/ lunes 13 de febrero de 2023

El amor no mata

El amor romántico es detonado voluntaria o inconscientemente como un elemento normalizado de la violencia. Es una idealización que ha conducido, en muchos casos, a la muerte. Hasta en Romeo y Julieta, si tuviera vigor y validez la crítica tan llana y lejanamente retrospectiva.

Los datos conectan realidades necesarias de transformar. La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021, del INEGI, indica que en Morelos el 43.3 por ciento de las mujeres ha sufrido violencia en el espacio comunitario y el 40.8 por ciento en el ámbito de pareja.

Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el año pasado en la entidad se denunciaron 5 mil 205 casos de violencia familiar. A nivel nacional, Morelos ocupa el tercer lugar en feminicidios por cada 100 mil mujeres, con 2.98, y tres de sus municipios, Xochitepec, Cuautla y Cuernavaca, están en el ranking de los 100, con 7.95, 5.45 y 2.33, respectivamente.

Bajo estas condiciones se debe reconocer los esfuerzos por implementar estrategias que ayuden a enfrentar esa realidad. La Comisión Estatal de Seguridad Pública cerró el año 2022 con la entrega de 289 pulseras inteligentes a víctimas de violencia doméstica, que al activarlas transmite la solicitud de ayuda al C5.

La medida funciona en casos en que las mujeres saben quiénes son sus agresores, que de acuerdo con los datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México son en casi un 90 por ciento parejas o ex parejas sentimentales.

La Comisión Ejecutiva para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres estima que el 70 por ciento de las mujeres de Morelos no denuncia por considerar que no fue algo grave.

Promover el reporte y la denuncia, acercar los servicios de atención, y garantizar la inmediatez son factores esenciales para la erradicación de la violencia de género, como lo es también impulsar la deconstrucción del amor romántico para dar paso a relaciones igualitarias, respetuosas y libres de violencia.

El amor no duele ni mata, tampoco es motivo para normalizar la violencia machista bajo la idea de que el agresor “va a cambiar” o fue “algo sin importancia”.

Salvador Guerrero Chiprés

@guerrerochipres

El amor romántico es detonado voluntaria o inconscientemente como un elemento normalizado de la violencia. Es una idealización que ha conducido, en muchos casos, a la muerte. Hasta en Romeo y Julieta, si tuviera vigor y validez la crítica tan llana y lejanamente retrospectiva.

Los datos conectan realidades necesarias de transformar. La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021, del INEGI, indica que en Morelos el 43.3 por ciento de las mujeres ha sufrido violencia en el espacio comunitario y el 40.8 por ciento en el ámbito de pareja.

Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el año pasado en la entidad se denunciaron 5 mil 205 casos de violencia familiar. A nivel nacional, Morelos ocupa el tercer lugar en feminicidios por cada 100 mil mujeres, con 2.98, y tres de sus municipios, Xochitepec, Cuautla y Cuernavaca, están en el ranking de los 100, con 7.95, 5.45 y 2.33, respectivamente.

Bajo estas condiciones se debe reconocer los esfuerzos por implementar estrategias que ayuden a enfrentar esa realidad. La Comisión Estatal de Seguridad Pública cerró el año 2022 con la entrega de 289 pulseras inteligentes a víctimas de violencia doméstica, que al activarlas transmite la solicitud de ayuda al C5.

La medida funciona en casos en que las mujeres saben quiénes son sus agresores, que de acuerdo con los datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México son en casi un 90 por ciento parejas o ex parejas sentimentales.

La Comisión Ejecutiva para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres estima que el 70 por ciento de las mujeres de Morelos no denuncia por considerar que no fue algo grave.

Promover el reporte y la denuncia, acercar los servicios de atención, y garantizar la inmediatez son factores esenciales para la erradicación de la violencia de género, como lo es también impulsar la deconstrucción del amor romántico para dar paso a relaciones igualitarias, respetuosas y libres de violencia.

El amor no duele ni mata, tampoco es motivo para normalizar la violencia machista bajo la idea de que el agresor “va a cambiar” o fue “algo sin importancia”.

Salvador Guerrero Chiprés

@guerrerochipres