/ sábado 21 de julio de 2018

¿Ocurrencias de López Obrador; o Programa de Gobierno?

Superadas las campañas presidenciales, confrontados los candidatos y habiendo reflexionado como ciudadanos mexicanos, tenemos que analizar si la cascada de iniciativas de hecho y de derecho que está proponiendo Andrés Manuel López Obrador, tienen el perfil de ocurrencias o las expresiones y las iniciativas que nos ha comunicado, forman parte o contienen su programa de gobierno.


¡ES PROGRAMA DE GOBIERNO!

Desde mi perspectiva por mayoría de razón, no se puede tratar de ocurrencias como paso con Fox o con Calderón, porque el país iría al desastre; las perspectivas que están en el camino de convertirse en realidad sostenidas por López Obrador, no durante los pasados tres meses, sino los últimos 18 años, tienen como fundamento las peticiones de los mexicanos; la visita, no una sino varias veces de todos los municipios y los Estados del país para enfrentar, confrontar y en un momento dado convencer a la población mexicana, de que el camino para la solución de los graves problemas del país es el cambio; palabra que a fuerza de usarse se desgasta, pero que hoy ante la realidad de que 30 millones de mexicanos que representan el 54% de los que votaron, estamos de acuerdo en que el país debe transformarse, que la izquierda debe combatir el neoliberalismo y gobernar para quienes menos tienen, para los que viven en extrema pobreza, los que no han podido alcanzar un lugar en la Universidad o en el Instituto Politécnico para estudiar y superarse, para la discriminación que se hace de muy diversas maneras y que se dé permanentemente en los servicios de salud del gobierno, y en otras actitudes que impiden a quienes nada tienen, tener la oportunidad de ir a la escuela, prepararse, estudiar, cultivarse y lograr a través de su superación personal, un lugar en la sociedad mexicana; pero además al prepararse apoyar el desarrollo sobre todo el intelectual que tanta falta le hace al país.


LA INICIATIVA PRIVADA DEBE INVERTIR

Rechazamos categóricamente que se hable de ocurrencias, porque el país estaría condenado al fracaso, si simple y sencillamente, puedo poner como ejemplo la construcción del nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México, si éste se aceptará como herencia del pasado y se invirtieran en él 100,000 millones de pesos, que buena falta le hacen al desarrollo del país; si bien es cierto que se requiere otro aeropuerto, es atinado lo que López Obrador ha señalado, en que la iniciativa privada invierta; ésta es la que más se beneficia con el sector turismo, porque la derrama que hacen los turistas en el país es normalmente para la iniciativa privada; y si compartimos la opinión de que necesitamos otro aeropuerto, rechazamos que se construya con los fondos que tanta falta hacen a los mexicanos, en rubros como educación, salud, alimentación, vivienda, agua potable, casas con pisos de cemento y otras graves carencias que padecemos a lo largo y ancho del país.


DESCENTRALIZAR ES BUENO PARA MÉXICO

Estamos recibiendo la información por todos los medios incluidas las redes sociales, de las diferentes personalidades que acompañarán a López Obrador en su sexenio; de las iniciativas, por ejemplo la de descentralizar algunas dependencias del Gobierno Federal porque hay un centralismo que ha ahogado al país; y frente a esto ya hay voces que se alzan, algunas con y otras sin razón, porque el país tiene un desarrollo discriminado, diferente, poco planeado y se ha concentrado en solo algunas entidades un desarrollo más o menos aceptable; y en otras, por ejemplo Guerrero, Chiapas, Oaxaca, son el ejemplo pernicioso, el fruto de los malos programas y en este caso sí de ocurrencias de otros gobernantes, que solamente han tenido la de enriquecerse como es del dominio público y todo el mundo lo sabe.


