El proyecto de presupuesto 2020

El Ejecutivo Federal ya ha entregado a la Cámara de Diputados el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2020 (PEF 2020).

Muchas cosas destacan de ese proyecto, que aunque seguramente sufrirá algunos ajustes, no serán demasiados ni cambiarán la esencia del mismo.

Las prioridades son los programas sociales de la 4T, la seguridad y el sector energético.

Todo lo demás pasa a segundo plano.

Incluso las grandes obras de infraestructura anunciadas por el Presidente parecen tener muy poco presupuesto en comparación con lo que requieren para ser terminadas en el tiempo en el que se comprometieron: el aeropuerto de Santa Lucía, la refinería de Dos Bocas y el Tren Maya.

Seguramente estarán apostando a que las medidas que se han anunciado recientemente para perseguir la evasión fiscal y para formalizar a muchos contribuyentes que hoy están en la economía informal, redundarán en un incremento en la recaudación fiscal que les permitirá destinar mayores recursos a esos proyectos, pero mientras tanto parece muy poco el presupuesto que les destinan en este Proyecto de PEF 2020.

Pasemos al interés central de esta columna ¿y el agua?

De acuerdo con el Proyecto, la Comisión Nacional del Agua sufriría una reducción (si, otra) de 941 millones de pesos, al pasar de $23,727.2 a $22,785.3 millones, es decir, casi 4% menos en términos nominales.

Pero lo mas grave es que esa reducción tendría su mayor impacto en el área de agua potable, drenaje y saneamiento, al pasar de $3,763.52 a $ 2,602.7 millones, es decir, una reducción de $1,160 millones de pesos, 31.3% menos que el año pasado.

El presupuesto destinado a infraestructura hidroagrícola se mantendría casi en el mismo nivel que este año con $1,961.7 millones (una reducción de 38 millones) y el destinado a las tareas de administración del agua se incrementaría en 257 millones para alcanzar un total de $18,220.9 millones de pesos.

El principal impacto en la reducción presupuestal será trasladado a los estados y municipios vía los subsidios que se otorgan para la construcción de obras de agua potable, drenaje y saneamiento.

Prácticamente todos las Entidades Federativas tienen reducciones promedio del 30%, pero algunos llegan a ser hasta del 72% como es el caso de Aguascalientes, los únicos Estados que presentan ligeros aumentos son: Baja California, Guanajuato, Jalisco, Michoacán y San Luis Potosí.

Una novedad en el desglose que se hace en el Proyecto de PEF 2020 es un concepto que se denomina “No distribuible geográficamente” que no se explica por si mismo y habrá que esperar para saber a qué se refieren, puede ser una bolsa para atender algunos proyectos interestatales o emergencias.

En cualquier caso, salta a la vista que el sector agua en general y el subsector agua potable en particular, siguen sin ser una prioridad, desde el 2016 se ha venido dando una reducción constante que representa hasta este Proyecto de PEF 2020 una reducción del 45% en el Presupuesto de la CONAGUA y de un 79% en el presupuesto destinado al subsector agua potable, drenaje y saneamiento. Difícil panorama.

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