/ domingo 22 de agosto de 2021

Deuda municipal

Estamos a menos de medio año de que inicie un nuevo capítulo en los distintos municipios que conforman el estado de Morelos. En enero, entrarán en funciones nuevos ayuntamientos que llevarán a cabo las actividades municipales durante los próximos 3 años.

Lamentablemente, el cambio de alcaldías se dará dentro de un contexto desfavorable para las y los morelenses. Los distintos municipios enfrentan problemas profundos que —en muchos casos— fueron desatendidos (y, por ende, agraviados) por los gobiernos municipales salientes. Dichas problemáticas incluyen la falta de mantenimiento en las ciudades y poblados, problemas para suministrar los servicios básicos y una deuda pública muy elevada. Este último punto es especialmente preocupante para las y los alcaldes que están por asumir sus funciones.

De acuerdo con Enrique Alonso Plascencia, director del Instituto de Desarrollo y Fortalecimiento Municipal del Estado de Morelos (Idefomm), la deuda en materia de laudos asciende a los 600 millones de pesos, cifra que, en su mayoría, corresponde a demandas laborales.

Con lo anterior, podemos dar cuenta que una mala administración tiene consecuencias que van más allá de su presente, ya que sienta las bases para un mal mayor en el futuro. Evidentemente, la responsabilidad de gobernar debe estar pensada para las y los ciudadanos del hoy y del mañana.

Hay que tener claro que los gobiernos municipales son la base de la gobernabilidad de los demás niveles de gobierno. Es aquí donde se atienden con mayor cercanía las necesidades y las problemáticas que afectan a las poblaciones. En este sentido, es sumamente grave que las nuevas administraciones vayan a dar inicio sus funciones con cifras tan altas de deuda pública, dado que esto obstaculizará los trabajos en beneficio de las y los morelenses.

El reto que viene es uno mayúsculo. Las habilidades administrativas de las personas que ocuparán las distintas alcaldías deben estar a la altura de reto, para poder hacer frente a la deuda pública y, al mismo tiempo, abonar el desarrollo de sus localidades y el bienestar de su población. Se debe tener la capacidad de cumplir con metas a corto, mediano y largo plazo.

Desde este espacio deseo el mayor de los éxitos para los nuevos alcaldes y alcaldesas en el ejercicio de sus funciones. Será de suma importancia que den los resultados necesarios para cambiar el rumbo de sus espacios. Reitero, la gobernabilidad empieza desde el municipio, los problemas se atienden desde los espacios locales y, así, alcanzaremos un desarrollo para todas y para todos.

Lucy Meza, senadora por Morelos

Redes sociales: @LuciaMezaGzm

Estamos a menos de medio año de que inicie un nuevo capítulo en los distintos municipios que conforman el estado de Morelos. En enero, entrarán en funciones nuevos ayuntamientos que llevarán a cabo las actividades municipales durante los próximos 3 años.

Lamentablemente, el cambio de alcaldías se dará dentro de un contexto desfavorable para las y los morelenses. Los distintos municipios enfrentan problemas profundos que —en muchos casos— fueron desatendidos (y, por ende, agraviados) por los gobiernos municipales salientes. Dichas problemáticas incluyen la falta de mantenimiento en las ciudades y poblados, problemas para suministrar los servicios básicos y una deuda pública muy elevada. Este último punto es especialmente preocupante para las y los alcaldes que están por asumir sus funciones.

De acuerdo con Enrique Alonso Plascencia, director del Instituto de Desarrollo y Fortalecimiento Municipal del Estado de Morelos (Idefomm), la deuda en materia de laudos asciende a los 600 millones de pesos, cifra que, en su mayoría, corresponde a demandas laborales.

Con lo anterior, podemos dar cuenta que una mala administración tiene consecuencias que van más allá de su presente, ya que sienta las bases para un mal mayor en el futuro. Evidentemente, la responsabilidad de gobernar debe estar pensada para las y los ciudadanos del hoy y del mañana.

Hay que tener claro que los gobiernos municipales son la base de la gobernabilidad de los demás niveles de gobierno. Es aquí donde se atienden con mayor cercanía las necesidades y las problemáticas que afectan a las poblaciones. En este sentido, es sumamente grave que las nuevas administraciones vayan a dar inicio sus funciones con cifras tan altas de deuda pública, dado que esto obstaculizará los trabajos en beneficio de las y los morelenses.

El reto que viene es uno mayúsculo. Las habilidades administrativas de las personas que ocuparán las distintas alcaldías deben estar a la altura de reto, para poder hacer frente a la deuda pública y, al mismo tiempo, abonar el desarrollo de sus localidades y el bienestar de su población. Se debe tener la capacidad de cumplir con metas a corto, mediano y largo plazo.

Desde este espacio deseo el mayor de los éxitos para los nuevos alcaldes y alcaldesas en el ejercicio de sus funciones. Será de suma importancia que den los resultados necesarios para cambiar el rumbo de sus espacios. Reitero, la gobernabilidad empieza desde el municipio, los problemas se atienden desde los espacios locales y, así, alcanzaremos un desarrollo para todas y para todos.

Lucy Meza, senadora por Morelos

Redes sociales: @LuciaMezaGzm