Cinco heridos, tres custodios y dos internos, fue el saldo de un amotinamiento registrado la mañana de ayer al interior del Centro Federal de Readaptación Psicosocial (Ceferepsi) ubicado en Ayala.
Aproximadamente a las 11:50 horas, autoridades fueron enteradas de que al interior del Ceferepsi se registró la riña, por lo que se solicitó el apoyo de las autoridades y refuerzo de elementos de seguridad; al lugar acudió personal de la Policía Federal, Mando Coordinado, Ejército y la Guardia Nacional, quienes custodiaron la zona e ingresaron al penal; posteriormente arribó una unidad canina de la Policía Federal.
Durante más de una hora el helicóptero de la Policía del Mando Coordinado sobrevoló el lugar y alrededor de las 14:00 horas del Ceferepsi salieron de las instalaciones cinco ambulancias.
Aproximadamente a las 16:00 horas, al lugar arribó un helicóptero de la Policía Federal que permaneció al interior del penal por espacio de media hora para, posteriormente, sobrevolar la zona.
Poco a poco, familiares de los custodios llegaron al lugar para solicitar a las autoridades información sobre los hechos, al no tener ningún tipo de contacto con sus familiares. Un elemento de la Policía Federal informó que tres custodios resultaron heridos por golpes y fueron trasladados al Hospital ISSSTE de Cuautla, donde posteriormente se informó que se encontraban estables, y dos reos lesionados, que fueron trasladados al Hospital General de Cuautla con lesiones producidas con arma blanca. El nosocomio fue resguardado por elementos de la Policía Federal.
De acuerdo con familiares de los custodios, la riña se registró entre dos grupos de internos que se encontraron en los pasillos, por lo que los guardias, al intervenir para separarlos, fueron agredidos a golpes por los internos.
En el lugar, elementos policíacos informaron que un interno habría muerto, sin embargo, hasta el cierre de la edición ninguna autoridad ha confirmado lo ocurrido y sobre el saldo de este amotinamiento.
Presos pueden usar móviles en penal de Atlacholoaya
El fin de semana, el secretario de Gobierno, Pablo Ojeda Cárdenas, confirmó que en Atlacholoaya existen varias carencias técnicas, como un sistema de videovigilancia deficiente y los inhibidores de telefonía celular son disfuncionales, a lo que atribuyó las constantes riñas al interior del penal; sin embargo, presumió que las autoridades tienen el control del lugar.
Asimismo, no descartó más traslados de otros reos peligrosos y prácticamente responsabilizó del desorden al hijo de El Carrete, quien fue uno de los trasladados al penal de máxima seguridad ubicado en Guanajuato, tras la última riña registrada la semana pasada, que dejó como saldo dos muertos.
