El presidente de la Asociación de Panaderos Artesanales de Cuernavaca, Jorge Hernández, destacó que el aumento de los insumos preocupa tanto al gremio como a los consumidores: "Históricamente, el precio de la harina se encuentra por encima del azúcar", esto debido que el conflicto entre Rusia y Ucrania es uno de los principales responsables del aumento en el trigo y sus derivados.
Hace un año, un bulto de harina costaba 480 pesos, actualmente tiene un precio que va alrededor de 900 pesos, dijo Jorge Hernández, mientras que un bulto de azúcar se encuentra en 780 pesos. En cuanto a los costos de producción, una telera vale 1.80 pesos y un pan dulce vale 4.80 pesos.
Dicho aumento en los insumos tiene un impacto tanto en los negocios como en los consumidores, pues el pan no sería el único alimento que aumentó sus precios debido al porcentaje de inflación que se registra a nivel mundial, sumado a la aún sensible economía de la población debido a la pandemia.
El presidente de la Asociación de Panaderos Artesanales de la capital del estado dijo estar en constante comunicación con sus compañeros panaderos para tratar de no afectar a los consumidores, pero la producción y ventas van a la baja desde hace dos años, "ha bajado más o menos un 40 por ciento, por lo que estamos establecido estándares en cuanto a los tamaños de los panes".
El Sol de Cuernavaca realizó un recorrido por algunas panaderías del centro, así como supermercados, y se logró identificar que en algunos lugares la pieza de pan dulce se encuentra entre los 7.50 y 10 pesos, mientras que la telera está en 3.5 pesos.
Por su parte, consumidores como doña Leo comentan: "Lo que tengo de gasto ya no me permite llevar pan diario, todavía cuando costaba seis pesos podía llevar, pero ahora ya está en ocho pesos, y más o menos cada tres días llegó a comprar".
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