Sí. Desde esta atalaya que me permite comunicarme con quienes me honran leyendo esta columna, quisiera compartirles mis reflexiones y la conclusión principal a la que he llegado, considerando determinadas premisas e imperativos categóricos, que me llevan a ratificar que la Ciudad de México tendrá un nuevo Aeropuerto Internacional, hoy comúnmente conocido como el de Texcoco.
¿ENCUESTAS? ¿PARA QUÉ?
Mucho se ha escrito, se ha expresado en las redes sociales, incluso hay comentarios vilirarizados en que los diferentes sectores, unos con conocimiento y otros sin él, opinan que sí debe haber; y otros que es un error concluir el aeropuerto objeto de esta nota periodística.
SÍ A CARLOS SLIM
Si bien es cierto que habrá encuestas y que en la misma se han creado dos preguntas; si se está de acuerdo con el nuevo aeropuerto; o si hay que agregar dos pistas al de Santa Lucía; ante estas alternativas, y dados los corrillos y las especulaciones políticas y capitalistas que del tema se han hecho, desde mi perspectiva pienso que sea cual fuere el resultado de la encuesta-fijarse bien distinguidos lectores-se esté o no de acuerdo con el aeropuerto, el Presidente Electo López Obrador ha dicho la última palabra recientemente, al expresar que “si Carlos Slimy su grupo construyen el aeropuerto, y para empezar erogan los 88,000 millones de pesos que acaban de ser solicitados por el fideicomiso que concluye el aeropuerto en la actualidad, el gobierno que él encabezará constitucionalmente el 1 de diciembre del presente año, dará su autorización, facilidades y aprobará la construcción del nuevo aeropuerto.
¿VERDADES A MEDIAS O MENTIRAS COMPLETAS?
Frente a estas aseveraciones del Presidente Electo y las reflexiones a que invito a quienes leen esta columna cada ocho días, tendríamos que concluir que para empezar no es válido el argumento de que esté construido en un suelo pantanoso y que se va a hundir, porque quienes afirman eso acusan una ignorancia crasa, al no saber que toda la Ciudad de México está construida en zonas lacustres; si bien es cierto que hace 800 años la leyenda dice que ahí, en un nopal apareció el águila y con la serpiente en el pico, hoyése lugar será un nuevo polo de desarrollo del país, un aeropuerto que además López Obrador ha sido como siempre honesto con sus afirmaciones, lo más probable es que no le toque inaugurarlo a él, al menos no al cien por ciento, pero el país va más allá;y elPresidente Electo que no lucha por votos, sino por lograr un lugar como estadista de nivel mundial, emulando a Juárez, bien haría en ratificar y seguramente que el grupo Carso estará de acuerdo, en que lo mejor para el país es construir el nuevo aeropuerto.
Alcalce de esta nota va mi correo electrónico, para que si usted que me honra leyendo la misma, quiere compartir conmigo sus opiniones lo haga, porque hoy en la noche habrá un programa importante en la televisión sobre el destino del aeropuerto, y que yo desde ahora, de acuerdo a mi información, a las fuentes de inteligencia y contrainteligencia que manejo, le comunico a usted, tengo la convicción de que la Ciudad de México tendrá uno de los aeropuertos internacionales más grandes y más completos del siglo XXI.
