El vicario de la Diócesis de Cuernavaca, Tomás Toral Nájera, calificó como injusta y malvada la manera en como presuntamente la anterior administración, por medio del espionaje, intenta de alguna manera sabotear las acciones del actual gobierno. Indicó que, posiblemente, es una forma de dar continuidad a una estrategia de venganza o de mala voluntad que atenta no solo en contra del gobierno, sino también en contra del Estado, ya que no se sabe para qué pueda ser utilizada dicha información.
Debido a lo anterior, hizo un llamado a los responsables a que permitan al actual gobierno trabajar, pues "no tienen el derecho de incurrir en la intimidad de las personas ni en la administración de otras".
Asimismo, refirió que están consientes de que la pasada administración dejó mucho que desear en varios aspectos; sin embargo, no se sabe con claridad en qué otros posibles actos de maldad pudieron haber incurrido, lo cual es preocupante; de igual manera para la Diócesis, que busca esta vez poder trabajar de la mano con la administración estatal, en busca del bienestar de un Estado que se encuentra muy fracturado y olvidado.
Por otra parte, Tomás Toral Nájera invitó a los jóvenes a tomar el papel que les corresponde en la Iglesia y en la sociedad. Aclaró que este año se proclamó como el año de la juventud, en el cual miles de jóvenes participaron en actividades diversas para cumplir un papel como misioneros del evangelio; añadió que dichas actividades culminarán en enero, en Panamá, con una jornada mundial, en donde se hará presente el Papa Francisco como en cada una de las jornadas mundiales pasadas.
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