A 78 kilómetros de la capital de Morelos, en la región oriente de la entidad, se encuentra una comunidad indígena del municipio de Temoac de nombre Huazulco, que se caracteriza por la elaboración de dulces típicos; el amaranto, el más solicitado, al ser el ingrediente principal de las alegrías; además, en esta temporada se utiliza para la elaboración de las calaveritas.
En dicha comunidad viven 40 familias, las cuales dan trabajo a más de 100 personas en sus talleres de elaboración de dulces típicos; entre ellos, las obleas, alegrías, palanquetas, jamoncillo, paletas y cocadas.
Tesoro de la naturaleza
De acuerdo con productores de Temoac que se dedican a la siembra del amaranto, este producto es un tesoro de la naturaleza, el cual ha sido olvidado por la sociedad, ya que, a diferencia del maíz y de la soya, que han tenido un amplio desarrollo industrial y tecnológico, el amaranto no ha sido explotado, pese a ser un producto que tiene grandes propiedades.
Dicho grano cuenta con un gran valor nutritivo superando en proteína al trigo, el maíz y la avena, y fue en su momento uno de los granos más apreciados en la época de la Conquista; sin embargo, actualmente ha quedado en el olvido.
Actualmente, el amaranto es utilizado en la comunidad de Huazulco y Amilcingo para la elaboración de las alegrías, obleas y, en esta temporada, las tradicionales calaveritas; pero señalan que podría ser explotado para más productos por los muchos beneficios nutricionales con los que cuenta.
Elaboración de calaveritas
Según los productores del amaranto, tras concluir la cosecha, se realiza el tostado, en donde se prepara primero la miel con piloncillo y agua, la cual al lograr una temperatura necesaria, se va mezclando con el amaranto; al lograr una mezcla, se trabaja ya con moldes donde se le dará la forma a la calaverita, la cual se pone y se deja varios minutos hasta que se enfría y se tiene lista.
Posteriormente se trabaja en el decorado, en donde también se realiza una mezcla donde se utiliza azúcar glas y colorante para poder ir creando las líneas o figuras que llevará la calaverita, dando una imagen única, en donde cada una de las personas que la elaboran, le van poniendo su toque y su creación, en donde pueden utilizar diferentes productos que les ayude a decorarla como pasas, chocolate, entre otros.
Tras concluir el decorado, se deja secar para que finalmente se envuelva el producto y se lleve a las tiendas donde se ofrece en diferentes tamaños y precios.