Marisol Cárdenas es la pionera de la venta de productos pirotécnicos en el tianguis de Xoxocotla desde hace 33 años. A pesar de conocer el peligro que enfrenta con esta practica, no está dispuesta a cambiar de giro, ya que es sus sostén de vida y una tradición para su familia.
Actualmente su establecimiento está ubicado en la cabecera municipal de la carretera Alpuyeca, a la altura de Chiverías. Según su trayectoria laboral en este ámbito, las fiestas decembrinas Navidad y Año Nuevo son al igual que los festejos patrios una temporada fuerte de ventas.
Pese a la serie de accidentes trágicos registrados en varios municipios de Morelos, Marisol rechaza la posibilidad de dejar el negocio, “la pirotecnia es una tradición muy arraigada, solo hay que tenerle respeto”, comentó.
La pirotecnia es un negocio muy arraigado en los pueblos donde distribuyen productos hechos a base de pólvora, hay distintos tipos pero los más utilizados son los de luces, explosivos y estruendosos. Dicha práctica está regulada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), quien es la única autoridad que entrega los permisos para su uso y comercialización.
Para Marisol se trata de un negocio que requiere de constante capacitación y renovación, por su parte, asume la responsabilidad de alinearse a las medidas de seguridad que Protección Civil le señala, además de renovar sus permisos para laborar.
En el tianguis de Xoxocotla hay por lo menos ocho vendedores instalados sobre los laterales de la carretera Alpuyeca-Jojutla, ahí reciben a clientes del estado de Guerrero, Ciudad de México y municipios aledaños de Morelos.