A un año del deslave de la colonia de Los Pilares, en el cual tres mujeres perdieron la vida, el alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, señaló que hasta el momento la zona continúa siendo inestable y de alta peligrosidad, por lo que la recomendación de evacuarla sigue en pie.
Urióstegui Salgado mencionó que una de las acciones que tiene que tomar el Ayuntamiento para salvaguardar a la ciudadanía es reubicar las más de 400 tumbas que están al ras del talud, esto para que al suelo que se encuentra inestable ya se le pueda practicar un derrumbe controlado.
“Seguimos avanzando con el rescate de ataúdes que estaban a la vista, fueron trasladados a otro espacio, y necesitamos mover alrededor de 400 tumbas más, para poder liberar el terreno y hacer un trabajo para lograr que el terreno que está más inestable, pueda tirarse de manera controlada y que no afecte las viviendas, ese es el tema, pero no podemos llevarlo a cabo mientras las tumbas estén ocupadas", explicó el munícipe de Cuernavaca.
En cuánto a las propuestas de proyectos para contener el área afectada, el edil señaló que la inversión podría oscilar entre 100 y 200 millones de pesos, sin embargo, no cuentan con el recurso, por lo que podrían apostar a soluciones intermedias y otras que podrían considerarse más complejas.
Los proyectos van desde la construcción de un muro de contención, de la parte baja a la más alta, otra es la creación de terraplenes, y con ello sacar material y realizar trabajos escalonados, sin embargo, representa mucho movimiento y no podrá haber grandes beneficios.
Otra de las opciones que el Alcalde dijo que le fueron propuestas es que los vecinos sean removidos del lugar y trasladados a otro, aunque esta alternativa es sumamente costosa para las arcas municipales, por lo que el derrumbe controlado es la solución más práctica y a corto plazo.
“Mientras no logremos convencer a todas las personas que tienen a sus familiares sepultados aquí, no podemos llevar a cabo los trabajos… Mantenemos una vigilancia permanente a través de Protección Civil del municipio, y del estado, así como la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, y la de Desarrollo Sustentable y Servicios Públicos”, explicó Urióstegui Salgado.
Por último, el alcalde de Cuernavaca señaló que en la zona adaptaron una canaleta para desviar el agua que pudiera llegar a la orilla, y que provoca el reblandecimiento de la tierra, y no se concentre en un mismo sitio.
"Se construyó una canaleta para que el agua que llegaba hasta la orilla y provocaba más debilidad en el terreno, se encauza de manera distinta y esto ha logrado parar un poco el riesgo", explicó el edil.
Urióstegui Salgado comentó que en últimas fechas esta zona se registraron dos deslaves más, sin embargo, estos no fueron de gravedad y en una ocasión sólo afectó la techumbre de una vivienda, por lo que las personas que requieran una vivienda momentánea también podrán hacer uso del albergue habilitado en la ayudantía del poblado de Chipitlán.
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