A cuatro meses de que la central de ciclo combinado de Huexca, en el municipio de Yecapixtla, empezara a producir energía eléctrica, personal de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) rechaza que el periodo de seis años en el que estuvo fuera de operación, del año 2015 a 2021, haya reducido su ciclo de vida útil, estimado en 30 años. Así, el ciclo habría empezado a contar a partir de octubre, cuando sus turbinas empezaron a funcionar.
Y así lo expuso María Elena Olaguez López, de la Subgerencia de Selección de Sitios de la CFE, quien detalló que el ciclo operativo de la termoeléctrica no sólo se mantiene prácticamente intacto, sino que podría extenderse más allá de los 30 años, debido al mantenimiento del personal; e incluso más, en caso de que las instalaciones se modernizaran con nueva tecnología para la generación de energía en las tres décadas siguientes.
“Tenemos esa posibilidad: conforme la tecnología avanza, las centrales también se van modernizando”, expuso la abogada.
Actualmente, la generación de energía eléctrica en el país se basa en la operación, principalmente, de plantas que funcionan con gas natural, como la termoeléctrica de Huexca. A diferencia de las centrales eólicas, fotovoltaicas o las hidroeléctricas, según expuso la abogada, las centrales termoeléctricas no dependen de factores climáticos, por lo que la producción de energía es continua.
“El fuerte de la CFE son las centrales que están generando con gas natural y las que tenemos de carbón, que tienen material de manera constante; trabajan todo el año, y por eso siempre tenemos energía eléctrica”, dijo.
¿Opera a su máxima capacidad?
Hace un par de semanas, el presidente de la Asociación de Usuarios del Río Cuautla A.C., Rogelio Plascencia Barreto, declaró que los usuarios no estaban recibiendo el monto establecido en el convenio de colaboración con la CFE por el uso de agua de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Cuautla (PTAR): en lugar de los 2.5 millones de pesos mensuales establecidos en el convenio, por el uso del agua, la asociación habría estado percibiendo una cantidad inferior, ya que tampoco estaba haciendo uso de la cantidad de líquido asentada en el documento, equivalente a 247 litros por segundo.
De acuerdo con Olaguez López, el uso inferior de agua tratada al que establece el convenio se debe a que las centrales deben sujetarse al Centro Nacional de Control de Energía, lo que requiere que las centrales no siempre operen al cien por ciento de su capacidad generadora. En el caso de la central de Huexca, la capacidad es de 644 megawatts. En todo caso, dijo que la central puede operar al máximo.
“Hay centrales que le bajan un poquito a su generación porque hay mucha energía, y todavía no hay un sistema para almacenarla: así como se genera, se distribuye y consume, así que tienen que bajarle un poco a sus turbinas”, explicó.
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