REALIDAD NO FANTASÍA

Es atinada la iniciativa y no ocurrencia, de que el Presidente de la República, a partir del 1 de diciembre reciba un salario de $108,000; porque este es un país que ha dilapidado en altos sueldos, en burocracia y en males que son parte del sistema que hemos creado en perjuicio de todos los mexicanos, porque es innegable y frente a esto habría que preguntar a quienes se oponen a los programas de López Obrador, porqué el país sigue con un escaso crecimiento económico que no va más allá de 2% en los últimos decenios y que finalmente cuando llega una persona, que con el ejemplo está demostrando que no tiene riquezas, que no es un corrupto del poder, que no ha usufructuado las posiciones en las que ha estado, para México es lo que necesita, un Presidente normal, que tenga conciencia de su temporalidad terrena, por ejemplo López Obrador tiene 64 años, de que le serviría acumular una fortuna, pensando que vivirá 100 años; este es un ejemplo que políticos y funcionarios deberían aprender, porque evidentemente México que tiene a uno de los hombres más ricos del mundo y a los más pobres del mundo; es un ejemplo de los malos sistemas de gobierno y de los malos sistemas de reparto de la riqueza; por eso rechazamos que se pueda hablar de ocurrencia y más bien alentamos y apoyamos que se nos pregunte, que se nos consulte, que podamos opinar para enriquecer los programas de gobierno que López Obrador ponga en acción a partir de diciembre de este año, que ya en ese momento para demostrar que no hay improvisación ni ocurrencias, ha designado a personas, de hecho, falta la formalidad en sus nombramientos, que son verdaderamente mexicanos, que han estado con López Obrador durante mucho tiempo y que comparten con él la preocupación de que primero México, después México y en tercer lugar México y por supuesto los mexicanos.


LÓPEZ OBRADOR ES HOMBRE DE BUENA FE

Han hecho ya expertos y especialistas cálculos que no son de muy buena fe porque tienen un sesgo, como está ocurriendo con los que señalan que al ahorrarse 35,000 millones de pesos en sueldos el Estado no va a recibir 19,000 millones de impuestos; pero seguramente, reitero no estamos en ocurrencias, López Obrador y su Secretario de Hacienda y su equipo, habrán considerado la forma de sacar esos recursos o en la reducción de los programas aplicar lo que se tenga, para que verdaderamente ayudar a los mexicanos.

SE ACABARON LOS VIRREYES

Estamos de acuerdo en terminar con la burocracia, en algunos Estados hay 50 representantes federales y otras tantas dependencias, en que se nombre a una persona, que esa represente al Gobierno Federal y sea quien tenga la relación con los demás gobernantes; porque hasta hoy, es evidente y ocurre en todos los Estados y ninguno se escaparía de llamar a los gobernadores “Virreyes”, han usufructuado, se han enriquecido, han tomado las cosas desde el punto de vista personal y evidentemente se han convertido en verdaderos caciques en cada Estado de la República para su beneficio personal, para sus pretensiones, la de sus familias y de sus amigos; por eso también la iniciativa de que haya un solo Delegado Federal en cada uno de los 32 Estados de la República es muy importante, porque por ejemplo si se va la Secretaría de Educación Pública a Puebla, deberá tener un Delegado en la Ciudad de México, que representará a esa Secretaría y a todas las demás que se vayan a descentralizar. El alegato de infraestructura, de logística, de recursos para hacer la descentralización no tiene mayor valor, porque la misma no se hará de la noche a la mañana; y seguramente será necesario recrear la infraestructura ,que se irá haciendo conforme se vaya trasladando las diferentes oficinas y dependencias a los Estados; por ejemplo la Secretaría de Marina Nacional, seguramente que deberá estar ubicada en alguno de los lugares que México tiene con mar, considerando que tenemos 10,000 km de litorales y que más que en la Ciudad de México, esa Secretaría debería estar en un lugar marítimo; lo mismo ocurre en este caso con la Secretaría del Trabajo, porque esto es a nivel federal, no solamente local, y de ahí la importancia de que se vaya a otras partes; y así con otras que seguramente en el transcurso de estos meses iremos sabiendo que va a ocurrir.


