La dirección de operativa del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) informó que están trabajando en mecanismos de control que ayuden a evitar el robo de cable subterráneo en sus pozos.
Dante Figueroa Castelar, director operativo del SAPAC, dijo que el pasado 20 de enero se detectó el robo de más de 30 metros de cable subterráneo en el pozo de la colonia La Unión, lo que provocó la suspensión del abastecimiento del vital líquido en la colonia La Unión primera y segunda sección, El Edén y La Nueva Tenochtitlán.
“Desafortunadamente la persona que sustrajo los cables afectó de manera importante porque dejamos sin abasto a cuatro colonias en esa demarcación y nos provocó la falta de abasto por lo tanto el reclamo de la ciudadanía”, explicó Figueroa Castelar.
Asimismo, señaló que el material con el cuál los cables sumergibles están construídos es cobre, lo que los ha convertido en algo llamativo para los ladrones, sin embargo, en este último caso, por la forma en la que se realizó el corte del cable, fue necesario contratar una grúa de tipo telescópica para llevar a cabo el empalme eléctrico y las conexiones correspondientes, así como la sustitución de más de nueve metros de tubería de tipo sumergible.
“En cuestiones monetarias el importe que nos generó fue alrededor de 50 mil pesos, que implicaría el suministro de cable de cuatro ceros, que es el que necesitamos, la renta de la grúa para poder hacer la maniobra, conectores, cintas plásticas y obviamente el tener que ocupar personal para realizarlo”, mencionó el director de operativo.
Asimismo, el funcionario señaló que desde que inició labores la actual administración se han registrado entre cuatro y cinco eventos de esta naturaleza en diferentes pozos, siendo recurrente en el pozo de la colonia Antonio Barona y en el Ajonjolinar, por ello solicitaron el apoyo de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (SEPRAC) para llevar a cabo el procedimiento jurídico.
Entre las medidas que tienen contempladas para este año es canalizar los cables con la finalidad de que ya no sean visibles, así como establecer otro mecanismos de control para que no resulte tan fácil sustraerlos.
Por último mencionó que para esta semana no se tiene programado un corte en el servicio del vital líquido, aunque hay dos pozos que requieren una reparación inmediata, como Rancho Cortés y Delicias, donde los equipos tienen un costo aproximado de 200 mil pesos, sin embargo, debido a la escasez de recursos la compra no se ha realizado.
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