Medardo Tapia Uribe, investigador del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la Universidad Nacional Autónoma de México, detalló que la seguridad pública es aquella que brinda el gobierno y se debe garantizar a la población para no vulnerar lo que se refiere a la seguridad personal.
Explicó que actualmente es una de las principales demandas de la sociedad, ya que afecta la seguridad personal debido al alto índice de delincuencia que priva en diferentes municipios de la entidad.
El especialista recordó que hace algunos años Morelos también fue foco en temas de delincuencia e inseguridad, pues en el estado se registraron delitos de mayor impacto, como homicidio y secuestro, entre otros, los cuales vulneran la seguridad personal.
Sostuvo que uno de estos delitos que lastiman la seguridad personal es el feminicidio, en virtud de que se ha logrado observar que éste va a la alza y por esa razón Morelos se ubica en los primeros lugares de incidencia delictiva.
“Hemos visto que este delito deja una huella en las víctimas directas e indirectas, además de que también marca a la sociedad, la cual piensa que esto le puede pasar a cualquier mujer, es decir, se vulnerada la propia seguridad personal de los ciudadanos”, explicó.
Corrupción, el eterno mal
El problema de seguridad que hay en Morelos y que vulnera la seguridad y permite la criminalidad es la corrupción, y esto tiene que ver porque las instituciones son capturadas por personas o grupos que se apropian de estas, manifestó.
Y es que se ha mostrado que algunas dependencias han sido tomadas por la delincuencia organizada y aseguró que no es un problema privativo de Morelos, sino de otros estados también.
“En este tema de Guacamaya Leaks de filtración de información de la Sedena supimos el caso del Sistema de Agua de Cuernavaca que fue tomado por la delincuencia, pero no solo eso, también se habló que algunos alcaldes fueron tomados por estos grupos”, detalló.
Este problema, dijo, no es reciente ya que se viene arrastrando desde hace muchos años, por lo que los niveles de corrupción vienen a pegar en la seguridad personal porque vemos que se vulnera a la persona y sociedad, agregó.
Inclusión de la sociedad
En ciudades y países con situaciones críticas de violencia en las que se ve muy afectada la seguridad personal, la sociedad ha buscado dar atención al problema de seguridad pública, pero se debe buscar un vínculo que sea efectivo para la participación social. Para ello, Tapia Uribe consideró que no se debe enfrentar a la sociedad con la delincuencia.
Puso como ejemplo el caso de Ciudad Juárez, donde para atender el tema de inseguridad fue necesaria la inclusión de la sociedad, que de manera periódica pedía la rendición de cuentas, es decir, cada mes o cada semana las autoridades policiales y las encargadas de impartir justicia tenían que decir cómo estaban trabajando y los resultados logrados.
O sea que ellos conformaron mesas de seguridad ciudadana encabezadas por la sociedad, las cuales a su vez se enfrentaron al gobierno federal en una reunión para informar sobre los asesinatos de mujeres y otros hechos.
“En Ciudad Juárez armaron estas organizaciones sociales, comités, en donde la sociedad exigía a las autoridades la rendición de cuentas de esas colonias y barrios que registraban mayor índice de violencia y esto fue muy efectivo porque pedían cuentas a todas las dependencias de gobierno de distintos niveles".
Y detalló: "Se creó una policía de proximidad social que era cercana a la población y conocía los problemas que se tenían en cada una de las colonias y no como en municipios que tienen sus carteles en donde la población dice delincuente si te cachamos te linchamos”.
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