LÓPEZ OBRADOR NO ES EL PRESIDENTE ELECTO

Ante lo que hemos señalado, quisiéramos hacer una reflexión junto con quienes me honran leyendo esta nota periodística, porque en lo personal tengo la preocupación de que hasta ahorita, hoy 22 de julio del 2018, López Obrador no es Presidente electo; no es Presidente virtual; mucho menos Presidente constitucional; lo que tenemos es a un ciudadano común y corriente, que fue elegido por 30 millones de mexicanos, pero que las formas jurídicas no se han cumplido por diversas razones; y López Obrador no tiene hasta este momento una calidad jurídica que lo acredite ni siquiera como Presidente electo; la fecha límite es el 6 de septiembre; ¿y mientras que ocurriría?, por ejemplo no puede asistir a la reunión de la semana próxima en Puerto Vallarta a pesar de que lo invitó el Presidente Peña Nieto, porque no tiene ninguna calidad, ni siquiera la de electo para acudir, simplemente iría como un ciudadano que ganó las elecciones, que eso fue un hecho material que se tiene que poner en la norma jurídica para que se le dé el estatus de Presidente electo; y frente a ésto sería conveniente que sus asesores, él mismo en lo personal, acudiera al Tribunal Electoral para saber cuál puede ser la razón jurídica, los argumentos del partido PES no son suficientes, porque este impugnó las elecciones presidenciales para ver si lograba el 3% para no perder su registro, lo que no ocurrió; pero lo que sí es preocupante y a mí en lo personal como mexicano me quita el sueño, es ¿qué puede ocurrir de aquí al 6 de septiembre? Si no tenemos un Presidente electo que ya está nombrando Ministros, Secretarios de Estado, se va a rebajar el sueldo, está actuando de facto como Presidente y en realidad no tiene ninguna calidad en ese sentido; con eso terminamos y queríamos dejar esa constancia, que ojalá estas líneas lleguen a quien debe, para que López Obrador se aplique, haga su tarea; y así como hizo toda esta gran acción para ser elegido, que se apersone o sus abogados al Tribunal y tenga la constancia de Presidente electo de la República Mexicana.


Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. jhernandez366@hotmail.com

Superadas las campañas presidenciales, confrontados los candidatos y habiendo reflexionado como ciudadanos mexicanos, tenemos que analizar si la cascada de iniciativas de hecho y de derecho que está proponiendo Andrés Manuel López Obrador, tienen el perfil de ocurrencias o las expresiones y las iniciativas que nos ha comunicado, forman parte o contienen su programa de gobierno.


¡ES PROGRAMA DE GOBIERNO!

Desde mi perspectiva por mayoría de razón, no se puede tratar de ocurrencias como paso con Fox o con Calderón, porque el país iría al desastre; las perspectivas que están en el camino de convertirse en realidad sostenidas por López Obrador, no durante los pasados tres meses, sino los últimos 18 años, tienen como fundamento las peticiones de los mexicanos; la visita, no una sino varias veces de todos los municipios y los Estados del país para enfrentar, confrontar y en un momento dado convencer a la población mexicana, de que el camino para la solución de los graves problemas del país es el cambio; palabra que a fuerza de usarse se desgasta, pero que hoy ante la realidad de que 30 millones de mexicanos que representan el 54% de los que votaron, estamos de acuerdo en que el país debe transformarse, que la izquierda debe combatir el neoliberalismo y gobernar para quienes menos tienen, para los que viven en extrema pobreza, los que no han podido alcanzar un lugar en la Universidad o en el Instituto Politécnico para estudiar y superarse, para la discriminación que se hace de muy diversas maneras y que se dé permanentemente en los servicios de salud del gobierno, y en otras actitudes que impiden a quienes nada tienen, tener la oportunidad de ir a la escuela, prepararse, estudiar, cultivarse y lograr a través de su superación personal, un lugar en la sociedad mexicana; pero además al prepararse apoyar el desarrollo sobre todo el intelectual que tanta falta le hace al país.


