Al registrarse uno de los sismos más fuertes en México con epicentro en Morelos el pasado 19 de septiembre de 2017, la solidaridad y apoyo de la sociedad mexicana se reflejó de inmediato con la donación de víveres y despensas, así como la llegaba de personas provenientes de distintos estados de la República Mexicana con el simple objetivo de ayudar.
Tito Quiroz, Premio Nacional de la Juventud 2015 y director de Benning Academia de Música sede Morelos, se ha destacado por su gran labor social y por impulsar la paz y la música entre poblaciones vulnerables, con el objetivo de brindar una mejor calidad de vida.
“Recuerdo el sismo del 19S bastante bien porque mi cumpleaños es el 20, y curiosamente íbamos a abrir la academia de música en Patios de la Estación ese día, pero el temblor cambió totalmente nuestros planes”, comentó Tito Quiroz.
Debido a que Jojutla, fue una de las poblaciones con mayores afectaciones, de inmediato la sociedad tenía la mira en esta región del sur del estado, para brindar todo el apoyo posible.
“Al ir a Jojutla hicimos cuatro horas para llegar mi equipo y yo siempre estuvimos en la mejor disposición de ayudar, llevando comida incluso para los militares y policías y ayudar a limpiar escombros. Cuando estábamos allá, observé que mucha gente quería ayudar y no se daban cuenta que se estaba creando un problema muy fuerte al bloquear las entradas y salidas”, mencionó.
Al segundo día del sismo y con la experiencia en Jojutla, Tito Quiroz y su equipo decidieron buscar otro punto para brindar el apoyo necesario, y deciden acudir al DIF Las Quintas, lugar donde llegaba gran cantidad de víveres, para ayudar en la distribución de las despensas.
Sin embargo, con la intervención del DIF Morelos para organizar los víveres y entregar a los damnificados en las poblaciones más afectadas de una manera más ágil, la situación se tornó con desconfianza entre la sociedad, pues a través de las redes sociales y medios de comunicación, se comenzó a esparcir el rumor sobre el desvio de camiones y el robo de despensas.
Debido a estos rumores, y a la desconfianza desatada la sociedad comenzó a organizarse incluso para acudir al DIF y sacar las despensas de ahí.
Asimismo, Tito recuerda que se encargaba de organizar a las personas a través de un megáfono para que hicieran filas y las despensas llegaran más rápido a los autos.
