra de las bandas activas en Puebla aunque su líder, Gustavo N, fue detenido en 2019 por el robo a un camión cargado de cartón y en 2021 por posesión ilegal de armas, evasión de una detención e intento de soborno a elementos de la Policía Estatal.

Otra organización en la lista es la de Los Oaxacos, cuyo cabecilla, Rubén Darío N, fue detenido en junio de 2019 por el robo a transportes en la Sierra Nororiental de Puebla. Pese a ello, se mantienen imperantes en la venta ilegal de combustibles.

El informe señala otra célula criminal liderada por Lidia N, alias La Loba, quien opera también en la capital del estado, donde la asocian con el robo a transeúnte. Aunque fue detenida en septiembre pasado, fue dejada en libertad en días siguientes.

La célula de Óscar N, alias El Loco Téllez, mantiene posición en San Martín Texmelucan, donde también operan Los Marranos y Los Othones.

El Loco Téllez, fue encarcelado el año pasado por homicidio calificado. Fue sentenciado a 23 años 9 meses de prisión. Meses atrás ya había sido aprehendido y después liberado por autoridades del estado de Tlaxcala, por los ilícitos de asesinato y secuestro.

De Los Marranos se sabe que controlan autoridades de los municipios del Triángulo Rojo y, de acuerdo con medios nacionales, estarían vinculados con el Cártel de Los Beltrán Leyva, mientras que Los Othones tienen sus orígenes en el estado de Oaxaca y se extienden hasta Veracruz.

Roberto de los Santos de Jesús, alias El Bukanas, es como uno de los principales responsables de la sustracción ilegal de hidrocarburos en Huejotzingo y Esperanza.Pese a que en 2020 el gobernador Miguel Barbosa Huerta refirió que su captura estaba próxima a ocurrir, hasta la fecha el sujeto se mantiene prófugo.

En 2019, la FGE detuvo a tres secuestradores presuntamente vinculados a El Bukanas, entre ellos su yerno. Según detalló la autoridad, los tres hombres privaron de su libertad a una persona en el municipio de Tehuacán.

Los Villegas continúan sus operaciones en Amozoc, Coronango, Tepeaca y Tlahuapan, pese a que en 2019 fue abatido Ángel N, alias El Pelón Villegas, presunto fundador de dicha agrupación.

Los informes militares ubican a Roberto N, alías El Colorado, como líder huachicolero en Tepeaca y Tlahuapan, y a Jalit N, El Mamer, en Acajete y Acatzingo; este último fundó la plaza en Puebla del Cártel Sangre Nueva Zeta.

Otras bandas delictivas identificadas son las de El Ferras, Raymundo N, alias El Panes, y Antonio N, alias El Toñín, que se presume a sí mismo como empresario y agricultor.

También se relaciona con el huachicol a Antonio N, hermano del expresidente municipal de Quecholac, Alejandro N, detenido y vinculado a proceso por el presunto ejercicio indebido de funciones y actos contra la seguridad pública.

PÉRDIDAS DE PEMX

En otra serie de documentos recabados por Guacamaya, Petróleos Mexicanos (Pemex) documentó pérdidas por hasta 103 mil 596 barriles de gas licuado de petróleo (LP) entre abril de 2021 y abril de 2022, tan sólo en el tramo correspondiente a la entidad poblana del ducto Cactus-Guadalajara.

El promedio de robo diario es de 197 barriles diarios, equivalentes a 31 mil 277 litros de gas LP. En contraste, se recuperaron 176 mil 971 litros de gas, sólo el dos por ciento del total de combustible robado.

Por último cabe recordar que, tal como dio a conocer El Sol de Puebla, el robo de gas LP y gasolinas le ha costado a los contribuyentes cerca de 39 millones de pesos durante los primeros tres trimestres del presente año. Por cada una de las 777 tomas clandestinas reportadas durante ese periodo, se ejercieron casi 50 mil pesos por incidente para su atención.

PUEBLA. Son 15 los grupos delictivos que se disputan el control del robo de hidrocarburos en Puebla, presentes en 18 municipios, principalmente del Triángulo Rojo y de la zona metropolitana de la capital del estado, de acuerdo con información filtrada por la organización Guacamaya.

Reportes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), documentan que entre 2019 y 2020 fueron capturados al menos cinco líderes de estas células criminales, sin embargo, sus estructuras continúan operando.

Te puede interesar: Puebla, número uno en tomas clandestinas de Gas LP en 2022

Tan sólo en los municipios de la zona metropolitana de la capital, que incluye Amozoc, Coronango, Huejotzingo, San Martín Texmelucan, San Salvador el Verde y la ciudad de Puebla, la Sedena y la SSPC ubicaron a 10 agrupaciones huachicoleras activas: Los Cuijes, Los Tarzanes, Los Pelones, Los Oaxacos, Los Villegas, Los Othones, Los Marranos y las células delictivas de El Loco Téllez, El Bukanas y La Loba.

En 2017, Los Cuijes fueron señalados como los autores de la masacre de Huehuetlán el Grande, en la que fueron asesinadas nueve personas como parte de la lucha por el huachicol. Un año después, siete de sus integrantes fueron abatidos en un operativo de la Sedena y la Secretaría de Marina (Semar), entre ellos uno de sus líderes, El Comandante 30.

Los Tarzanes, otra de las bandas que operan en la capital, continúan sus actividades, pese a que su líder, José Benito N, fue detenido por la Procuraduría General de la República (PGR) en 2018 por su responsabilidad en una fuga de gas LP en la colonia Villa Frontera.

