Queridos lectores, estamos transcurriendo los últimos días de marzo. Así que hoy dedicaré la publicación a una mujer singular. A una mexicana que dejó huella en las páginas de los libros de historia.
Como bien hemos relatado, la participación de las mujeres en la Revolución Mexicana fue determinante y decisiva. Y aunque su rol estaba enfocado a proveer de alimentos fungiendo así como cocineras, lavanderas o enfermeras. También es cierto que hubo algunas de ellas que se encargaron del contrabando de armas e información. En este grupo de féminas desafiantes está Petra Herrera.
Oriunda de San Pedro de las Colonias, Coahuila, Petra nació el 19 de junio de 1887. Pese a la poca información que existe de ella. Pudimos apreciar que tuvo un papel destacado en el ejército de Francisco Villa.
De extracción lagunera, esta mujer demostró su audacia en el campo de batalla. Porque Petra no se conformó con ser una simple cocinera. Ella fue capaz de quitarse las enaguas y ponerse pantalón para hacerse pasar por Pedro Herrera.
Incluso se metió tan de lleno en su papel masculino que durante las madrugadas fingía rasurarse la barba, para aparentar que apenas le estaba creciendo.
Petra tuvo que hacerse pasar como Pedro Herrera para adentrarse a la contienda bélica. Y su valentía la demostró de inmediato al poner de manifiesto una de sus estrategias de ataque, la cual consistió en explotar puentes. Además de su gran capacidad de liderazgo.
Una de las victorias más importantes en la que participó Petra fue en la segunda batalla de Torreón, el 30 de mayo de 1914.
Villa desprecio su hazaña pero ella resurgió con batallón propio
Cuando Villa descubrió que Pedro era en realidad Petra, la relegó y no reconoció su contribución a las causas villistas. Incluso intentaron borrar su hazaña. Ante este hecho, ella declinó al batallón y conformó su propio ejército pero con la singularidad de la intervención de casi 400 mujeres.
Tiempo después en 1917 se alió con Venustiano Carranza, convirtiéndose en una leyenda para las mujeres del país. A diferencia de los villistas, los carrancistas veían con buen agrado la inclusión de las mujeres en la lucha armada. Pero los cuadros femeninos solo podían llegar al rango de capitán. Algo que causó enojo en Petra.
Intentó obtener el rango de general pero le fue negado pese a sus notables habilidades militares. Aunque el general Jesús Agustín Castro le confirió el puesto de coronel.
Su ejército se disolvió por órdenes superiores, instante el que Petra comenzó a filtrarse como espía, bajo el disfraz de moza en una cantina. Una noche, un grupo de hombres alcoholizados empezaron a molestarla, desencadenando un grave enfrentamiento. Uno de ellos, descargó su arma en el cuerpo de ella y recibió tres disparos. Tras este atentado, Petra no logró sobrevivir. Murió en 1917.
Petra está en los corridos más famosos de la revolución
Su nombre quedó plasmado en corridos:
"Corrido de las hazañas del general Lojero y la Toma de Torreón por el ejército Liberador", "Corrido de la Toma de Torreón" y “Corrido del combate del 15 de mayo en Torreón” que entre sus versos se encuentran: "La valiente Petra Herrera en el fragor del combate aunque cayó prisionera ni se dobla ni se abate", “La valiente Petra Herrera al combate se lanzó, siendo siempre la primera, ella el fuego comenzó”.
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