Uno de los principales riesgos para la población respecto a la actividad volcánica es la contaminación del agua potable, particularmente en las zonas cercanas al volcán o las zonas que son más afectadas por la ceniza volcánica.
La ceniza volcánica tiene al menos tres tipos de efectos en la calidad del agua: el primero es que existe un riesgo de contaminación química cuando la ceniza entra en contacto con las fuentes de agua potable, esta contaminación puede darse por la composición mineralógica de la ceniza, eso depende de qué tipo de composición tenga, pero sin duda representa un riesgo.
El segundo es cuando la ceniza entra en contacto con el agua, lo que genera mayor turbiedad y un medio más propicio para el desarrollo de microorganismos que representan un riesgo para la salud de la población.
Finalmente, la ceniza también tiene en algunas ocasiones una característica cementante, es decir, que al contacto con el agua esta ceniza se solidifica y puede provocar sólidos que pueden taponar ductos, tuberías, manantiales, flujos de agua en general…
Ante esta situación de riesgo de contaminación del agua por la ceniza, existen recomendaciones que es importante que toda la población conozca y siga. Primero, es sumamente importante consumir agua segura, por eso quizá en estos momentos -más que nunca- el consumo de agua segura, embotellada o potabilizada en sitio, es una de las recomendaciones más importantes, es una precaución que el gobierno en turno debe tener con la población más cercana a esta zona de riesgo. Proteger a la población para garantizar el consumo de agua segura es lo principal que debe atenderse en estos momentos.
Segundo, salvaguardar las fuentes de abastecimiento de agua, principalmente los manantiales, que son los que están más expuestos, pero también existen algunos pozos, cárcamos de bombeo o tanques de distribución que deben verificase para corroborar que estén perfectamente cerrados o tapados, para así evitar que se distribuya a la población agua que entre en contacto con ceniza volcánica.
También es muy importante que la población cubra sus tinacos y cisternas para que la ceniza no afecte la calidad de agua dentro de sus viviendas.
Por otro lado, las cenizas que caigan en zonas urbanas, no deben tratar de limpiarse con agua, debido a que, como ya comentamos, las cenizas pueden tener efectos cementantes, lo que puede provocar taponamientos en las alcantarillas.
Hay que tomar precauciones, es muy importante garantizar el abastecimiento de agua segura.
Finalmente, no quisiera dejar de mencionar que hay que verificar la calidad del agua subterránea, tanto en su composición como en su temperatura, debido a que la actividad volcánica puede tener efectos en la calidad del agua subterránea, así como en el flujo, hay que monitorear la cantidad y la calidad de agua que está brotando en los diferentes manantiales cercanos al volcán y en los pozos que se ubiquen en un radio de 5 kilómetros a la redonda.
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