/ lunes 21 de enero de 2019

Cuauhtémoc fue perseguido: INE

Se intentó quitarle la candidatura y hasta anular el resultado de la elección del hoy gobernador

(Primera de dos partes)

Cuauhtémoc Blanco fue agobiado y perseguido, antes y después de ganar la elección de 2018, advierte el vocal Ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE), Pablo Sergio Aispuro Cárdenas, en exclusiva con El Sol de Cuernavaca y El Sol de Cuautla, y reconoce que hubo intentos tanto de quitarle la candidatura al hoy gobernador del estado, y también de anular el resultado de la elección, además de múltiples ataques cuando era alcalde de Cuernavaca.

En su despedida de Morelos (en unos días se hará cargo de la Vocalía Ejecutiva del INE, en San Luis Potosí), Pablo Sergio habla del proceso electoral de 2018, de la intervención del Gobierno estatal en el proceso, de la política en Morelos, y de los retos para la democracia con una advertencia terrible:

Lo que encontré aquí es que no está tan fuerte el sistema electoral, que faltan mecanismos para fortalecerlo, que un Ejecutivo o un Poder Legislativo pueden poner en riesgo la integridad y la solidez de eso, lo que ya también, dice, se percibe en el plano nacional.

El contexto: la política en Morelos

Antes de irse a San Luis, donde ya fue vocal Ejecutivo, Pablo Sergio apunta las diferencias entre la entidad donde ya había sido Vocal Ejecutivo, y Morelos. La primera es de una política tersa en comparación con la fuerza de los morelenses, donde se hablan golpeado y se tratan golpeado, dice, “aquí están muy vivas las fuerzas, al municipio al que vas, sí ves inmediatamente las tensiones”.

-¿Morelos te preparó para casi cualquier cosa?- preguntamos.

- Yo diría que sí. Es interesante decirlo, pero Morelos me preparó para cualquier cosa, la verdad. No había vivido, yo no había tenido un escenario como este donde fuese necesario, incluso, no solamente dejar una maquinaria muy aceitada para que operara la elección federal cuando yo estoy haciendo otras cosas. Es decir, mis compañeras y compañeros haciendo y preparando la elección, cuando el vocal Ejecutivo estaba acercándose al Gobierno del Estado, a los partidos, al Congreso local, al organismo local electoral para generar las condiciones" para elecciones en paz.



Graco Ramírez puso en riesgo la elección

- Lo primero que te deberíamos de preguntar y creo que es la duda que todo mundo tiene ¿No? Este asunto de los recursos, del castigo de recursos al Impepac, etcétera, decía la maestra Ana Isabel que Graco (Ramírez, el ex gobernador de Morelos) puso en riesgo la elección ¿Tú compartes esa idea?

- Sí.

-¿Sí?

-... Yo lo dije varias veces durante el proceso que no me parecía muy responsable la manera en cómo se estaba conduciendo el Ejecutivo, como se estaba conduciendo el Congreso. No puedes meter en la misma canasta al Instituto responsable de procesar la transición del poder público que otras instituciones. En ese momento, si no fue prioridad para el gobernador y para el Congreso sostener bien al Instituto Electoral local fue una enorme irresponsabilidad, porque de la organización de elecciones ágiles, transparentes, limpias, depende la estabilidad y la gobernabilidad del Estado. Si se hubiera caído la elección, malo; si hubiese habido violencia el día de la elección, malo. Realmente, fue grave lo que sucedió en el estado de Morelos. Yo no conozco a fondo por qué no había recursos en el Estado... lo que sí vi grave es que no se le allegaran recursos al organismo electoral, y sí creo que la estructura del Poder Ejecutivo precedente, y también creo que las decisiones de la Legislatura, precedente, fueron de una enorme irresponsabilidad.



-¿Llegó un momento en el que tú dijeras ‘Esto no va a salir’?

- La verdad es que no, yo le eché tantas ganas como mis compañeras, y mis compañeros en todo el estado, estuvimos muy cerca de… o sea tenía que salir. Es decir, nunca me plantee ‘Esto no sale’, nunca hice la llamada a México diciendo ‘Esto no sale’. Tenía que salir, hicimos todo para que saliera, cuando… sustituimos, suplimos, metimos elementos para que digamos, pusimos sobre la marcha la llanta que faltaba, la bujía que hacía falta al chofer, hicimos lo que pudimos. Estuvieron aquí, qué te gusta, ocho, nueve, 10 funcionarios nuestros, de ahí sacamos… porque llegó un momento en el que se hizo intransitable la gestión del OPLE (Organismo Público Local Electoral, en el caso, del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana, Impepac), es decir los propios consejeros y consejeras no se ponían de acuerdo, lo que resulta lamentable, para la designación de funcionarios centrales de la operación institucional. Es decir, me parece que a ratos les faltó generosidad, y los aprecio a todos, te lo quiero decir, con todos tengo una magnífica relación, les faltó altura de miras para, aun cuando no tuviesen todas las simpatías con la Presidencia, pensar primero en el proceso electoral, en lo fundamental para resolver temas en los que tuvo que entrar el INE.

