La cuarentena no es para todos, al menos no para don Adelaido Pareja, de 78 años de edad, quien pese a su edad y su salud elabora florecitas de colores para enfrentar la cuarentena.
Sus manos lucen maltratadas, pero aún así son fundamentales para el sustento de su familia.
Carga una vieja mochila donde lleva pedazos de tela e hilos de todos colores para trabajar. A veces con comida en el estómago, otras no.
Don Adelaido sale todos los días al centro de Cuautla para colocarse en alguna esquina y comenzar a crear sus flores, flores de tela que elabora para vender.
Las coloca en plumas o en algún alambre para que sirvan de decoración.
Ya lleva años elaborando las flores, y es con esta labor como saca a su familia adelante.
Cada flor cuesta 15 pesos. Las elabora con tela de raso. Él corta la tela, la deshila, la enrolla y dobla hasta crear la flor.
En el periodo del ex presidente Felipe Calderón, don Adelaido vivía en la Ciudad de México y allá vendía las mismas flores, sin embargo, por cuestiones de salud cambió su residencia a Cuautla y acá continúo con su creación.
Ahora, a pesar del coronavirus, don Adelaido se ve forzado a trabajar, ya que afirma que de lo contrario no comería.
Se dice afortunado de gozar de buena salud.
Sin embargo, al ser una persona de la tercera edad, grupo vulnerable para el Covid-19, debería contar con un resguardo domiciliario.
Pero, cada mañana sale con su cubrebocas hacia el Centro de Cuautla.
Hay días que nomás sale para las puras tortillitas, cómo cree que vamos a dejar de trabajar si, al menos mi familia, no está en posición de dejar de hacerlo. Estoy con mi hijo que trabaja como albañil, pero a él también ya lo dejaron sin trabajo. No tenemos dinero y son estas flores las que nos dan para comer
Afirma que las autoridades no le han dicho nada ni lo han corrido de las plazas públicas, sin embargo para él, igual que muchas otras familias que van al día, una cuarentena no es posible.
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