Esta semana conocí las Carnitas El Chivo en Lomas de Cortés y la verdad me sorprendió que con el paso de los años, han construido un público que responde fiel a su modo de hacer y vender tanto las carnitas, como la barbacoa.
Y es que los jueves abren a las dos y terminan a las cuatro o quizá las cinco de la tarde, pero eso sí, acaban todo y hasta la última hebra de carne.
Aquí la especialidad son el cuerito, el buche, la nana y el chamorro, además de la salsa verde cruda, que se hace indispensable para acompañar los tacotes tamaño casi familiar.
Aunque no logré probarlo porque llegué muy tarde, medio mundo me habló del cuero carnudo que prepara el Chivo y del que dicen, casi casi es necesario llamar por teléfono para apartarlo porque aunque es carne de cuche, vuela como si fuera un ave.
Los sábados abren desde la mañana, por lo que es necesario ir temprano y no confiarse en la suerte: es muy probable que a la una, ya no puedas disfrutar del manjar.
Para cerrar con broche de oro, los domingos el Chivo prepara la barbacha que también está cotizada y la ofrecen con la misma advertencia casi arrogante, pero que sabemos que es verdad: si te confías y llegas tarde, no vas a hallar de lo que quieres, sino de lo que encuentres.
La cereza al pastel la constituye un hermoso refrigerador gigante que coquetea con un anuncio de -2 grados, pintado en su pantalla frontal, que significa claramente que estas perdiendo el tiempo si no llegas directo a pedir una bien muerta.
Carnitas El Chivo está ubicada en Antiguo Camino a Ahuatepec número 4, casi esquina con Nueva Inglaterra, en Lomas de Cortés y la encuentras así en Facebook y Maps donde puedes consultar todo lo que ofrecen.
Sígueme en Facebook como Castrando Ando