A razón de que hace unos días, se ha estado mencionado lo importante de seguir promoviendo el respeto a la liberta de prensa y de expresión en nuestro país, hoy estimado lector, deseo llevar la siguiente reflexión en torno a dicho derecho.
Consagrado en el artículo 6 Constitucional, podemos señalar que “la manifestación de las ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa, sino en el caso de que ataque a la moral, la vida privada o los derechos de terceros, provoque algún delito, o perturbe el orden público; el derecho de réplica será ejercido en los términos dispuestos por la ley. El derecho a la información será garantizado por el Estado”.
A razón de lo anterior, es necesario decir que si bien este articulo se asocia más al derecho a la información, también es considerado un sustento para poder ejercer la expresión libre de ideas, en espacios que promueven escenarios democráticos; actualmente sus alcances permiten ser los contrapesos de opinión a fin de colocar limites al poder autoritario.
Ahora bien, la libertad de expresión se reconoce como un Derecho Humano en la Declaración Universal de los mismos, en su artículo 19, que señala "Toda persona tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión, este derecho incluye la libertad de mantener opiniones sin interferencia y de buscar, recibir y difundir información e ideas a través de cualquier medio de comunicación e independientemente de las fronteras; ya sea oralmente, por escrito o impreso, en forma de arte, o por cualquier otro medio de su elección".
Por lo anterior, la libertad de expresión permite que periodistas hoy en día promuevan artículos y opiniones que nutren al escenario político, una sociedad que recibe dicha información le genera mayor beneficio en su toma de decisión.
Porque la información es poder, un ciudadano informado, podrá decidir por quien razonar su voto, y hoy es propicio incentivar canales de información con apoyo en la libertad de expresión de periodistas. Para tener mejores escenarios políticos en nuestro país.
Porque en palabras de Vargas Llosa “se puede medir la salud democrática de un país evaluando la diversidad de opiniones, la libertad de expresión y el espíritu crítico de sus diversos medios de comunicación”. Hoy en día, debemos preguntar ¿cómo esta nuestra salud democrática?
Seguimos trabajando, ¡nos leemos pronto!
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