La familia es la institución más atacada, dijo el obispo Ramón Castro Castro durante la última homilía de este año, que dedicó a la Sagrada Familia. Lamentó que sean los gobiernos quienes más atacan a esta institución.
Durante el sermón habló de los obstáculos y violencia que enfrentan los niños, niñas, adolescentes, padres de familia y adultos mayores día con día.
La drogadicción, el divorcio, la falta de atención al seno familiar son algunos de los ejemplos que expuso monseñor como causas de la descomposición social. Señaló que es necesario fortalecer los valores en casa “para ser personas socialmente responsables, humanas y solidarias con el prójimo”.
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“Hay tantos detractores e ideologías que se pierde el verdadero valor de la familia; el hombre no puede vivir solo ni para sí mismo”.
Monseñor explicó que es válido y necesario también decir “no” a los caprichos que tengan los hijos, alejarlos de los malos hábitos, comportamientos y prácticas desde que son pequeños.
“Darle todo a los hijos no es la solución a los problemas, incluso esto da pie a conflictos más severos que tardan en corregirse; los hijos por su parte tienen la obligación de obedecer a quiénes estén a cargo de su educación, fomentar el amor, evitar las mentiras y siempre ver el bienestar de la familia”, señaló.
El Obispo dijo que a su manera cada quien tiene la labor mejorar por el bien de su entorno a su tiempo.
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