Los Pelones es otra de las bandas activas en Puebla aunque su líder, Gustavo N, fue detenido en 2019 por el robo a un camión cargado de cartón y en 2021 por posesión ilegal de armas, evasión de una detención e intento de soborno a elementos de la Policía Estatal.

Otra organización en la lista es la de Los Oaxacos, cuyo cabecilla, Rubén Darío N, fue detenido en junio de 2019 por el robo a transportes en la Sierra Nororiental de Puebla. Pese a ello, se mantienen imperantes en la venta ilegal de combustibles.

El informe señala otra célula criminal liderada por Lidia N, alias La Loba, quien opera también en la capital del estado, donde la asocian con el robo a transeúnte. Aunque fue detenida en septiembre pasado, fue dejada en libertad en días siguientes.

La célula de Óscar N, alias El Loco Téllez, mantiene posición en San Martín Texmelucan, donde también operan Los Marranos y Los Othones.

El Loco Téllez, fue encarcelado el año pasado por homicidio calificado. Fue sentenciado a 23 años 9 meses de prisión. Meses atrás ya había sido aprehendido y después liberado por autoridades del estado de Tlaxcala, por los ilícitos de asesinato y secuestro.

De Los Marranos se sabe que controlan autoridades de los municipios del Triángulo Rojo y, de acuerdo con medios nacionales, estarían vinculados con el Cártel de Los Beltrán Leyva, mientras que Los Othones tienen sus orígenes en el estado de Oaxaca y se extienden hasta Veracruz.

Roberto de los Santos de Jesús, alias El Bukanas, es como uno de los principales responsables de la sustracción ilegal de hidrocarburos en Huejotzingo y Esperanza.Pese a que en 2020 el gobernador Miguel Barbosa Huerta refirió que su captura estaba próxima a ocurrir, hasta la fecha el sujeto se mantiene prófugo.

En 2019, la FGE detuvo a tres secuestradores presuntamente vinculados a El Bukanas, entre ellos su yerno. Según detalló la autoridad, los tres hombres privaron de su libertad a una persona en el municipio de Tehuacán.

Los Villegas continúan sus operaciones en Amozoc, Coronango, Tepeaca y Tlahuapan, pese a que en 2019 fue abatido Ángel N, alias El Pelón Villegas, presunto fundador de dicha agrupación.

Los informes militares ubican a Roberto N, alías El Colorado, como líder huachicolero en Tepeaca y Tlahuapan, y a Jalit N, El Mamer, en Acajete y Acatzingo; este último fundó la plaza en Puebla del Cártel Sangre Nueva Zeta.

Otras bandas delictivas identificadas son las de El Ferras, Raymundo N, alias El Panes, y Antonio N, alias El Toñín, que se presume a sí mismo como empresario y agricultor.

También se relaciona con el huachicol a Antonio N, hermano del expresidente municipal de Quecholac, Alejandro N, detenido y vinculado a proceso por el presunto ejercicio indebido de funciones y actos contra la seguridad pública.

PÉRDIDAS DE PEMX

En otra serie de documentos recabados por Guacamaya, Petróleos Mexicanos (Pemex) documentó pérdidas por hasta 103 mil 596 barriles de gas licuado de petróleo (LP) entre abril de 2021 y abril de 2022, tan sólo en el tramo correspondiente a la entidad poblana del ducto Cactus-Guadalajara.

El promedio de robo diario es de 197 barriles diarios, equivalentes a 31 mil 277 litros de gas LP. En contraste, se recuperaron 176 mil 971 litros de gas, sólo el dos por ciento del total de combustible robado.

Por último cabe recordar que, tal como dio a conocer El Sol de Puebla, el robo de gas LP y gasolinas le ha costado a los contribuyentes cerca de 39 millones de pesos durante los primeros tres trimestres del presente año. Por cada una de las 777 tomas clandestinas reportadas durante ese periodo, se ejercieron casi 50 mil pesos por incidente para su atención.

Elecciones 2024

Con influencers y famosos, los partidos políticos buscan atraer el voto joven

Los jóvenes en Morelos y en el país son quienes menos participan en las elecciones; un sondeo realizado por El Sol de Cuautla revela cuáles son los motivos que los frenan a salir a votar

Local

Trabajadores de la construcción emigran por falta de contratación

Trabajadores de la construcción emigran por falta de empleo en Morelos, la contratación de mano de obra es poca

Cultura

[Extranjeros en Morelos] El Valle Sagrado de Tepoztlán guarda los recuerdos de reyes muy antiguos

El poeta peruano Daniel Ruzo de los Heros sostuvo una teoría en la que hablaba sobre intervención humana en el esculpido de enormes montañas. Leamos lo que escribió sobre Tepoztlán

Seguridad

Alcalde de Huitzilac justifica la violencia en el municipio: "en todo el país está desatada"

"El tema de la seguridad nos corresponde a los tres niveles de gobierno", dijo el alcalde, quien pidió a la Fiscalía "echarle un poquito más de ganas" en el tema de procuración de justicia

Local

Aún no hay fecha para recibir a refuerzos federales en Morelos

Aún no hay una fecha para recibir a elementos de seguridad federal en Morelos informó Samuel Sotelo

Local

UAEM finiquita deuda con el Infonavit; aún debe 900 mdp al IMSS y al SAT

La máxima casa de estudios realiza las gestiones necesarias con los gobiernos federal y estatal para obtener un incremento presupuestal y evitar un colapso financiero