Brigadistas lograron contener al cien por ciento las llamas del incendio en la colonia Del Bosque, sin embargo, faltan labores para apagar en su totalidad las zonas de calor que fueron arrasadas por el fuego, así lo informó Raymundo Rosales, titular del Centro Estatal de Emergencias y Contingencias Ambientales de Morelos.
Raymundo indicó que hasta el inicio de labores de este tercer día, se tiene un 30 por ciento de control.
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Desde las primeras horas de este miércoles se desplegaron 74 elementos de la Secretaría de Desarrollo Sustentable, Bomberos de Cuernavaca, Protección Civil Estatal y Municipal, Conafor, Conanp y el Ejército Mexicano, indicó el titular de emergencias.
Asimismo, desplegaron cinco carros moto bomba en la atención de cuatro diferentes frentes de combate al fuego.
“Esperamos tener un buen avance, el fuego ya no se propagó fuera de la línea de control que estableció ayer el personal operativo, y esperamos tener resultados favorables. Vamos a hacer todo el recorrido para asegurar que el fuego no se reactive”, indicó.
Sobre las viviendas que resultaron afectadas por el fuego, será Protección Civil de Cuernavaca quien se encargue de dar seguimiento a este tema; hasta el momento sólo cuatro personas fueron desalojadas de sus hogares, mientras, otro número de personas decidieron salir por voluntad propia para refugiarse en otros lados.
“Hubo por ahí una persona desalojada y hubo también quienes por las circunstancias moverse temporalmente hacia algún otro espacio”, externó.
Dados los cuadros de humo y el estado de algunos árboles que presentan conatos de fuego, se recomienda a la población no entrar y salir. Además, la señal de internet y telefonía se encuentran perdidas por la caída de postes.
Por otra parte, vecinos de la calle Fresno (una de las más afectadas) externaron que vivieron el miedo de perder su patrimonio, “Si inquietó en un cierto momento cuando tenían controlada la situación los bomberos, pero de repente dio un vuelco el viento y subió el fuego”, indicó Ruth Hiyorsh, originario de Bélgica pero vecino de varios años de la zona.
En el caso de Ruth, las llamas alcanzaron un árbol de la parte trasera de su vivienda y estas por un momento llegaron hasta uno de sus sillones, pero actuaron inmediatamente.
Dijo que, entre el miedo, los nervios y el estrés abandonaron su vivienda tomando documentos y pertenencias de importancias.
“Ahora sentimos que hemos librado algo, nos sentimos contentos y agradecidos con las autoridades quienes estuvieron aquí y siguen trabajando para contener el fuego", concluyó.
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