Las precampañas de las principales figuras políticas del país han llegado a su fin. En un acto realizado en el Monumento a la Revolución, Claudia Sheinbaum cerró el ciclo que la consolida como abanderada de la coalición de izquierda –integrada por Morena-PT-PVEM- e inicia el periodo de intercampañas, que tendrá también una gran intensidad política.
Al acto asistieron todos los aspirantes a la Presidencia que a finales del año pasado compitieron contra Claudia Sheinbaum en la consulta interna de Morena, incluyendo Ricardo Monreal, Gerardo Fernández Noroña y Marcelo Ebrard. De este modo, el cierre de precampaña representó un acto de sólida unidad de las diversas corrientes dentro del movimiento de transformación.
También cerraron sus precampañas los demás aspirantes presidenciales, cada quien a su manera: Xóchitl Gálvez, abanderada de la derecha, cerró esta etapa con un mitin en Acámbaro, Guanajuato, mientras Jorge Álvarez Máynez, de MC, lo hizo en la capital de Nuevo León. Es importante destacar la enorme disparidad de las preferencias que acompañan a las precandidaturas.
De acuerdo con la primera encuesta del año, publicada por la empresa De las Heras-Demotecnia, Claudia Sheinbaum tiene el 63 por ciento de las preferencias, contra solo 33 por ciento de Xóchitl Gálvez y un exiguo 4 por ciento del aspirante naranja, Jorge Álvarez Máynez. A su vez, consulta Mitofsky publica cifras muy cercanas, aunque otorga 6.5 de las preferencias al precandidato de MC.
Las cifras de ambas aspirantes –Claudia ya se registró como candidata-- muestran consistencia y continuidad con las mediciones anteriores. Casi todas las encuestas que se realizaron en el último trimestre de 2023 arrojaron cifras similares, y mostraron un notorio estancamiento de la aspirante del PRIAN. Las cifras del aspirante de MC se han reducido de manera notable si tomamos en cuenta que fueron de hasta 14 por ciento que obtuvo Samuel García durante su frustrado intento.
El PRIAN logró reventar a fines del año pasado las aspiraciones del partido naranja y eliminó de la contienda al gobernador de Nuevo León. Jorge Álvarez Máynez está pagando las consecuencias de los errores cometidos por la dirección política de MC, al retrasar durante varios meses el inicio de su precampaña, apostándole primero a un candidato externo, y después a la atractiva pero electoralmente inviable campaña de Samuel García. La candidatura de MC es tardía, sin brillo e irrelevante.
Varios comentaristas políticos ha expresado que MC está haciendo todo lo necesario para perder. El “destape”de Álvarez Máynez como candidato por parte de Samuel García fue unilateral y desaseado. La falta de institucionalidad de ese acto provocó la molestia del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro. La campaña no pinta bien para el abanderado naranja.
Por lo pronto, ya entramos en una nueva etapa. Sin embargo, en este espacio, la llamada “sociedad civil” que dirige Claudio X González hará una marcha el próximo 18 de febrero que culminará con una concentración en el Zócalo capitalino. Como orador único, Lorenzo Córdova –expresidente del INE-- hará un llamado a los manifestantes para defender “nuestra democracia”, amenazada por el “dictador de Macuspana”. Al respecto, Gerardo Fernández Noroña destacó que Lorenzo Córdova, quien parecía ser “árbitro vendido” en el INE, hoy muestra su verdadero rostro como jugador del equipo electoral de la derecha.
Los convocantes de la mencionada marcha son organizaciones como Unid@s, Sí por México, y el Frente Cívico Nacional, agrupaciones manejadas por personajes cercanos al empresario de la X, pero con diferente membrete. La bandera de la concentración no aparece muy clara, porque el gobierno ha respetado la autonomía del INE, mientras el Tribunal Federal Electoral (TEPJD) fortaleció su autonomía en el momento en que los magistrados destituyeron al calderonista Reyes Rodríguez Mondragón de la Presidencia de ese órgano judicial.
De acuerdo con las cifras actuales, es altamente probable que Claudia Sheinbaum sea elegida como presidenta de la República en las elecciones del 2 de junio. Lo que realmente se juega en estos comicios es la integración del próximo congreso federal. La coalición de izquierda tiene como objetivo ganar la mayoría absoluta –las dos terceras partes—de las curules en la Cámara de Diputados y los escaños en el Senado de la República, para llevar adelante cambios constitucionales que remuevan los obstáculos jurídicos que se oponen a la transformación del país.
En otro aspecto, de las 9 gubernaturas en disputa, la izquierda lleva la delantera en 6 entidades: en la Ciudad de México, Clara Brugada mantiene amplia ventaja sobre su contrincante panista Santiago Taboada. En Morelos, Margarita González Sarabia aventaja a Lucy Meza. En Puebla, Alejandro Armenta también lleva amplia delantera. En Veracruz, Rocío Nahle marcha con mucha ventaja sobre los aspirantes de la derecha. En Tabasco –tierra natal del presidente López Obrador—el candidato de la izquierda, Javier May, tiene la distancia más amplia sobre sus contrincantes, mientras en Chiapas, con la candidatura de Eduardo Ramírez, la diferencia entre las aspirantes de la izquierda respecto a sus contrincantes de derecha es abismal.
En Yucatán, el PAN encabeza las preferencias electorales, pero su victoria no es segura. En esta entidad Joaquín “Wacho” Díaz es el candidato de la izquierda. En Guanajuato, los intereses de la derecha han apoyado activamente a su aspirante Libia Denisse García, mientras la candidata de izquierda, Alma Alcaraz, hace su mayor esfuerzo para enfrentarla. En esa entidad del Bajío, el partido albiazul lleva más de 30 años con el control de la gubernatura.
En Jalisco, donde gobierna una fracción de MC dirigida por Enrique Alfaro, la coalición de izquierda –integrada por Morena-PT-PVEM, en alianza con los partidos locales “Futuro” y “Hagamos”— lleva como precandidata a Claudia Delgadillo, quien tiene buenas posibilidades de vencer. El candidato de MC al gobierno del Estado es Pablo Lemus. La coalición prianista marcha muy retrasada con relación a las dos formaciones mayoritarias.
En el senado, como aspirantes para competir por un escaño por la vía plurinominal figuran “Alito” Moreno por el PRI y Marko Cortés, por el PAN. Ambos personajes buscan solo protegerse y buscan impunidad. También figuran otros aspirantes negativos, como el exdirigente del PRI Manlio Fabio Altamirano; Carolina Viggiano. Miguel Riquelme y otros dinosaurios que arrastran costales de desprestigio y acumulan varios lustros viviendo del presupuesto.
