Ante el inicio de las campañas político-electorales, el vicario general de la Diócesis de Cuernavaca, Luis Millán, pidió a los partidos y candidatos encabezar un proceso apegado a la verdad; es decir, que nadie prometa la salvación, porque esa sólo la da Dios.
El padre expresó que sólo ceñidos a la verdad, se podrá tener un proceso adecuado, además pidió a los ciudadanos participar para que, en libertad, elijan la mejor propuesta.
Recordó que tuvieron unos días de reflexión con el lema “Participando Construimos Comunidad”, cuyo ejercicio hizo la Diócesis para dar continuidad al proyecto del Episcopado Mexicano, que son los talleres de construcción de ciudadanía.
“Por eso ahora que comienza el proselitismo de los partidos y de los candidatos que buscan la atracción o a la voluntad de los votantes, se pide que sea un proceso apegado a la verdad, donde las personas tengan la opción de decidir sobre lo que mejor les convenga”, precisó.
El vicario general reconoció que hoy en día se cuenta con una sociedad madura, donde nadie puede prometer el paraíso y nadie podrá cambiar el mundo aunque haga todas las promesas que quiera.