LA INICIATIVA PRIVADA DEBE INVERTIR

Rechazamos categóricamente que se hable de ocurrencias, porque el país estaría condenado al fracaso, si simple y sencillamente, puedo poner como ejemplo la construcción del nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México, si éste se aceptará como herencia del pasado y se invirtieran en él 100,000 millones de pesos, que buena falta le hacen al desarrollo del país; si bien es cierto que se requiere otro aeropuerto, es atinado lo que López Obrador ha señalado, en que la iniciativa privada invierta; ésta es la que más se beneficia con el sector turismo, porque la derrama que hacen los turistas en el país es normalmente para la iniciativa privada; y si compartimos la opinión de que necesitamos otro aeropuerto, rechazamos que se construya con los fondos que tanta falta hacen a los mexicanos, en rubros como educación, salud, alimentación, vivienda, agua potable, casas con pisos de cemento y otras graves carencias que padecemos a lo largo y ancho del país.


DESCENTRALIZAR ES BUENO PARA MÉXICO

Estamos recibiendo la información por todos los medios incluidas las redes sociales, de las diferentes personalidades que acompañarán a López Obrador en su sexenio; de las iniciativas, por ejemplo la de descentralizar algunas dependencias del Gobierno Federal porque hay un centralismo que ha ahogado al país; y frente a esto ya hay voces que se alzan, algunas con y otras sin razón, porque el país tiene un desarrollo discriminado, diferente, poco planeado y se ha concentrado en solo algunas entidades un desarrollo más o menos aceptable; y en otras, por ejemplo Guerrero, Chiapas, Oaxaca, son el ejemplo pernicioso, el fruto de los malos programas y en este caso sí de ocurrencias de otros gobernantes, que solamente han tenido la de enriquecerse como es del dominio público y todo el mundo lo sabe.


REALIDAD NO FANTASÍA

Es atinada la iniciativa y no ocurrencia, de que el Presidente de la República, a partir del 1 de diciembre reciba un salario de $108,000; porque este es un país que ha dilapidado en altos sueldos, en burocracia y en males que son parte del sistema que hemos creado en perjuicio de todos los mexicanos, porque es innegable y frente a esto habría que preguntar a quienes se oponen a los programas de López Obrador, porqué el país sigue con un escaso crecimiento económico que no va más allá de 2% en los últimos decenios y que finalmente cuando llega una persona, que con el ejemplo está demostrando que no tiene riquezas, que no es un corrupto del poder, que no ha usufructuado las posiciones en las que ha estado, para México es lo que necesita, un Presidente normal, que tenga conciencia de su temporalidad terrena, por ejemplo López Obrador tiene 64 años, de que le serviría acumular una fortuna, pensando que vivirá 100 años; este es un ejemplo que políticos y funcionarios deberían aprender, porque evidentemente México que tiene a uno de los hombres más ricos del mundo y a los más pobres del mundo; es un ejemplo de los malos sistemas de gobierno y de los malos sistemas de reparto de la riqueza; por eso rechazamos que se pueda hablar de ocurrencia y más bien alentamos y apoyamos que se nos pregunte, que se nos consulte, que podamos opinar para enriquecer los programas de gobierno que López Obrador ponga en acción a partir de diciembre de este año, que ya en ese momento para demostrar que no hay improvisación ni ocurrencias, ha designado a personas, de hecho, falta la formalidad en sus nombramientos, que son verdaderamente mexicanos, que han estado con López Obrador durante mucho tiempo y que comparten con él la preocupación de que primero México, después México y en tercer lugar México y por supuesto los mexicanos.


LÓPEZ OBRADOR ES HOMBRE DE BUENA FE

Han hecho ya expertos y especialistas cálculos que no son de muy buena fe porque tienen un sesgo, como está ocurriendo con los que señalan que al ahorrarse 35,000 millones de pesos en sueldos el Estado no va a recibir 19,000 millones de impuestos; pero seguramente, reitero no estamos en ocurrencias, López Obrador y su Secretario de Hacienda y su equipo, habrán considerado la forma de sacar esos recursos o en la reducción de los programas aplicar lo que se tenga, para que verdaderamente ayudar a los mexicanos.

