Mariana era un joven alegre que le gustaba socializar con la gente, pero esa característica le costó la vida. Sus amigos y familiares la recuerdan como una buena niña que no merecía morir a manos de unos sujetos, por el hecho de negarse a tener relaciones sexuales.

Su cuerpo, sin vida, desnudo y con sellos de violencia apareció la madrugada del 10 de mayo en el circuito Santa Fe del poblado de Alpuyeca, en Xochitepec. Por ese hecho, la Fiscalía General del Estado (FGE) detuvo a dos presuntos implicados en el feminicidio de Mariana, la joven de 21 que aspiraba a ser diseñadora de modas y profesional en el fútbol americano.

Alrededor del mediodía de este domingo, sus familiares colocaron un retrato, donde se le ve feliz, en la Ofrenda de las Víctimas instalada en las puertas del Palacio de Gobierno; ahí se encuentran más de 50 fotografías de personas que perdieron la vida a consecuencia de la inseguridad que impera en el estado.

Kenia Hernández y Daniel Méndez, amiga y primo de Mariana, exigieron a las autoridades justicia y castigo a los responsables, porque a la joven que le cortaron las alas cuando vivía una de sus mejores etapas. Exigieron modificar las leyes para que los delincuentes piensen dos veces antes de actuar, ya que con sanciones menores, cualquiera puede cometer algún delito.

“Lo que hicieron es no tener madre”, dijo Daniel, al señalar como brutal la violencia cometida contra su prima, al mismo tiempo pidió a las familias rescatar los valores en el hogar, y al Gobierno, implementar acciones en prevención del delito, así como retomar las materias en las aulas que refuercen los temas educativos, porque, ante la falta de valores, los jóvenes están cayendo en manos de la delincuencia, en busca de una vida fácil.

Ella estaba en el bar y ahí conoció alguien que estaba con ellos y fue como empezó a platicar, hacer una vida sociable con nuevas personas. Era muy buena en el fútbol americano, se le veía futuro, pero le cortaron la vida cuando estaba viviendo una de sus mejores épocas, expresó Kenia, amiga de Mariana desde hace ocho años.

Ahora ya no está con nosotros, ya no tiene voz, pero estamos sus amigos para gritar por ella, para gritar justicia que debe tener porque no es justo lo que se están haciendo; queremos que descanse en paz donde fue sepultada, uno de los lugares que le gustaba tanto por el frío. De igual forma disfrutaba bailar y cantar; era una niña maravillosa por dentro y por fuera.

Daniel Méndez lamentó la muerte de Mariana, por lo que pidió a las autoridades hacer su trabajo y hacer justicia para que éste no sea un caso más que quede impune, y al rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Gustavo Urquiza Beltrán, le exigió hacer su trabajo y si no puede que renuncie, luego de pronunciarse en señal de una supuesta forma violenta en la detención de los estudiantes.

No hubo fuerza de autoridad, lo que hicieron fue su trabajo, por eso necesitamos que el rector haga su trabajo y si no puede que renuncie y que deje alguien competente porque es delicado lo ocurrido, dijo.

Por ese hecho, los familiares y amigos de Mariana preparan una manifestación en las instalaciones de la UAEM este día, alrededor del mediodía.