EI Código Civil para la Ciudad de México, regula de manera muy especial el cambio de herederos y de testamento. Si usted tiene la inquietud, si ha pensado en que el testamento que otorgó hace 10, 15 o 20 años, ya no se ajustahoy a la realidad, tenga cuidado al disponer otras cuestiones, porque se podría caer en el supuesto de que un nuevo testamento mal hecho, no produzca los efectos queusted quería, el primero lo hará en parte y finalmente, unavez que esté usted muerto, no habrá posibilidad de cumplir con su voluntad. Efectivamente la ley permite cambiarde testamento y de herederos. Sin embargo, caben entreotras, las siguientes interrogaciones: ¿Qué pasa con elprimer testamento? ¿Qué efectos produciría lanueva declaración testamentaria respecto a los herederos que habíansido designados antes? ¿Al querer usted cambiar su testamento, debe hacer unonuevo o simplemente modificandoel primero, se estará a su nueva voluntad? ¿Qué pasaconlos herederos que ya no lo son en el segundo testamentoy estaban designadosen el primero? ¿Qué tipo de factores -personales, familiares, sicológicos, económicos- puedeninfluenciar la voluntad del testador para que cambie la
declaración de su última voluntad? ¿Quien desea cambiarel testamento, lo ha meditado suficientemente, para sacara ciertos parientes, meterotros y no tener remordimientos un de concienciar.
ES PELIGROSO CAMBIAR EL TESTAMENTO
Como se podrán dar cuenta, ustedes que nos hacen el
favor de leer estas reflexiones, no es simple otorgar untestamento, mucho menoscambiarlo y más grave resultasacar a ciertos hijos, meter a otros y al final no estar conformesni con lo uno ni con lo otro.
SE PUEDE.. , PERO CUIDADO
Categóricamente podemos afirmar y sugerir a nuestroslectores que el testamento, es un acto jurídico que por naturaleza se puede revocar. Es decir, así como usted expresólibre y espontáneamente su voluntad para designar a susherederos, en la misma forma lo puede hacer para determinar en cualquier sentido su voluntad.
LO SUPERIOR ES LA FAMILIA
También debemos reflexionar junto con nuestros lectores, en meditar sobre los factores que muchas veces llevan a una persona a tomar una decisión para cambiar de testamento y de herederos, porque no debemos olvidar quelas personas por su conducta, por su manera de ser, porsu idiosincrasia, por sus vínculos familiares, hoy puedenser los mejores y mañana no tanto, por ello, debe haberuna gran madurez y un gran amor en quien otorga untestamento, para superar estas pequeñas diferencias y designar herederos a los miembros de la familia, a quienes enúltima instancia, se les debe todo y es a quienes el autorde la sucesión tiene la obligación de proteger aun después de muerto.
*Profesor de Carrera, con 51 años de Cátedra ininterrumpida en Derecho Civil y Derecho Familiar, en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México.