/ martes 26 de octubre de 2021

Desencuentros y desamores

“Dos personas no son amigas porque se miran mutuamente, sino porque miran ambas en la misma dirección”. Antoine de Saint-Exupéry.

En política lo anterior toma fuerza cuando emergen intereses comunes, de esa manera afinidad e ideología pueden ser remplazadas por simples pero estratégicas alianzas, eso supone armonía sin embargo no todo es perfecto y con amigos o aliados se dan desamores; entre adversarios no faltan desencuentros en el polarizado ambiente político mexicano; la animadversión está en constante ebullición y las fricciones no son pocas, analicemos algunas.

Desamor, la bizarra alianza (capaz de unir el agua y el aceite) conocida como “Sí por México” se encuentra en un momento crucial y definitorio, la decisión del PRI respecto a la reforma eléctrica propuesta por López Obrador, decidirá también las elecciones de 2024, de ese tamaño puesto que los líderes del PAN y el PRD advierten un rompimiento con el tricolor si éste apoya dicha reforma.

Aunado a ese escenario, los niveles de aprobación que capta el titular del ejecutivo (aún cuando mermaran en la segunda mitad del sexenio) dejan ver que la victoria para la llamada 4T estaría cantada.

Los ingredientes necesarios están ahí, Marko Cortés asumiéndose dueño del balón y sin tomar en cuenta al bloque existente; de hecho no menciona a ningún priista en su larga “lista de presidenciables”.

Mientras tanto Layda Sansores desde Campeche, parece dispuesta a recordar lo que Alito Moreno quisiera olvidar, el PRIMOR no parece utópico si consideramos la enorme probabilidad de que el revolucionario institucional pierda sus últimos bastiones en 2023 e ingrese a terapia intensiva; la conveniencia de una alianza (incluso disimulada) con MORENA podría significar oxígeno puro, las cúpulas del otrora poderoso partido ya deben haberlo considerado, la dubitativa postura del PRI no es casual y la situación vivida al otro lado del océano con respecto a las tarifas eléctricas podrían darle la salida perfecta.

Mas no sería la primera vez que la mano del coordinador de la bancada priista Rubén Moreira se levante a favor de una propuesta del huésped de Palacio Nacional, en este ajedrez político el incipiente romance entre PRI y PAN podría terminar con un jaque mate.

Desencuentro, en Jalisco se está dando un choque de grandes dimensiones, la reasignación de 140 millones de pesos que irían a la Universidad de Guadalajara como parte de contribuciones del gobierno estatal parece ser simple pretexto para el distanciamiento entre el Gobernador Enrique Alfaro y Raúl Padilla López quien fuera rector de la UdeG y actualmente uno de los políticos más influyentes y no menos polémicos de la Entidad Jalisciense, Padilla es la mano que mece la cuna en la Universidad Tapatía, controla rectoría, sindicatos universitarios, federación de estudiantes y funge como presidente honorario de un conglomerado de once “empresas universitarias”.

Evidente resulta la gran capacidad de movilización y sumemos el desacuerdo de la comunidad universitaria porque el Gobernador Alfaro (hijo también de un ex rector) pretenda redirigir los mencionados recursos a un hospital en Tonalá.

Por lo tanto se ha motivado un frecuente y ríspido debate entre ambos actores políticos, alcanzando el punto álgido en una de las conferencias de prensa del mandatario estatal ya calificadas como las “regañaneras” en donde dijo en enérgico tono “Al Señor Raúl Padilla y lacayos, de una vez les digo que la época oscura en la que manipularon a las instituciones y sometieron a los gobiernos para lucrar y hacer negocios personales, se acabó en Jalisco, pueden patalear, hacer lo que quieran pero esa etapa no va a volver”.

El asunto escalará y las consecuencias políticas se antojan de pronóstico reservado, cierto que el Gobernador Alfaro es uno de los “presidenciables” del MC para 2024 pero Padilla López no es ningún advenedizo; de aquí saldrán chispas.

Desencuentro, la antigua rivalidad entre Claudio X. González y Andrés Manuel López Obrador ha subido de volumen, desde ese púlpito tan criticado pero también envidiado conocido como “la mañanera”, el Presidente aprovecha la proyección que el espacio le brinda para arremeter contra justos y pecadores. Entre quienes él considera “verdaderas almas perdidas” se encuentra el acaudalado empresario, quien tuiteó:

“La llamada 4T, una gran farsa, acabará mal, muy mal. Hay que tomar nota de todos aquellos que, por acción o por omisión, alentaron las acciones y hechos de la actual administración y lastimaron a México. Que no se olvide quien se puso del lado del autoritarismo populista y destructor” así escribió su amenaza, porque eso no puede leerse y entenderse de otra forma.

Y me pregunto ¿habrá tomado en cuenta también a los casi 35 millones de mexicanos que no votaron en 2018 y encuadran en el rubro de omisión? Sumando esos números a los 30 millones que por acción (mediante sufragio) apoyaron al proyecto lopezobradorista nos da como resultado una “lista negra” de 65 millones de ciudadanos, ni la Gestapo de la Alemania Nazi tuvo tal capacidad de espionaje con fines represivos.

Espero se haya tratado de un lapsus parecido al que tuvo Francisco Martín Morenos el autor de “Arrebatos Carnales” quien en un “arrebato mental” dijo que desearía quemar en el Zócalo de la CDMX a todos los simpatizantes de MORENA, algo grave pasa con este nivel de oposición.

Existen en el escenario muchos desamores y desencuentros, como el de Irma Eréndira Sandoval (ex titular de la Secretaría de la Función Pública) contra el proyecto de gobierno de donde fue separada o no olvidemos a AMLO en sus recientes declaraciones sobre la “derechización” de la UNAM, pero ya será material para otra ocasión, la polarización da para eso y más.


