/ martes 10 de julio de 2018

La cruda electoral

Creo que esta expresión queda muy bien, ¿no? Sentimos ahora, luego del 1 de julio, una especie de resaca emocional, un estrés post AMLO. Y me refiero a todos: vencedores y vencidos, partidos (sobre todo los que perderán, aparentemente su registro, el PES y el PANAL) candidatos, instituciones electorales y por supuesto, los ciudadanos. Ya sin la anestesia futbolera de nuestra selección, y su nuevo fracaso en Rusia, me imagino que muchos se sienten como en esa película de enredos (con todo y sus secuelas) “¿Qué pasó ayer?”


Después de la fiesta electoral, embriagados de entusiasmo, de renovación, no sé si ya nos cayó el veinte de lo que hicimos las pasadas elecciones. Dimos una especie de cheque en blanco a una opción representada por un solo personaje en quien se ha puesto y cifrado la esperanza de México. ¡Caracoles, que fuerte! Ya en pasadas entregas recordé como nos fue con Vicente Fox, pues la altísima expectativa nunca se alcanzó, y el desencanto fue manifiesto en poco tiempo. Y es que bien lo dijo la Consejera Presidenta del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac), Ana Isabel Trueba: México no aguanta otra decepción.


Es verdad, Andrés Manuel no es Chente y desde su impecable mensaje la noche de su histórico triunfo, hasta sus más recientes acciones, apariciones y pasos rumbo al 1 de diciembre, ha dado muestras de madurez y mesura que han tranquilizado a los mercados, a los empresarios e incluso a sus detractores. Se comienza a vislumbrar la agenda nacional, con temas que pasan por el sí al nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, el no a una Fiscalía General Autónoma (no quiere que la PGR, la Fiscalía Anticorrupción ni la Fiscalía para Delitos Electorales sean autónomas, independientes y puedan investigar al Poder Ejecutivo) el anuncio no exento de polémica de Marcelo Ebrard como próximo Canciller, la reforma educativa, el eliminar la pensión presidencial vitalicia y que al menos por los próximos tres años (ya no dijo que durante su sexenio) no habrá gasolinazos.


Pero si nos detenemos a analizar cómo votamos los mexicanos, veremos cosas muy interesantes: Pedro Kumamoto, el adalid de los candidatos independientes desde Jalisco, no alcanzó un escaño en el Senado; El Bronco alcanzó más porcentaje de votos que tres de los partidos “grandes” en la elección presidencial; el alcalde electo de Cuernavaca no hizo campaña, el ganador en Amacuzac (Alfonso Miranda) está en la cárcel y solo un candidato independiente, Celso Nieto Estrada, maestro de primaria, será Presidente Municipal de Coatlán, sin utilizar un solo peso de financiamiento público.


En nuestro estado, producto de más de medio millón de votos a su favor, Cuauhtémoc Blanco Bravo recibió su constancia de mayoría como gobernador electo y recalcó lo que ha sido su discurso constante: no les voy a fallar, yo no robo, vamos a cambiar Morelos y que aunque no habría una cacería de brujas, se aplicará la ley y se hará justicia, al tiempo de garantizar (qué arriesgado) que habrá seguridad a través del regreso de las policías a los municipios, contrario al proyecto de López Obrador, de implementar el Mando Único a nivel nacional.


Preocupante, que se avizore una pugna entre el titular del Poder Ejecutivo y el próximo alcalde de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán, pues a decir de Blanco, El Lobito “no es de su equipo” y ya procedió, a través del PES, a impugnarlo como cabeza la planilla ganadora para gobernar la capital morelense. Prospere o no, vendrían otros tres años muy complicados para la ciudad, pues se reeditaría lo que ya vivimos (parálisis de obra, de infraestructura y servicios) por un desencuentro entre las autoridades estatales y municipales.


Luego del tsunámico mensaje de la ciudadanía, que barrió todas las ideologías y el esquema de la partidocracia, es hora del empoderamiento de los ciudadanos, fortaleciendo la cultura cívica y participativa, hacia otros derroteros: contra la corrupción, la impunidad y el gandallismo. Algunos dirán que es el despertar de los chairos y otros, que el tigre encontró su domador. Pero la violencia no, y esa es una asignatura pendiente: México registró el asesinato de 145 actores políticos durante el proceso electoral, entre ellos 48 candidatos y precandidatos. Desde que comenzó el proceso electoral, el 8 de septiembre de 2017 y hasta 30 de junio, un día antes de los comicios mexicanos, se registraron 627 agresiones en contra de políticos. Fueron 206 amenazas e intimidaciones, 85 agresiones físicas, 57 agresiones con arma de fuego y 52 atentados contra familiares (con 50 víctimas mortales). También se agregaron 36 asaltos con violencia, 25 heridos por arma de fuego y 21 víctimas de secuestro e intentos de secuestro. A las cifras anteriores se sumó el asesinato de 351 funcionarios no electos (307 de ellos agentes de seguridad).


“Y con la resaca a cuestas vuelve el pobre a su pobreza, vuelve el rico a su riqueza y el señor cura a sus misas.” Joan Manuel Serrat.


Hasta la próxima entrega, donde podrán seguir leyendo lo que hay en mi mente.


Comentarios: cfelix7@hotmail.com

Twitter: @CarlosFelix1

Creo que esta expresión queda muy bien, ¿no? Sentimos ahora, luego del 1 de julio, una especie de resaca emocional, un estrés post AMLO. Y me refiero a todos: vencedores y vencidos, partidos (sobre todo los que perderán, aparentemente su registro, el PES y el PANAL) candidatos, instituciones electorales y por supuesto, los ciudadanos. Ya sin la anestesia futbolera de nuestra selección, y su nuevo fracaso en Rusia, me imagino que muchos se sienten como en esa película de enredos (con todo y sus secuelas) “¿Qué pasó ayer?”


