La búsqueda del menor Antonio Alexander, de 11 años, podría extenderse a otros estados. El menor desapareció desde hace 28 días en el rancho Los Brailes en la colonia Emiliano Zapata, en Tlaquiltenango, donde trabajaba su padre y a quien encontraron muerto en la zona cerril tres días después.
Desde entonces su madre, María Inés Salgado Nava, sigue pidiendo ayuda.
“Les pido de la manera más atenta que se compadezcan, que me regresen a mi niño, sin duda son ustedes padres y no quisiera que sufran lo que estamos sufriendo”, dijo al manifestar que él simplemente acompañaba a su papá a trabajar.
María Inés destacó que desde la desaparición de su hijo ha dejado de trabajar para salir a buscarlo con el apoyo de sus vecinos y a veces con el apoyo de la Fiscalía y policías de este municipio; han buscado entre el cerro, en los campos, en los surcos y en canales y no han encontrado un solo rastro del niño, por lo que teme se lo hayan llevado lejos o quieran quitar la vida.
En el desamparo
Sin ninguna ayuda más que la de su hijo mayor que trabaja para que ella pueda seguir buscando a su hermano, refiere que salen desde temprano con un simple vaso de agua en el estómago y "con la bendición de Dios", aunque sus vecinos se apiadan de ella y le dan un taco.
Recuerda ese trágico jueves 30 de junio en que el padre de su hijo fue por él para que lo acompañara a trabajar, pero ya no regresó como esperaba, por lo que se fueron a buscarlos y el rancho ya estaba cerrado, pidieron el apoyo de la policía y al día siguiente acudió a reportar la desaparición de ambos, esperaron tres días para que la Fiscalía mandara sus peritos, y el domingo, desesperada, se metieron al rancho a buscarlos y solo encontraron muerto y en estado de descomposición al padre de su hijo, incluso sin un brazo.
A 27 días de la desaparición, no hay rastro del menor, la Fiscalía no tiene nada y su familia en Guerrero también los buscan.
Del cuerpo del padre de sus hijos dice que sigue en el Semefo, le van hacer los análisis del ADN y posteriormente se los van a entregar.
“Tenían solo año y medio de haberse curado de la anemia aguda, gracias a Dios, pero es injusto que otra persona de mal corazón se lo llevó nada más por trabajar honradamente, que injusto son”.
Este martes 26 de julio acudió al DIF donde le ofrecieron una licenciada que la acompañaría a la Fiscalía a pedir información ya que hasta la fecha no sabe qué han investigado, pero sobre todo va a pedir que se extienda la búsqueda a otros estados.
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