Al anunciar la apertura de los expedientes del Centro de Investigación y Seguridad Nacional y de la Dirección Federal de Seguridad, el presidente Andrés Manuel Lopez Obrador reclamó que la mayoría de los expedientes son falsos y eran utilizados para perseguir a los opositores.
Es lo que manejaba el Estado para perseguir opositores, no todo lo que ahí se dice es cierto, ahí hay muchos inventos, acomodaban también la información a conveniencia.
Señaló que las personas que en su momento, fueron perseguidas e investigadas por la DFS y el Cisen, podrán recurrir a los archivos para recabar pruebas y presentar denuncias por la persecución que padecieron a manos de la Secretaría de Gobernación en los años 80 y en el movimiento del 68.
Ahí aparece que los policías de entonces tenían esa concepción y era la información que tomaban en la Secretaría de Gobernación para tomar decisiones políticas en los sótanos del poder. Ya si procede que se enjuicie, que se castigue a los responsables.
El director del Archivo General, Carlos Enrique Ruiz Abreu, relato que cuando llegó descubrió que los expedientes estaban custodiados y organizados en una galera del Palacio de Lecumberri por policías y solo los elementos del Cisen tenían la llave del lugar en el que estaban resguardados.
La información consta desde antes de 1985 y a partir de el lunes, los visitantes del Archivo Genera de la Nación podrán entrar para consultar la información sin reservas de información, salvo por los datos sensibles como huellas digitales y tipo de sangre.
El subsecretario de Gobernación, Zoé Robledo, comentó que ya se le está pidiendo a las dependencias gubernamentales que emitieron fichas por violaciones a derechos humanos, persecusión política y corrupción, que entreguen todos los archivos generados de 1985 a la fecha.
Se contabilizaron alrededor de cuatro mil 223 cajas de expedientes y 90 años de información sin clasificar adecuadamente.
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