Después de la fiesta electoral, embriagados de entusiasmo, de renovación, no sé si ya nos cayó el veinte de lo que hicimos las pasadas elecciones. Dimos una especie de cheque en blanco a una opción representada por un solo personaje en quien se ha puesto y cifrado la esperanza de México. ¡Caracoles, que fuerte! Ya en pasadas entregas recordé como nos fue con Vicente Fox, pues la altísima expectativa nunca se alcanzó, y el desencanto fue manifiesto en poco tiempo. Y es que bien lo dijo la Consejera Presidenta del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac), Ana Isabel Trueba: México no aguanta otra decepción.


Es verdad, Andrés Manuel no es Chente y desde su impecable mensaje la noche de su histórico triunfo, hasta sus más recientes acciones, apariciones y pasos rumbo al 1 de diciembre, ha dado muestras de madurez y mesura que han tranquilizado a los mercados, a los empresarios e incluso a sus detractores. Se comienza a vislumbrar la agenda nacional, con temas que pasan por el sí al nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, el no a una Fiscalía General Autónoma (no quiere que la PGR, la Fiscalía Anticorrupción ni la Fiscalía para Delitos Electorales sean autónomas, independientes y puedan investigar al Poder Ejecutivo) el anuncio no exento de polémica de Marcelo Ebrard como próximo Canciller, la reforma educativa, el eliminar la pensión presidencial vitalicia y que al menos por los próximos tres años (ya no dijo que durante su sexenio) no habrá gasolinazos.


Pero si nos detenemos a analizar cómo votamos los mexicanos, veremos cosas muy interesantes: Pedro Kumamoto, el adalid de los candidatos independientes desde Jalisco, no alcanzó un escaño en el Senado; El Bronco alcanzó más porcentaje de votos que tres de los partidos “grandes” en la elección presidencial; el alcalde electo de Cuernavaca no hizo campaña, el ganador en Amacuzac (Alfonso Miranda) está en la cárcel y solo un candidato independiente, Celso Nieto Estrada, maestro de primaria, será Presidente Municipal de Coatlán, sin utilizar un solo peso de financiamiento público.


En nuestro estado, producto de más de medio millón de votos a su favor, Cuauhtémoc Blanco Bravo recibió su constancia de mayoría como gobernador electo y recalcó lo que ha sido su discurso constante: no les voy a fallar, yo no robo, vamos a cambiar Morelos y que aunque no habría una cacería de brujas, se aplicará la ley y se hará justicia, al tiempo de garantizar (qué arriesgado) que habrá seguridad a través del regreso de las policías a los municipios, contrario al proyecto de López Obrador, de implementar el Mando Único a nivel nacional.


Preocupante, que se avizore una pugna entre el titular del Poder Ejecutivo y el próximo alcalde de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán, pues a decir de Blanco, El Lobito “no es de su equipo” y ya procedió, a través del PES, a impugnarlo como cabeza la planilla ganadora para gobernar la capital morelense. Prospere o no, vendrían otros tres años muy complicados para la ciudad, pues se reeditaría lo que ya vivimos (parálisis de obra, de infraestructura y servicios) por un desencuentro entre las autoridades estatales y municipales.


Luego del tsunámico mensaje de la ciudadanía, que barrió todas las ideologías y el esquema de la partidocracia, es hora del empoderamiento de los ciudadanos, fortaleciendo la cultura cívica y participativa, hacia otros derroteros: contra la corrupción, la impunidad y el gandallismo. Algunos dirán que es el despertar de los chairos y otros, que el tigre encontró su domador. Pero la violencia no, y esa es una asignatura pendiente: México registró el asesinato de 145 actores políticos durante el proceso electoral, entre ellos 48 candidatos y precandidatos. Desde que comenzó el proceso electoral, el 8 de septiembre de 2017 y hasta 30 de junio, un día antes de los comicios mexicanos, se registraron 627 agresiones en contra de políticos. Fueron 206 amenazas e intimidaciones, 85 agresiones físicas, 57 agresiones con arma de fuego y 52 atentados contra familiares (con 50 víctimas mortales). También se agregaron 36 asaltos con violencia, 25 heridos por arma de fuego y 21 víctimas de secuestro e intentos de secuestro. A las cifras anteriores se sumó el asesinato de 351 funcionarios no electos (307 de ellos agentes de seguridad).


“Y con la resaca a cuestas vuelve el pobre a su pobreza, vuelve el rico a su riqueza y el señor cura a sus misas.” Joan Manuel Serrat.


Hasta la próxima entrega, donde podrán seguir leyendo lo que hay en mi mente.


Comentarios: cfelix7@hotmail.com

Twitter: @CarlosFelix1

ÚLTIMASCOLUMNAS
miércoles 17 de julio de 2019

El Largo Brazo de la Ley

Carlos Félix

miércoles 10 de julio de 2019

El Nuevo Círculo Negro del PRI

Carlos Félix

miércoles 03 de julio de 2019

Yo tengo otros datos

Carlos Félix

miércoles 26 de junio de 2019

Otra vez el Paso Exprés...y otras cochinadas

Carlos Félix

miércoles 19 de junio de 2019

Disparos, disparates y dislates

Carlos Félix

miércoles 12 de junio de 2019

La Luz del Muro

Carlos Félix

miércoles 05 de junio de 2019

La Mafia del Poder contra el Hampa del Periodismo

Carlos Félix

miércoles 29 de mayo de 2019

El Diablo trae bronca contra México

Carlos Félix

miércoles 22 de mayo de 2019

¿Arde Morelos?

Carlos Félix

miércoles 15 de mayo de 2019

Con V de violencia

Carlos Félix

Cargar Más