“Dos personas no son amigas porque se miran mutuamente, sino porque miran ambas en la misma dirección”. Antoine de Saint-Exupéry.

En política lo anterior toma fuerza cuando emergen intereses comunes, de esa manera afinidad e ideología pueden ser remplazadas por simples pero estratégicas alianzas, eso supone armonía sin embargo no todo es perfecto y con amigos o aliados se dan desamores; entre adversarios no faltan desencuentros en el polarizado ambiente político mexicano; la animadversión está en constante ebullición y las fricciones no son pocas, analicemos algunas.

Desamor, la bizarra alianza (capaz de unir el agua y el aceite) conocida como “Sí por México” se encuentra en un momento crucial y definitorio, la decisión del PRI respecto a la reforma eléctrica propuesta por López Obrador, decidirá también las elecciones de 2024, de ese tamaño puesto que los líderes del PAN y el PRD advierten un rompimiento con el tricolor si éste apoya dicha reforma.

Aunado a ese escenario, los niveles de aprobación que capta el titular del ejecutivo (aún cuando mermaran en la segunda mitad del sexenio) dejan ver que la victoria para la llamada 4T estaría cantada.

Los ingredientes necesarios están ahí, Marko Cortés asumiéndose dueño del balón y sin tomar en cuenta al bloque existente; de hecho no menciona a ningún priista en su larga “lista de presidenciables”.

Mientras tanto Layda Sansores desde Campeche, parece dispuesta a recordar lo que Alito Moreno quisiera olvidar, el PRIMOR no parece utópico si consideramos la enorme probabilidad de que el revolucionario institucional pierda sus últimos bastiones en 2023 e ingrese a terapia intensiva; la conveniencia de una alianza (incluso disimulada) con MORENA podría significar oxígeno puro, las cúpulas del otrora poderoso partido ya deben haberlo considerado, la dubitativa postura del PRI no es casual y la situación vivida al otro lado del océano con respecto a las tarifas eléctricas podrían darle la salida perfecta.

Mas no sería la primera vez que la mano del coordinador de la bancada priista Rubén Moreira se levante a favor de una propuesta del huésped de Palacio Nacional, en este ajedrez político el incipiente romance entre PRI y PAN podría terminar con un jaque mate.

Desencuentro, en Jalisco se está dando un choque de grandes dimensiones, la reasignación de 140 millones de pesos que irían a la Universidad de Guadalajara como parte de contribuciones del gobierno estatal parece ser simple pretexto para el distanciamiento entre el Gobernador Enrique Alfaro y Raúl Padilla López quien fuera rector de la UdeG y actualmente uno de los políticos más influyentes y no menos polémicos de la Entidad Jalisciense, Padilla es la mano que mece la cuna en la Universidad Tapatía, controla rectoría, sindicatos universitarios, federación de estudiantes y funge como presidente honorario de un conglomerado de once “empresas universitarias”.

Evidente resulta la gran capacidad de movilización y sumemos el desacuerdo de la comunidad universitaria porque el Gobernador Alfaro (hijo también de un ex rector) pretenda redirigir los mencionados recursos a un hospital en Tonalá.

Por lo tanto se ha motivado un frecuente y ríspido debate entre ambos actores políticos, alcanzando el punto álgido en una de las conferencias de prensa del mandatario estatal ya calificadas como las “regañaneras” en donde dijo en enérgico tono “Al Señor Raúl Padilla y lacayos, de una vez les digo que la época oscura en la que manipularon a las instituciones y sometieron a los gobiernos para lucrar y hacer negocios personales, se acabó en Jalisco, pueden patalear, hacer lo que quieran pero esa etapa no va a volver”.

El asunto escalará y las consecuencias políticas se antojan de pronóstico reservado, cierto que el Gobernador Alfaro es uno de los “presidenciables” del MC para 2024 pero Padilla López no es ningún advenedizo; de aquí saldrán chispas.

Desencuentro, la antigua rivalidad entre Claudio X. González y Andrés Manuel López Obrador ha subido de volumen, desde ese púlpito tan criticado pero también envidiado conocido como “la mañanera”, el Presidente aprovecha la proyección que el espacio le brinda para arremeter contra justos y pecadores. Entre quienes él considera “verdaderas almas perdidas” se encuentra el acaudalado empresario, quien tuiteó:

“La llamada 4T, una gran farsa, acabará mal, muy mal. Hay que tomar nota de todos aquellos que, por acción o por omisión, alentaron las acciones y hechos de la actual administración y lastimaron a México. Que no se olvide quien se puso del lado del autoritarismo populista y destructor” así escribió su amenaza, porque eso no puede leerse y entenderse de otra forma.

Y me pregunto ¿habrá tomado en cuenta también a los casi 35 millones de mexicanos que no votaron en 2018 y encuadran en el rubro de omisión? Sumando esos números a los 30 millones que por acción (mediante sufragio) apoyaron al proyecto lopezobradorista nos da como resultado una “lista negra” de 65 millones de ciudadanos, ni la Gestapo de la Alemania Nazi tuvo tal capacidad de espionaje con fines represivos.

Espero se haya tratado de un lapsus parecido al que tuvo Francisco Martín Morenos el autor de “Arrebatos Carnales” quien en un “arrebato mental” dijo que desearía quemar en el Zócalo de la CDMX a todos los simpatizantes de MORENA, algo grave pasa con este nivel de oposición.

Existen en el escenario muchos desamores y desencuentros, como el de Irma Eréndira Sandoval (ex titular de la Secretaría de la Función Pública) contra el proyecto de gobierno de donde fue separada o no olvidemos a AMLO en sus recientes declaraciones sobre la “derechización” de la UNAM, pero ya será material para otra ocasión, la polarización da para eso y más.