La violencia contra las mujeres ha existido y sigue existiendo a pesar de las leyes que se han creado para la protección de las mujeres; hay quienes temen hablar porque enfrentan una lucha muy larga y a veces no encuentran apoyo ni en la familia", reconoce la psicóloga Adriana González.
La cultura y educación machista en México que ha prevalecido por generaciones llega a ser uno de los factores para que la violencia contra las mujeres aún exista, coinciden víctimas y la especialista; "es un problema que se da desde el seno familiar", refiere Adriana González, y desde donde se puede prevenir.
Es necesario, confía, que, desde casa, los padres de familia consideren no mostrar que el varón es quien puede ejercer autoridad y, para lograrlo, debe violentar; "se debe educar desde el hogar, con visión igualitaria, para que en un futuro esta violencia disminuya".
La realidad de muchas
Esther hace 15 años inició una relación con un hombre, con quien procreó a su hija. La violencia se hizo presente desde el noviazgo, pero lo dejó pasar. "Empezó a pedirme que me cambiara ciertas prendas de ropa; él decía que era por respeto a mí". Así avanzó la relación hasta que ella comenzó a alejarse de sus amigos; incluso llegó a rechazar ofertas de trabajo. Hoy Esther tiene 43 años.
En casa a Esther le decían que ciertas actitudes eran normales "porque la quería", por lo que permitió que la violencia continuara. A los casi dos años de noviazgo se casaron. Él le propuso que dejara de trabajar para que pudieran formar una familia. Esther accedió.
Sin un trabajo, ella dependía del ingreso que él llevara, por lo que en ocasiones era amenazada por él en no dar dinero si ella no accedía a realizar ciertas cosas; después llegaron los insultos y ella trataba de defenderse, siguieron agresiones verbales y, después, lesiones que la marcaron para siempre.
Entonces decidio salirse de esa casa y pedir ayuda; se fue a vivir con sus padres, pero él, al consumir bebidas alcohólicas, iba de manera constante al domicilio de sus padres donde amenazaba con matarla y en algunas ocasiones llegó a accionar un arma de fuego, provocando daños al inmueble de ellos y vecinos.
Ante esta situación, ella decidió iniciar un proceso judicial, a pesar de que su familia le pidió no hacerlo para evitar problemas mayores, sin embargo, en esa ocasión no hizo caso y lo denunció, pero también tuvo que cambiar su lugar de residencia, y junto con su hija emprender e iniciar un negocio de venta de bisutería y joyería que les ha permitido salir adelante y permanecer en un espacio seguro para ambas.
Violencia política en razón de género
En Morelos, solo dos procesos iniciados en contra de alcaldes han logrado a llegar a sentencia, en ambos casos las víctimas, una síndica y una regidora, presentaron ante el Tribunal Estatal Electoral del Morelos su proceso por violencia política en razón de género; el primer caso se registró en 2018, cuando Paola Cruz, entonces síndica de Cuautla, inició el proceso en contra del exalcalde Raúl Tadeo Nava, y el más reciente iniciado por la regidora de Tetela del Volcán, Susana Herrera; ambos casos fueron registrados en la región oriente.
De acuerdo a Paola Cruz, ella inició el proceso en 2018, sin embargo, fue hasta enero de 2020 que se logró determinar por la Tribunal que sí fue víctima de violencia política, al ser violentada por el entonces presidente municipal al excluirla en toma de decisiones, así como reuniones, entre otras acciones, por lo que con ello, Paola Cruz logró el primer precedente, un mes después, el 25 de febrero, el Tribunal Estatal también falló a favor de la regidora de Tetela del Volcán, quien acusó que también fue excluida de acciones de cabildo, así como recorte de personal y la dejaron sin espacio para laborar.
En ambos casos, señalaron que la autoridad estatal electoral cuenta ya con el registro de que ambos personajes son señalados como violentadores, a decir de Paola Cruz señaló que se cuenta con varios reportes de integrantes de cabildo mujeres quienes han señalado ser víctimas de violencia de género y es por ello que se ha buscado trabajar con iniciativas de ley que permita que ya no se registren más casos.
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