Efectivamente, uno de los escenarios se cumplió: MORENA obtuvo el triunfo en 4 de los 6 estado en disputa el pasado domingo. Las últimas dos semanas tuvimos oportunidad de conocer información respecto de los pronósticos y las incidencias en las campañas electorales. Nada fuera de lo común. MORENA anunciaba que ganarían en 5 estados y el PAN, por voz de su presidente, luego de una declaración con dirigentes y militantes panistas señalaba que sólo tenía asegurado el triunfo en Aguascalientes, los demás estados estarían muy complicados, un tanto para justificar la necesidad de la alianza Va por México. Los 6 estados en disputa como señale anteriormente eran gobernados por miembros de dicha coalición. Hidalgo y Oaxaca el PRI, Aguascalientes, Durango, Tamaulipas y Quintana Roo el PAN.
Con los 4 estados ganados MORENA suma ya 20 gobernadores y gobernadoras colocándose como la primera fuerza política contundente en el país. Va por México solo rescata 2 gubernaturas. Con la novedad que el PRI vuelve a perder sus dos estados en elección, lo que ha dado pie a diversas interpretaciones, el hecho es que este partido, otrora hegemónico, ahora solo conserva 2 estados: Estado de México y Coahuila. Y se convierte en un partido marginal, al igual que MC, el PAN, por su parte, pierde 2 de sus 8 gubernaturas: Tamaulipas y Quintana Roo, ahora gobernará en 6 entidades: Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Querétaro y Yucatán. Y como de hablar se trata, con esta derrota de todos modos con orgullo su presidente nacional dijo qué “Si hay tiro para el 2024”, al tiempo que celebraba dos victorias, cosas de la política, pues.
Fueron las primeras elecciones “después de la pandemia” y lo que se observó fue una recuperación significativa de la “normalidad” electoral. Tanto el INE y los organismos electorales locales fueron dando cuenta de la jornada que transcurrió con las incidencias propias de un proceso: retraso en algunas casillas para su apertura, casillas no instaladas, mutuas denuncias de irregularidades entre equipos de campañas, etc. Todas en menores proporciones y sin afectación a los resultados.
Queda claro que él gran ganador fue MORENA y el Presidente y junto con ellos sus aliados, particularmente el Partido Verde, lo que agudizará las presiones internas en busca de la nominación. Pero, igualmente, en la alianza Va por México, que buscará entre las piedras algún posible buen candidato que por lo pronto no existe. Habrá aún que esperar a los conteos finales el próximo domingo. Que tengan buena semana.
