Alfareros de Tlayacapan denunciaron ser víctimas de desalojo de la calle principal por parte de la presidente municipal, Carmen Pochotitla, aseguran que está es una tradición de más de 30 años y que podría desaparecer.
En rueda de prensa, explicaron que fue el 23 de octubre cuando la dirección de Licencias y Reglamentos informó a los artesanos ubicados en la calle Justo Sierra en el centro del municipio, que tenían hasta el 3 de noviembre para retirar sus puestos; posteriormente, se envió otro oficio señalando que el último día para el desalojo sería el 10 de noviembre.
De acuerdo con la representante de la Cooperativa Alfareros Unidos, María Ángela Ortíz Santamaría, cada año, desde hace 30, desde el mes de octubre, que se lleva a cabo la Feria del Barro, y hasta el 2 de enero, en la calle Justo Sierra, se colocan para vender sus productos de barro a fin de incrementar sus ventas y por ende sus ganancias, ya que al interior del mercado, no llegan muchos clientes.
Sin embargo, este año a presidente municipal, Carmen Pochotitla dio la orden para que fueran desalojados de ese punto, ya que señalan que no dan buena imagen a la localidad, esto a pesar de que la economía del municipio se sustenta por la venta del barro.
Verónica Cabrera, representante legal de los alfareros de Tlayacapan informó que se ha solicitado el apoyo a las autoridades estatales, además de que se interpuso un juicio de amparo para que solicite la suspensión condicional y el municipio fundamente el motivo por el cual busca mover a los alfareros de un espacio que todos los año ha sido utilizado como una tradición para ofrecer los productos que en esa comunidad se elaboran.