Comentan los que dicen saber entre ellos se lo escucho con mucha frecuencia a José Garrigós, que Abraham Lincoln, apoyado en el libro clásico de Sun Tzu, “El arte de la guerra”, decía algo más o menos así: “no des batallas que no vayas a ganar”. Esto lo escribo porque según yo, el espiral de decadencia sin control en Morelos, se dio después de aquella negra comparecencia del Vicealmirante Ortiz Guarneros, donde todos perdieron y por ende lastimaron incalculablemente al tan vilipendiado Estado puerta del sur.
Yo quisiera saber quien fue el de la brillante idea de golpear desde la máxima tribuna de Morelos, a un mando castrense, quien lo sugirió o es ingenuo o es perverso, hoy en México, los mandos militares lo “tienen todo”, bueno como todas las plumas nacionales han escrito: “hasta construyen”. Pero creo yo que derivado de esa torpe e insulsa estrategia es que se dio primero una detención y después una serie de filtraciones que se constituyen en datos de prueba de documentales privadas (fotografías) que se pueden constituir en nítidos indicios de múltiples delitos graves que de entrada son castigados constitucionalmente con la prisión preventiva oficiosa.
Pero la imagen más grotesca por decir lo menos es la del que dice gobernar Morelos, ya que conversando con un amigo de ambos que fue muy cercano al futbolista me argumentó: “es Cuauhtémoc Blanco”, a lo que de manera inmediata le respondí, pero también es el Gobernador, constitucional de Morelos, y como dicen los verdaderos políticos de formación: “los hombres son pasajeros y las instituciones prevalecen”, por lo que es inadmisible un dato de prueba de ese calado en el titular del ejecutivo morelense.
Ahora bien, ese mismo actor de la política local está muy cercano al Congreso de Morelos, y me comentó su estrategia, la cual es viable, ya que, ejerciendo sus derechos humanos de petición e información, cuestionaron a la FGR, si con quienes se retrató Cuauhtémoc Blanco, son delincuentes o están siendo investigados penalmente por la autoridad competente; y dicen que derivado de la respuesta oficial atenderán y actuarán en consecuencia. Debo de suponer que con los instrumentos jurídicos que tienen a su alcance, el juicio de formación de causa por el o los delitos penales y el político, que su propia acepción etimológica nos da la respuesta, que así sea.
Amable lectora y lector derivado de mi última colaboración que intitulé: “Testamento político”, mi amiga y ex colaboradora en el Ayuntamiento de Cuernavaca, Morelos, la gran periodista Dulce María Velázquez, me compartió el legado del General Lázaro Cárdenas, un documento que firmó el ícono de la izquierda mexicana en Irapuato, Guanajuato, el 20 de noviembre de 1969, texto breve de siete páginas que les recomiendo ampliamente, “gracias totales”.
