/ martes 31 de marzo de 2020

Política y expectativas

La política es una construcción histórica originada en la Grecia clásica. Si bien las instituciones políticas existían desde antes, fue allí donde por primera vez comenzó a pensarse lo político como algo específico, separado de la religión y, por lo tanto, propio de la capacidad de acción de los hombres.

Esta primera secularización de lo político tuvo lugar cuando los hombres tomaron conciencia de que eran ellos los que debían responsabilizarse por los resultados de sus acciones de gobierno. A partir de ese momento, fue necesario buscar los mecanismos institucionales que les permitieran el mejor logro de tales resultados. De esta manera, la historia de las pequeñas polis griegas se volvió un fenomenal laboratorio de las formas de gobierno más dispares.

¿Cómo se gobernaban las polis? Existía una amplia variedad de regímenes políticos, entre los que se destacaban las democracias. La democracia para los griegos era un sistema de gobierno basado en la igualdad de todos los ciudadanos frente a la toma de decisiones colectivas. Su nombre, demos (pueblo) kratos (gobierno), hacía referencia a su principio rector: el autogobierno del pueblo. Si todos sufríamos las consecuencias de las acciones de los gobiernos, lo lógico era que todos tomáramos parte en las decisiones. Obviamente, el “todos” de los clásicos era restringido ya que excluía de la ciudadanía a los “desiguales” por naturaleza según la literatura (mujeres, esclavos y extranjeros).

En la idea clásica de la democracia sólo se era libre cuando cada uno se gobernaba a sí mismo, dándose sus propias normas (autonomía). Así, todos los ciudadanos (hombres libres) debían gobernarse sin distinción de capacidades personales o económicas. Libertad e igualdad se implicaban mutuamente. La igualdad entre los ciudadanos era el eje de la democracia y en consonancia con él se diseñaron todas las instituciones de gobierno. El funcionamiento de la democracia ateniense es conocido principalmente por la peculiaridad de la ciudadanía reunida en asamblea la cual encarnaba el ideal del gobierno del demos en tanto garantizaba la participación directa de los ciudadanos en las decisiones que los afectaban y la igualdad de esa participación (con base al principio de isegoria que establecía el igual derecho a hablar en la asamblea). Sin embargo, existían otras instituciones como las magistraturas, el consejo y los tribunales en las que no participaban todos los ciudadanos y que, por ende, no eran identificadas como el demos.

El principio de igualdad en estas instituciones estaba garantizado por un mecanismo fundamental de la democracia ateniense: el sorteo. Este mecanismo permitía que todos los ciudadanos que deseaban ejercer el poder tuvieran la misma probabilidad de acceder a un cargo público y, por ende, ocupar tanto el lugar de gobernado como de gobernante. El sorteo se constituyó así en una institución central de la democracia clásica dado que permitía plasmar valores democráticos fundamentales: la rotación en los cargos, la desconfianza en la política como profesión y el igual derecho a participar de los asuntos públicos.

Un punto sumamente interesante de la democracia como sistema de gobierno es que ésta no fue el producto del diseño de algún pensador sino el resultado de la evolución colectiva de la dinámica política. Los principales pensadores de la época fueron profundamente críticos de la democracia, ya que la consideraban una de las peores formas de gobierno. El núcleo central de las críticas se basaba en que se consideraba que cualquier hombre era apto para ocupar cualquier puesto, independientemente de sus capacidades. Tanto Sócrates como Platón fueron partidarios del gobierno de los mejores o la aristocracia. Al asociar virtud con sabiduría, la mejor forma de gobierno sería aquella en la que todos aceptaran ser conducidos por los más sabios. Fue Aristóteles, en los tiempos en que las polis entraban en su definitivo ocaso, quien propuso una forma mixta de gobierno: la politeia, una combinación de oligarquía y democracia.

Estas ideas del gobierno mixto tuvieron un fuerte impacto en la Roma Republicana y fueron defendidas por autores como Polibio y Cicerón, quienes veían en el complejo sistema político de su época, la concreción del “justo medio” aristotélico. Sin embargo, los ideales democráticos continuarían vivos en algunas instituciones como los tribunos del pueblo y en el accionar de los políticos del partido popular -como es el caso de los hermanos Graco- y recién se acallarían definitivamente bien entrado el Imperio.

Una de las razones que explican la pérdida de popularidad de la administración AMLO no está en su origen democrático, sino en que la conducción de toda su gestión y en particular por la incertidumbre de la crisis sanitaria, sí afecta a todos los mexicanos. Por desgracia, las oposiciones sólo se han dedicado a reaccionar al eje retórico del presidente y a distribuir memes, sin presentar una alternativa creíble y efectiva a las decisiones de la élite política mexicana.


FB: Daniel Adame Osorio.

