El panorama de largo plazo para la inflación aún presenta riesgos al alza, a pesar de las recientes disminuciones en el indicador y una resiliencia macroeconómica, argumentó Alejandrina Salcedo, directora general de Investigación Económica del Banco de México (Banxico).
Durante su participación en un foro organizado por Fitch Ratings, Salcedo destacó que incluso prevalece la incertidumbre por el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania, mismo que podría seguir presionando el costo de diversas materias primas.
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“El balance de riesgos en este caso se mantiene sesgado al alza, porque a pesar de que se espera que las presiones inflacionarias globales se sigan reduciendo, la persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados es un riesgo latente”, precisó la directiva de Banxico.
Ayer, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer que durante la primera quincena de julio la inflación general fue de 4.79 por ciento, su nivel más bajo desde la primera mitad de marzo de 2021 y el quinto descenso al hilo.
Según el Inegi, en el periodo de referencia la inflación descendió debido a una caída anual de 7.92 por ciento en el costo de los energéticos y algunos alimentos como el huevo, jitomate, uva, papa y otros tubérculos.
Alejandrina Salcedo recordó que para mitigar el alza de precios en bienes y servicios, Banxico llevó a niveles históricos de 11.25 por ciento la tasa de interés referencial. Cada decisión de política monetaria, acotó, se tomó con toda la información económica disponible.
“El entorno actual todavía impone desafíos y no debemos ser complacientes al enfrentarlos, aunque también presentan nuevas oportunidades y debemos estar listos para poderlas aprovechar”, precisó la especialista.
Sobre el crecimiento económico del país, Salcedo resaltó la resiliencia de la economía mexicana ante diversos choques externos, tanto antes como después de la crisis sanitaria, incluyendo la guerra de Rusia y Ucrania.
Actualmente, la relocalización de empresas extranjeras en el país, un fenómeno económico conocido como nearshoring, también representa una oportunidad para la expansión del Producto Interno Bruto (PIB), aunque prevalecen algunos retos estructurales.
“Hay retos y oportunidades estructurales, aquí la reconfiguración de las cadenas globales podría representar una oportunidad para el país, pero no debemos olvidar también todos aquellos retos que ya teníamos desde antes de la pandemia o aquellos retos que la pandemia ha traído consigo; podemos pensar en alguno como el cambio climático”, concluyó la experta de Banxico.
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