SE ACABARON LOS VIRREYES

Estamos de acuerdo en terminar con la burocracia, en algunos Estados hay 50 representantes federales y otras tantas dependencias, en que se nombre a una persona, que esa represente al Gobierno Federal y sea quien tenga la relación con los demás gobernantes; porque hasta hoy, es evidente y ocurre en todos los Estados y ninguno se escaparía de llamar a los gobernadores “Virreyes”, han usufructuado, se han enriquecido, han tomado las cosas desde el punto de vista personal y evidentemente se han convertido en verdaderos caciques en cada Estado de la República para su beneficio personal, para sus pretensiones, la de sus familias y de sus amigos; por eso también la iniciativa de que haya un solo Delegado Federal en cada uno de los 32 Estados de la República es muy importante, porque por ejemplo si se va la Secretaría de Educación Pública a Puebla, deberá tener un Delegado en la Ciudad de México, que representará a esa Secretaría y a todas las demás que se vayan a descentralizar. El alegato de infraestructura, de logística, de recursos para hacer la descentralización no tiene mayor valor, porque la misma no se hará de la noche a la mañana; y seguramente será necesario recrear la infraestructura ,que se irá haciendo conforme se vaya trasladando las diferentes oficinas y dependencias a los Estados; por ejemplo la Secretaría de Marina Nacional, seguramente que deberá estar ubicada en alguno de los lugares que México tiene con mar, considerando que tenemos 10,000 km de litorales y que más que en la Ciudad de México, esa Secretaría debería estar en un lugar marítimo; lo mismo ocurre en este caso con la Secretaría del Trabajo, porque esto es a nivel federal, no solamente local, y de ahí la importancia de que se vaya a otras partes; y así con otras que seguramente en el transcurso de estos meses iremos sabiendo que va a ocurrir.


LÓPEZ OBRADOR NO ES EL PRESIDENTE ELECTO

Ante lo que hemos señalado, quisiéramos hacer una reflexión junto con quienes me honran leyendo esta nota periodística, porque en lo personal tengo la preocupación de que hasta ahorita, hoy 22 de julio del 2018, López Obrador no es Presidente electo; no es Presidente virtual; mucho menos Presidente constitucional; lo que tenemos es a un ciudadano común y corriente, que fue elegido por 30 millones de mexicanos, pero que las formas jurídicas no se han cumplido por diversas razones; y López Obrador no tiene hasta este momento una calidad jurídica que lo acredite ni siquiera como Presidente electo; la fecha límite es el 6 de septiembre; ¿y mientras que ocurriría?, por ejemplo no puede asistir a la reunión de la semana próxima en Puerto Vallarta a pesar de que lo invitó el Presidente Peña Nieto, porque no tiene ninguna calidad, ni siquiera la de electo para acudir, simplemente iría como un ciudadano que ganó las elecciones, que eso fue un hecho material que se tiene que poner en la norma jurídica para que se le dé el estatus de Presidente electo; y frente a ésto sería conveniente que sus asesores, él mismo en lo personal, acudiera al Tribunal Electoral para saber cuál puede ser la razón jurídica, los argumentos del partido PES no son suficientes, porque este impugnó las elecciones presidenciales para ver si lograba el 3% para no perder su registro, lo que no ocurrió; pero lo que sí es preocupante y a mí en lo personal como mexicano me quita el sueño, es ¿qué puede ocurrir de aquí al 6 de septiembre? Si no tenemos un Presidente electo que ya está nombrando Ministros, Secretarios de Estado, se va a rebajar el sueldo, está actuando de facto como Presidente y en realidad no tiene ninguna calidad en ese sentido; con eso terminamos y queríamos dejar esa constancia, que ojalá estas líneas lleguen a quien debe, para que López Obrador se aplique, haga su tarea; y así como hizo toda esta gran acción para ser elegido, que se apersone o sus abogados al Tribunal y tenga la constancia de Presidente electo de la República Mexicana.


Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. jhernandez366@hotmail.com

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