Instagram:@danieladameosorio

Twitter: @Danieldao1

La política es una construcción histórica originada en la Grecia clásica. Si bien las instituciones políticas existían desde antes, fue allí donde por primera vez comenzó a pensarse lo político como algo específico, separado de la religión y, por lo tanto, propio de la capacidad de acción de los hombres.

Esta primera secularización de lo político tuvo lugar cuando los hombres tomaron conciencia de que eran ellos los que debían responsabilizarse por los resultados de sus acciones de gobierno. A partir de ese momento, fue necesario buscar los mecanismos institucionales que les permitieran el mejor logro de tales resultados. De esta manera, la historia de las pequeñas polis griegas se volvió un fenomenal laboratorio de las formas de gobierno más dispares.

¿Cómo se gobernaban las polis? Existía una amplia variedad de regímenes políticos, entre los que se destacaban las democracias. La democracia para los griegos era un sistema de gobierno basado en la igualdad de todos los ciudadanos frente a la toma de decisiones colectivas. Su nombre, demos (pueblo) kratos (gobierno), hacía referencia a su principio rector: el autogobierno del pueblo. Si todos sufríamos las consecuencias de las acciones de los gobiernos, lo lógico era que todos tomáramos parte en las decisiones. Obviamente, el “todos” de los clásicos era restringido ya que excluía de la ciudadanía a los “desiguales” por naturaleza según la literatura (mujeres, esclavos y extranjeros).

En la idea clásica de la democracia sólo se era libre cuando cada uno se gobernaba a sí mismo, dándose sus propias normas (autonomía). Así, todos los ciudadanos (hombres libres) debían gobernarse sin distinción de capacidades personales o económicas. Libertad e igualdad se implicaban mutuamente. La igualdad entre los ciudadanos era el eje de la democracia y en consonancia con él se diseñaron todas las instituciones de gobierno. El funcionamiento de la democracia ateniense es conocido principalmente por la peculiaridad de la ciudadanía reunida en asamblea la cual encarnaba el ideal del gobierno del demos en tanto garantizaba la participación directa de los ciudadanos en las decisiones que los afectaban y la igualdad de esa participación (con base al principio de isegoria que establecía el igual derecho a hablar en la asamblea). Sin embargo, existían otras instituciones como las magistraturas, el consejo y los tribunales en las que no participaban todos los ciudadanos y que, por ende, no eran identificadas como el demos.

El principio de igualdad en estas instituciones estaba garantizado por un mecanismo fundamental de la democracia ateniense: el sorteo. Este mecanismo permitía que todos los ciudadanos que deseaban ejercer el poder tuvieran la misma probabilidad de acceder a un cargo público y, por ende, ocupar tanto el lugar de gobernado como de gobernante. El sorteo se constituyó así en una institución central de la democracia clásica dado que permitía plasmar valores democráticos fundamentales: la rotación en los cargos, la desconfianza en la política como profesión y el igual derecho a participar de los asuntos públicos.

Un punto sumamente interesante de la democracia como sistema de gobierno es que ésta no fue el producto del diseño de algún pensador sino el resultado de la evolución colectiva de la dinámica política. Los principales pensadores de la época fueron profundamente críticos de la democracia, ya que la consideraban una de las peores formas de gobierno. El núcleo central de las críticas se basaba en que se consideraba que cualquier hombre era apto para ocupar cualquier puesto, independientemente de sus capacidades. Tanto Sócrates como Platón fueron partidarios del gobierno de los mejores o la aristocracia. Al asociar virtud con sabiduría, la mejor forma de gobierno sería aquella en la que todos aceptaran ser conducidos por los más sabios. Fue Aristóteles, en los tiempos en que las polis entraban en su definitivo ocaso, quien propuso una forma mixta de gobierno: la politeia, una combinación de oligarquía y democracia.

Estas ideas del gobierno mixto tuvieron un fuerte impacto en la Roma Republicana y fueron defendidas por autores como Polibio y Cicerón, quienes veían en el complejo sistema político de su época, la concreción del “justo medio” aristotélico. Sin embargo, los ideales democráticos continuarían vivos en algunas instituciones como los tribunos del pueblo y en el accionar de los políticos del partido popular -como es el caso de los hermanos Graco- y recién se acallarían definitivamente bien entrado el Imperio.

Una de las razones que explican la pérdida de popularidad de la administración AMLO no está en su origen democrático, sino en que la conducción de toda su gestión y en particular por la incertidumbre de la crisis sanitaria, sí afecta a todos los mexicanos. Por desgracia, las oposiciones sólo se han dedicado a reaccionar al eje retórico del presidente y a distribuir memes, sin presentar una alternativa creíble y efectiva a las decisiones de la élite política mexicana.


FB: Daniel Adame Osorio.

Instagram:@danieladameosorio

Twitter: @Danieldao1

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