Llegó el primero de julio y el reto era enorme

Para que la elección fuera transitable, Pablo Sergio Aispuro junto al INE y al Impepac, tenían que lidiar con la tardía entrega de recursos, con el ríspido ambiente político del estado: “Trabajé muy de cerca con la presidenta (Ana Isabel León Trueba del Impepac). La presidenta sintió mi colaboración y mi afecto personal y yo sentí el de ella, compartimos muchas veces, muchos momentos complicados. La hice fuerte no solamente porque creí y creo en ella sino porque lo exigía la integridad del proceso electoral, y finalmente, salió, y salió bien; hubo que trabajar en muchas pistas, hubo que trabajar con los partidos políticos, hubo que trabajar. Hubo que trabajar con los consejeros y las consejeras, o con los nuestros del Instituto Nacional Electoral aquí, con los nuestros en México, con el secretario Ejecutivo, con el presidente; acercarnos al Gobierno del Estado. Se trabajó en muchas pistas”.

Y desde la mañana del primero de julio “hablé con prácticamente todos los presidentes de los partidos, estuvimos atentos, en algunos momentos de tensión y preocupación, había amenazas en el ambiente de que podía pasar algo me recibieron bien la llamada... les pedí que bajaran la presión… y yo me voy agradecido con todos los dirigentes, con todos los dirigentes de los partidos políticos del estado de Morelos porque todos respondieron con alto sentido patriótico", me refiero a los presidentes de los partidos, no sé la militancia acelerada, entusiasta que trae otras dinámicas, pero las llamadas con los presidentes fueron muy eficaces y me siento muy agradecido con eso.

Cuauhtémoc Blanco es un hombre bien intencionado

Ayudó también a que se transitara en paz que el margen con el que ganó el ahora gobernador fuera tan amplio, más de 50 por ciento de la votación. Y sobre el hoy gobernador, Pablo Sergio expone: “a mí me parece que Cuauhtémoc Blanco es un hombre bien intencionado, quizá con poca formación política. Lo que yo sé, lo que yo vi fue un agobio, voy a quitarle pecados que tenga, ni los conozco, ni me toca, lo que yo vi fue un funcionario, un edil agobiado, preocupado, angustiado en ese momento, me tocó platicar en algún primer momento con él, pero te repito, yo no exculpo porque no conozco la historia de atrás de esto. Lo que sí sé es que ganó la Gubernatura del estado y hoy es el gobernador. Lo que sí sé, es que hubo momentos complicados en donde hubo intentos de tumbarle la candidatura y eventualmente anular el resultado de la elección, eso es lo que yo puedo decir”.

(Primera de dos partes)

Cuauhtémoc Blanco fue agobiado y perseguido, antes y después de ganar la elección de 2018, advierte el vocal Ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE), Pablo Sergio Aispuro Cárdenas, en exclusiva con El Sol de Cuernavaca y El Sol de Cuautla, y reconoce que hubo intentos tanto de quitarle la candidatura al hoy gobernador del estado, y también de anular el resultado de la elección, además de múltiples ataques cuando era alcalde de Cuernavaca.

En su despedida de Morelos (en unos días se hará cargo de la Vocalía Ejecutiva del INE, en San Luis Potosí), Pablo Sergio habla del proceso electoral de 2018, de la intervención del Gobierno estatal en el proceso, de la política en Morelos, y de los retos para la democracia con una advertencia terrible:

Lo que encontré aquí es que no está tan fuerte el sistema electoral, que faltan mecanismos para fortalecerlo, que un Ejecutivo o un Poder Legislativo pueden poner en riesgo la integridad y la solidez de eso, lo que ya también, dice, se percibe en el plano nacional.

El contexto: la política en Morelos

Antes de irse a San Luis, donde ya fue vocal Ejecutivo, Pablo Sergio apunta las diferencias entre la entidad donde ya había sido Vocal Ejecutivo, y Morelos. La primera es de una política tersa en comparación con la fuerza de los morelenses, donde se hablan golpeado y se tratan golpeado, dice, “aquí están muy vivas las fuerzas, al municipio al que vas, sí ves inmediatamente las tensiones”.

-¿Morelos te preparó para casi cualquier cosa?- preguntamos.

- Yo diría que sí. Es interesante decirlo, pero Morelos me preparó para cualquier cosa, la verdad. No había vivido, yo no había tenido un escenario como este donde fuese necesario, incluso, no solamente dejar una maquinaria muy aceitada para que operara la elección federal cuando yo estoy haciendo otras cosas. Es decir, mis compañeras y compañeros haciendo y preparando la elección, cuando el vocal Ejecutivo estaba acercándose al Gobierno del Estado, a los partidos, al Congreso local, al organismo local electoral para generar las condiciones" para elecciones en paz.



Graco Ramírez puso en riesgo la elección

- Lo primero que te deberíamos de preguntar y creo que es la duda que todo mundo tiene ¿No? Este asunto de los recursos, del castigo de recursos al Impepac, etcétera, decía la maestra Ana Isabel que Graco (Ramírez, el ex gobernador de Morelos) puso en riesgo la elección ¿Tú compartes esa idea?

