Vecinos de la colonia Jardínes de Acapantzingo se manifestaron por la tarde del 23 de diciembre, pues reclaman que desde hace ocho días no cuentan con el vital líquido en esa zona, por lo que, de no restablecerse el servicio de agua antes de las 20:00 horas, amenazaron con cerrar el Paso Express con dirección a Acapulco durante las primeras horas del 24 de diciembre.
El bloqueo del 23 de diciembre se realizó en la calle Ruíz Cortines, a la altura de la entrada del conjunto residencial Los Cizos, en el entronque al Paso Express; este duró un par de horas, y fue levantado alrededor de las 13:30 horas.
Durante la manifestación, la señora Minerva Ventura Ocampo, vecina de la colonia Jardínes de Acapantzingo señaló que llevan más de una semana sin el vital líquido en toda la zona, sin embargo, dijo que en las calles donde momentáneamente se restituyó el servicio, el agua tenía un olor “fétido”.
Ventura Ocampo señaló que el pozo de Amatitlán, es el que les abastece el vital líquido, no obstante, en días pasados los responsables del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) habían tenido un acercamiento con ellos, y les habían comentado que la bomba del pozo se encontraba averiada.
Por lo que hizo un llamado a las autoridades municipales, así como al SAPAC, para que atiendan las necesidades de la colonia. Ante la denuncia de los ciudadanos, el SAPAC había prometido enviar unas pipas en lo que solucionaban el problema, misma que nunca llegaron a las casas de los vecinos.
"Que nos echen el agua, o que nos den solución, y ya nos quitamos... Mandan pipas, pero no llegan a las privadas... Estamos aquí para una solución rápida", explicó Ventura Ocampo.
Caos vial por manifestaciones
Cabe mencionar que, este es el tercer día consecutivo en el que la ciudad sufre caos vial debido a manifestaciones, puesto que desde el miércoles pasado, trabajadores del SAPAC cerraron la vialidad en la colonia El Miraval, a la altura de El Túnel, debido a que exigían el pago de la primera parte del aguinaldo.
El jueves, nuevamente los trabajadores del SAPAC volvieron a tomar las calles, dejando sin tránsito la calle Eugenio J. Cañas y Francisco I. Madero; aunado a ello, al norte de la ciudad y en la entrada de la Ciudad de México, a la altura de la Paloma de la Paz, el Sindicato Mexicano de Salud (SIMESA) cerró la vialidad por unas pocas horas, puesto que exigían el pago de vales, así como la parte proporcional del aguinaldo.
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