/ sábado 7 de agosto de 2021

El informe mundial sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos 2021

El agua es nuestro recurso más preciado, un ‘oro azul’ al que más de 2,000 millones de personas no tienen acceso. No solo es esencial para la supervivencia, sino que también desempeña un papel sanitario, social y cultural en el seno de las sociedades humanas.

Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO

El pasado 21 de julio en la Ciudad de México, la UNESCO, la ANEAS, el BID y la CONAGUA llevaron a cabo la presentación de la versión en español del Informe Mundial de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos 2021.

Titulado “El valor del agua”, el informe de este año demuestra que si el agua se descuida y desperdicia a menudo es porque tendemos a pensar en ella como algo que la naturaleza nos da, sin percibir su inmenso valor, que ningún precio puede reflejar.

El agua es un recurso único e insustituible cuya cantidad es limitada. Al ser fundamental para la vida, las sociedades y las economías, presenta múltiples valores y beneficios, pero, al contrario que con la mayoría de los recursos valiosos, se ha comprobado que su valor “real” resulta muy difícil de determinar.

El informe examina el estado actual y los retos de la valoración del agua en distintos sectores y desde diferentes perspectivas e identifica las formas en las que se puede fomentar dicha valoración como una herramienta que contribuya a alcanzar la sostenibilidad.

La falta de reconocimiento del valor del agua es la principal causa de su desperdicio y mal uso. La dificultad de asignar un valor objetivo e indiscutible a un recurso que es la base misma de la vida, hace necesario explicar las diferentes dimensiones del agua para arrojar luz sobre los distintos aspectos de su “valor”. Sobre todo en momentos en que este recurso es cada vez más escaso, en un contexto de crecimiento demográfico y cambio climático.

El informe aborda un tema diferente cada año, es el principal informe de ONU-Agua sobre cuestiones de agua y saneamiento, es publicado por la UNESCO, y su elaboración está coordinada por el Programa Mundial de Evaluación de los Recursos Hídricos. En él se describen los principales avances en la situación, el uso y la gestión del agua dulce y el saneamiento a partir del trabajo de los miembros y socios de ONU-Agua. Se publica en el Día Mundial del Agua, pero en esta ocasión se presentó la versión en español que pueden descargar en http://www.unesco.org/reports/wwdr/2021/es/download-the-report.

El valor del agua es realmente incalculable, infinito, ya que la vida no existe sin ella y no hay sustituto para ella, pero las herramientas y metodologías para determinar el valor del agua son imperfectas y poco utilizadas.

Las herramientas disponibles hoy día tienden a reducir al agua únicamente a su aspecto económico. No se trata de negar que el agua pueda tener un valor económico: es un recurso que puede utilizarse para muchos fines: producción de alimentos, electricidad, usos industriales, etc. Sin embargo, aunque la valoración monetaria tiene la ventaja de ser conveniente y fácil de entender para el uso del agua en la agricultura y la industria, tiene la desventaja de infravalorar o incluso ignorar otros aspectos que son más difíciles de traducir en una cantidad monetaria. Por ejemplo, ¿cómo podemos cuantificar los 443 millones de días escolares que se pierden cada año en el mundo por enfermedades relacionadas con el agua? ¿Y las 780 mil muertes que se producen cada año por enfermedades asociadas al consumo de agua de mala calidad? El mayor valor se lo dan quienes no la tienen. ¿Será necesario llegar a una crisis del agua para valorarla?

El agua es nuestro recurso más preciado, un ‘oro azul’ al que más de 2,000 millones de personas no tienen acceso. No solo es esencial para la supervivencia, sino que también desempeña un papel sanitario, social y cultural en el seno de las sociedades humanas.

Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO

El pasado 21 de julio en la Ciudad de México, la UNESCO, la ANEAS, el BID y la CONAGUA llevaron a cabo la presentación de la versión en español del Informe Mundial de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos 2021.

Titulado “El valor del agua”, el informe de este año demuestra que si el agua se descuida y desperdicia a menudo es porque tendemos a pensar en ella como algo que la naturaleza nos da, sin percibir su inmenso valor, que ningún precio puede reflejar.

El agua es un recurso único e insustituible cuya cantidad es limitada. Al ser fundamental para la vida, las sociedades y las economías, presenta múltiples valores y beneficios, pero, al contrario que con la mayoría de los recursos valiosos, se ha comprobado que su valor “real” resulta muy difícil de determinar.

El informe examina el estado actual y los retos de la valoración del agua en distintos sectores y desde diferentes perspectivas e identifica las formas en las que se puede fomentar dicha valoración como una herramienta que contribuya a alcanzar la sostenibilidad.

La falta de reconocimiento del valor del agua es la principal causa de su desperdicio y mal uso. La dificultad de asignar un valor objetivo e indiscutible a un recurso que es la base misma de la vida, hace necesario explicar las diferentes dimensiones del agua para arrojar luz sobre los distintos aspectos de su “valor”. Sobre todo en momentos en que este recurso es cada vez más escaso, en un contexto de crecimiento demográfico y cambio climático.

El informe aborda un tema diferente cada año, es el principal informe de ONU-Agua sobre cuestiones de agua y saneamiento, es publicado por la UNESCO, y su elaboración está coordinada por el Programa Mundial de Evaluación de los Recursos Hídricos. En él se describen los principales avances en la situación, el uso y la gestión del agua dulce y el saneamiento a partir del trabajo de los miembros y socios de ONU-Agua. Se publica en el Día Mundial del Agua, pero en esta ocasión se presentó la versión en español que pueden descargar en http://www.unesco.org/reports/wwdr/2021/es/download-the-report.

El valor del agua es realmente incalculable, infinito, ya que la vida no existe sin ella y no hay sustituto para ella, pero las herramientas y metodologías para determinar el valor del agua son imperfectas y poco utilizadas.

Las herramientas disponibles hoy día tienden a reducir al agua únicamente a su aspecto económico. No se trata de negar que el agua pueda tener un valor económico: es un recurso que puede utilizarse para muchos fines: producción de alimentos, electricidad, usos industriales, etc. Sin embargo, aunque la valoración monetaria tiene la ventaja de ser conveniente y fácil de entender para el uso del agua en la agricultura y la industria, tiene la desventaja de infravalorar o incluso ignorar otros aspectos que son más difíciles de traducir en una cantidad monetaria. Por ejemplo, ¿cómo podemos cuantificar los 443 millones de días escolares que se pierden cada año en el mundo por enfermedades relacionadas con el agua? ¿Y las 780 mil muertes que se producen cada año por enfermedades asociadas al consumo de agua de mala calidad? El mayor valor se lo dan quienes no la tienen. ¿Será necesario llegar a una crisis del agua para valorarla?