Tras una larga lucha social por la defensa del Parque Melchor Ocampo, los vecinos del barrio de Gualupita, junto con demás asociaciones no gubernamentales de protección al medio ambiente y grupos ambientalistas obtuvieron la suspensión provisional del amparo promovido ante el juzgado sexto del distrito del estado de Morelos, quien objetó, el santuario natural deberá permanecer en las condiciones originales, sin modificar sus áreas verdes, talar los árboles o realizar ningún tipo de remodelación.
Al respecto, el alcalde Antonio Villalobos Adán abortó el proyecto de modernización y, afirmó, los 50 millones de pesos destinados a dicha obra se redirigirán a trabajos de bacheo y obra pública. "Si quieren al parque Melchor Ocampo igual, que se lo queden igual", expresó ante la demanda de la ciudadanía. Asimismo, el fin de semana, vendedores ambulantes ubicado en la periferia del parque fueron desalojado por autoridades de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obra Pública. Tras dialogar, se acordó que sostendrían una reunión este día.
Sin embargo, pese a las disputas, la gente de la comunidad busca recuperar el parque a través de la reactivación de los espacios públicos y la generación de propuestas artísticas y culturales para promoción de dicho espacio, que, como comentan, debe cuidarse y preservarse en su estado natural, ya que se trata de un área natural protegida y un santuario para diversas especies endémicas de la región, como el Cangrejito Barranqueño, pericos y loros silvestres, el gran árbol del Ahuehuete, así como diversos ojos de agua que brotan de un manantial de agua fresca.
Como parte de estas acciones de rescate, dio inicio la 3er Jornada Comunitaria en Defensa del Parque Melchor con una serie de actividades artísticas y culturales, entre las que destacaron la presentación de Estela Barona "La voz del Zenzontle" , reconocida cantante morelense que deleitó al público con su voz y sus composiciones sobre la identidad morelense. Se presentó también el grupo de danza mexica azteca "Gente Roja" quien sorprendió con danzas rituales en honor a la madre tierra y la enérgica danza del colibrí guerrero.
También se presentó el biólogo Diego Viveros con una conferencia sobre el rescate y la conservación del cangrejito barranqueño. Para finalizar, el colectivo cultural Baila Cuba cerró con una presentación que puso a bailar a todos. A la par se impartió un taller de cerámica gratuito, pero sin duda, la sorpresa del día fue la tirolesa infantil que se colocó de árbol a árbol dentro del parque para el disfrute de los más pequeños.