- Sí.

-¿Sí?

-... Yo lo dije varias veces durante el proceso que no me parecía muy responsable la manera en cómo se estaba conduciendo el Ejecutivo, como se estaba conduciendo el Congreso. No puedes meter en la misma canasta al Instituto responsable de procesar la transición del poder público que otras instituciones. En ese momento, si no fue prioridad para el gobernador y para el Congreso sostener bien al Instituto Electoral local fue una enorme irresponsabilidad, porque de la organización de elecciones ágiles, transparentes, limpias, depende la estabilidad y la gobernabilidad del Estado. Si se hubiera caído la elección, malo; si hubiese habido violencia el día de la elección, malo. Realmente, fue grave lo que sucedió en el estado de Morelos. Yo no conozco a fondo por qué no había recursos en el Estado... lo que sí vi grave es que no se le allegaran recursos al organismo electoral, y sí creo que la estructura del Poder Ejecutivo precedente, y también creo que las decisiones de la Legislatura, precedente, fueron de una enorme irresponsabilidad.



-¿Llegó un momento en el que tú dijeras ‘Esto no va a salir’?

- La verdad es que no, yo le eché tantas ganas como mis compañeras, y mis compañeros en todo el estado, estuvimos muy cerca de… o sea tenía que salir. Es decir, nunca me plantee ‘Esto no sale’, nunca hice la llamada a México diciendo ‘Esto no sale’. Tenía que salir, hicimos todo para que saliera, cuando… sustituimos, suplimos, metimos elementos para que digamos, pusimos sobre la marcha la llanta que faltaba, la bujía que hacía falta al chofer, hicimos lo que pudimos. Estuvieron aquí, qué te gusta, ocho, nueve, 10 funcionarios nuestros, de ahí sacamos… porque llegó un momento en el que se hizo intransitable la gestión del OPLE (Organismo Público Local Electoral, en el caso, del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana, Impepac), es decir los propios consejeros y consejeras no se ponían de acuerdo, lo que resulta lamentable, para la designación de funcionarios centrales de la operación institucional. Es decir, me parece que a ratos les faltó generosidad, y los aprecio a todos, te lo quiero decir, con todos tengo una magnífica relación, les faltó altura de miras para, aun cuando no tuviesen todas las simpatías con la Presidencia, pensar primero en el proceso electoral, en lo fundamental para resolver temas en los que tuvo que entrar el INE.

Llegó el primero de julio y el reto era enorme

Para que la elección fuera transitable, Pablo Sergio Aispuro junto al INE y al Impepac, tenían que lidiar con la tardía entrega de recursos, con el ríspido ambiente político del estado: “Trabajé muy de cerca con la presidenta (Ana Isabel León Trueba del Impepac). La presidenta sintió mi colaboración y mi afecto personal y yo sentí el de ella, compartimos muchas veces, muchos momentos complicados. La hice fuerte no solamente porque creí y creo en ella sino porque lo exigía la integridad del proceso electoral, y finalmente, salió, y salió bien; hubo que trabajar en muchas pistas, hubo que trabajar con los partidos políticos, hubo que trabajar. Hubo que trabajar con los consejeros y las consejeras, o con los nuestros del Instituto Nacional Electoral aquí, con los nuestros en México, con el secretario Ejecutivo, con el presidente; acercarnos al Gobierno del Estado. Se trabajó en muchas pistas”.

Y desde la mañana del primero de julio “hablé con prácticamente todos los presidentes de los partidos, estuvimos atentos, en algunos momentos de tensión y preocupación, había amenazas en el ambiente de que podía pasar algo me recibieron bien la llamada... les pedí que bajaran la presión… y yo me voy agradecido con todos los dirigentes, con todos los dirigentes de los partidos políticos del estado de Morelos porque todos respondieron con alto sentido patriótico", me refiero a los presidentes de los partidos, no sé la militancia acelerada, entusiasta que trae otras dinámicas, pero las llamadas con los presidentes fueron muy eficaces y me siento muy agradecido con eso.

Cuauhtémoc Blanco es un hombre bien intencionado

Ayudó también a que se transitara en paz que el margen con el que ganó el ahora gobernador fuera tan amplio, más de 50 por ciento de la votación. Y sobre el hoy gobernador, Pablo Sergio expone: “a mí me parece que Cuauhtémoc Blanco es un hombre bien intencionado, quizá con poca formación política. Lo que yo sé, lo que yo vi fue un agobio, voy a quitarle pecados que tenga, ni los conozco, ni me toca, lo que yo vi fue un funcionario, un edil agobiado, preocupado, angustiado en ese momento, me tocó platicar en algún primer momento con él, pero te repito, yo no exculpo porque no conozco la historia de atrás de esto. Lo que sí sé es que ganó la Gubernatura del estado y hoy es el gobernador. Lo que sí sé, es que hubo momentos complicados en donde hubo intentos de tumbarle la candidatura y eventualmente anular el resultado de la elección, eso es lo que yo puedo decir”.

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