Personal de enfermería del ISSSTE Zapata demandó herramientas de trabajo adecuado porque al tratarse de la primera línea de combate contra el COVID-19 en el centro hospitalario no cuentan con la protección necesaria y adecuada; ante esa situación el 60 por ciento de los trabajadores decidieron solicitar permiso sin goce de sueldo, “queremos que se establezcan las garantías y disminuir los riesgos de contagio, protocolos de atención que no hay, descansos escalonados, y no es que nos negamos a trabajar pero que haya garantías para atender a los pacientes".
Al menos un centenar de trabajadores y trabajadores sobre todo enfermeras se colocó frente a las puertas del nosocomio con pancartas exigieron condiciones más adecuadas de trabajo, pero sobre todo las garantías para el ejercicio de su profesión de forma segura con fundamentos en normas y estándares institucionales, nacionales e internacionales.
Entre sus peticiones solicitaron equipo de protección personal que cumpla con los estándares de calidad necesarios, material e insumos hospitalarios, equipo médico suficiente y adecuado para la atención de los pacientes.
Asimismo, demandaron capacitación adecuada que garantice la atención eficiente y segura, pero también que haya información correcta y verídica respecto al diagnóstico de los pacientes con la finalidad de proveer las medidas necesarias y disminuir los riesgos de contagio.
Los trabajadores del sector salud federal, urgieron la aplicación de un protocolo de zonas COVID para que sean homologados los criterios de atención minimizando así el riesgo de contagio en el personal. De la misma forma solicitaron que sean integrados a las áreas de COVID-19 todo el personal de enfermería que no cuenta con dictamen médico que justifique o impida rotar por la zona sin favoritismo o sobre protección garantizando que se hagan valer los derechos de equidad, justicia e igualdad.
Las enfermeras solicitaron también la unificación de beneficios que son los descansos escalonados que sea otorgado al personal de enfermería en las distintas áreas y turnos que no rotan en las áreas de COVID-19.
Todo esto, agregaron, con la finalidad de despeñar su labor de la forma más seguir y seguir procurando la atención de los usuarios y pacientes, pero al mismo tiempo garantiendo el resguardo de su salud y la de sus familias de las mismas trabajadoras.
No se niegan a trabajar o atender a los enfermos, pero si es necesario que tengan el equipo de protección adecuado y suficiente con la intención de dar seguridad a los derechohabientes y a su salud personal.
Todo esto se suma la falta de personal porque al menos el 60 por ciento de sus compañeros que formaban parte de la plantilla solicito permiso sin goce de sueldo, es decir prefirieron irse antes de enfrentar el riesgo.
“Traen a la gente como si fuera para un hospital de COVID pero no hay ni material ni personal suficiente para atender a los enfermos, y si bien hay un protocolo para no exponerse los filtros no están funcionando ya que entran pacientes que no son d COVID según su diagnóstico y terminan siendo de COVID, nos dan cubre bocas que solo duran do horas cuando tenemos hasta doce horas de jornada”, reclamaron.