Durante una inspección a las barrancas Tlaltenango, Atlacomulco, Tecolote y Acapantzingo, el personal del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) detectó que las personas colocaron tomas clandestinas en estos afluentes de agua, mismos que contaminan las barrancas por las descargas directas de aguas residuales que no han sido regularizadas en los últimos años.
Por lo anterior, iniciaron los procedimientos administrativos y económicos por la contaminación que provocan, ya que el objetivo es dar continuidad a los trabajos de saneamiento y evitar continúe la contaminación de las barrancas, por lo que, además, el organismo descentralizado mantiene un operativo de vigilancia.
A fin de evitar que la contaminación que existe actualmente a causa de las descargas directas de aguas residuales, se extienda a otras zonas y la reparación sea irreparable, el personal operativo, jurídico, técnico y gestión social llevó a cabo recorridos por diferentes barrancas para verificar las zonas de mayor contaminación por las descargas directas de aguas residuales, ya que provocan un foco rojo de contaminación.
Ante esa situación, el organismo se dijo preparado para regularizar la conectividad de todas las descargas a su red de drenaje y lograr el saneamiento de las barrancas a través de claudicar toda descarga de forma clandestina, por eso mantiene los trabajos de operación a través de la Dirección Técnica para sanear las barrancas a través de la activación de las plantas tratadoras que permitirá sanear la Cuenca del Río Apatlaco.