/ viernes 16 de julio de 2021

Comida mexicana... ¡qué rico!

Existe bastante evidencia de que muchas de las actividades del género Homo, particularmente el ser humano (SH), tienen grandes repercusiones adaptativas de la especie, como los son la domesticación de especies (animales y vegetales) y el lenguaje.

Otro evento fundamental ha sido el intercambio de productos, especialmente con el gran incremento de la población del SH básicamente en todos los rincones del planeta. Obviamente, esto ha sido relativamente “reciente”, especialmente cuando se “descubrió” el continente americano, sin olvidar qué hay otras hipótesis de una llegada antes de este tiempo; de cualquier manera, el encuentro “oficial” fue en 1492, tuvo impactos mayores. No deseo hacer juicios si éste fue bueno malo, para no distraerme en ese tipo de debates. ¿Dónde ponemos la raya?; sabemos que el SH, originalmente especió -como tal- en África, entonces (por ejemplo) no es originario de América. Por lo tanto, si pidiéramos disculpas de lo que ha hecho el SH, no terminaríamos nunca, debido a que si algo tiene esta especie es lo bélico e invasivo que ha sido.

Pero bueno, a raíz de esta fecha, con todas las diferentes repercusiones que tuvo este hecho, el intercambio entre estas dos áreas fue verdaderamente fenomenal, especialmente entre México y España. Ya en otras ocasiones he escrito acerca de que, México es un país megadiverso, encontrándose en los primeros cuatro lugares a nivel mundial en cuanto a número de especies de los principales grupos bilógicos por varias razones, sobresaliendo su posición geográfica entre dos biotas: neotropical (del sur) y la neártica (del norte). Dicha diversidad, va concatenada con otros aspectos, como lo representa la comida. Cuando fue el encuentro de estas culturas, ocurrió también el intercambio de productos vegetales y animales. En este aspecto, cabe resaltar qué fueron principalmente plantas, por diferentes razones, sobresaliendo el: maíz, frijol, chile, jitomate, calabaza, chocolate y quelites, entre muchos otros.

La riqueza de los alimentos ingeridos es un atributo de muchas especies, particularmente del SH, contribuyendo sustancialmente a diversificar y fortalecer la nutrición. Por supuesto que esto es relativamente reciente (529 años), y, por lo tanto, se requieren estudios adicionales de carácter adaptativo; pero existe la evidencia de que la diversidad de comida sí tiene una relevante ventaja selectiva. Lo que también es hecho es que los mexicanos, quizás, debemos diversificar un poco lo que comemos. Nada más veamos cuantos platillos tenemos con base en el maíz. Hay un meme reciente que trata el asunto de cuáles ingredientes deberían llevar un sope, una quesadilla, una tostada, chilaquiles, y una enchilada: maíz, salsa, y queso. Pero las opciones de alimentos mexicanos son múltiples, sólo pienso que debemos tener una cierta educación para la alimentación, siendo esto muy palpable -especialmente- en la reciente pandemia.

Pero en México somos privilegiados, tres morelenses, los Maestros Adalberto, Ernesto y Adalberto (junior) Ríos Szalay, estuvieron involucrados para lograr el reconocimiento mundial de la gastronomía mexicana, fueron a 20 comunidades purépechas y levantaron el punto de vista de las mujeres, y con esta información, se logró a la primera. Es decir, debido a esto obtuvieron un reconocimiento muy importante para Michoacán que al final debido a su excelsitud y diversidad de México, la gastronomía de este país en su totalidad fue declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 2010, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). A partir de ahí se derivó toda una acción para crear una serie de empresas de las comunidades. Confirmando así que la cocina mexicana es de las mejores del mundo.

Por eso y muchas cosas más, México… ¡Qué Rico!

Existe bastante evidencia de que muchas de las actividades del género Homo, particularmente el ser humano (SH), tienen grandes repercusiones adaptativas de la especie, como los son la domesticación de especies (animales y vegetales) y el lenguaje.

Otro evento fundamental ha sido el intercambio de productos, especialmente con el gran incremento de la población del SH básicamente en todos los rincones del planeta. Obviamente, esto ha sido relativamente “reciente”, especialmente cuando se “descubrió” el continente americano, sin olvidar qué hay otras hipótesis de una llegada antes de este tiempo; de cualquier manera, el encuentro “oficial” fue en 1492, tuvo impactos mayores. No deseo hacer juicios si éste fue bueno malo, para no distraerme en ese tipo de debates. ¿Dónde ponemos la raya?; sabemos que el SH, originalmente especió -como tal- en África, entonces (por ejemplo) no es originario de América. Por lo tanto, si pidiéramos disculpas de lo que ha hecho el SH, no terminaríamos nunca, debido a que si algo tiene esta especie es lo bélico e invasivo que ha sido.

Pero bueno, a raíz de esta fecha, con todas las diferentes repercusiones que tuvo este hecho, el intercambio entre estas dos áreas fue verdaderamente fenomenal, especialmente entre México y España. Ya en otras ocasiones he escrito acerca de que, México es un país megadiverso, encontrándose en los primeros cuatro lugares a nivel mundial en cuanto a número de especies de los principales grupos bilógicos por varias razones, sobresaliendo su posición geográfica entre dos biotas: neotropical (del sur) y la neártica (del norte). Dicha diversidad, va concatenada con otros aspectos, como lo representa la comida. Cuando fue el encuentro de estas culturas, ocurrió también el intercambio de productos vegetales y animales. En este aspecto, cabe resaltar qué fueron principalmente plantas, por diferentes razones, sobresaliendo el: maíz, frijol, chile, jitomate, calabaza, chocolate y quelites, entre muchos otros.

La riqueza de los alimentos ingeridos es un atributo de muchas especies, particularmente del SH, contribuyendo sustancialmente a diversificar y fortalecer la nutrición. Por supuesto que esto es relativamente reciente (529 años), y, por lo tanto, se requieren estudios adicionales de carácter adaptativo; pero existe la evidencia de que la diversidad de comida sí tiene una relevante ventaja selectiva. Lo que también es hecho es que los mexicanos, quizás, debemos diversificar un poco lo que comemos. Nada más veamos cuantos platillos tenemos con base en el maíz. Hay un meme reciente que trata el asunto de cuáles ingredientes deberían llevar un sope, una quesadilla, una tostada, chilaquiles, y una enchilada: maíz, salsa, y queso. Pero las opciones de alimentos mexicanos son múltiples, sólo pienso que debemos tener una cierta educación para la alimentación, siendo esto muy palpable -especialmente- en la reciente pandemia.

Pero en México somos privilegiados, tres morelenses, los Maestros Adalberto, Ernesto y Adalberto (junior) Ríos Szalay, estuvieron involucrados para lograr el reconocimiento mundial de la gastronomía mexicana, fueron a 20 comunidades purépechas y levantaron el punto de vista de las mujeres, y con esta información, se logró a la primera. Es decir, debido a esto obtuvieron un reconocimiento muy importante para Michoacán que al final debido a su excelsitud y diversidad de México, la gastronomía de este país en su totalidad fue declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 2010, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). A partir de ahí se derivó toda una acción para crear una serie de empresas de las comunidades. Confirmando así que la cocina mexicana es de las mejores del mundo.

Por eso y muchas cosas más, México… ¡Qué Rico!