/ domingo 25 de octubre de 2020

Arterias tapadas

Durante las últimas semanas, hemos atestiguado diversas agresiones en contra de automovilistas, por parte de grupos que toman las casetas de cobro exigiendo “cooperaciones voluntarias”. Para contextualizar, esta práctica tiene como antecedente la toma pacífica de estos espacios en donde, efectivamente, se solicitaban donaciones voluntarias para apoyar a sus movimientos sociales de manera pacífica.

Lamentablemente, diversos grupos de personas han utilizado este tipo de actos para aprovecharse de la generosidad de nuestra gente, sin una causa legítima de fondo y, lo peor de todo, haciendo uso de la violencia para amedrentar a las personas que circulan por las arterias del país.

Ejemplo de ello, son las recientes agresiones hacia un camión en la caseta de Alpuyeca, Morelos. Ahí, luego de que el conductor se negara a pagar una “cooperación voluntaria”, personas que se encontraban tomando el lugar lanzaron piedras contra los cristales del vehículo, lo que no solo causó daño a la unidad, sino que, además, puso en riesgo a las personas que viajaban a bordo. Este caso es llamativo por dos motivos, primero, por la violencia ejercida hacia el transporte y sus tripulantes; segundo, porque las personas que tomaron la caseta fueron detenidas y, presuntamente, se dio cuenta que tenían vínculos con un grupo criminal.

También, hace unas semanas nos enteramos de la lamentable noticia de que un joven que tomaban una caseta en Morelia fue atropellado, luego de que el chofer de un automóvil se negó a dar la cuota voluntaria. Muy tristemente, falleció al poco tiempo.

Por otro lado, vale la pena señalar que la ocupación de estos espacios causa graves daños al erario. En 2019, la Hacienda Pública dejó de percibir 3,000 millones de pesos por este tema. Este año, se estima que cuando se bloquea la caseta México-Cuernavaca, se alcanzan recaudaciones de alrededor de 200 mil pesos en unas tres horas, de acuerdo con estimaciones de un ejercicio periodístico.

¿A qué voy con todo esto? A que la toma de casetas ha llegado a niveles descontrolados. La violencia, las intimidaciones y los abusos ocurren cada vez con más frecuencia lo que, lamentablemente, pone en riesgo a todas las personas involucradas y afectadas por este fenómeno. Urge atender este asunto para salvaguardar la integridad, seguridad y tranquilidad de todas y todos quienes transitamos por las vías federales.

En unos días, estaremos abordando en el Senado un punto de acuerdo que presenté el 13 de octubre, con el que hago un llamado a la Secretaria de Comunicaciones y Transportes, y a Caminos y Puentes Federales de Ingresos y Servicios Conexos; a prevenir la toma de casetas en México y, con ello, evitar importantes pérdidas a la Hacienda pública. También, pido a la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana evitar este tipo de actos, coadyuvar a la prevención del delito y proteger a la población ante todo tipo de amenazas y riesgos.

Por mucho tiempo, esta práctica ha sido utilizada para lucrar con la generosidad de nuestra gente. Es una pena que ahora, con abusos y agresiones, diversos grupos pretenden causar miedo para hacerse de ingresos de manera ilícita. No permitiremos que se agreda a la ciudadanía ni que se le arrebate su tranquilidad. El Sistema Nacional de Carreteras brinda acceso a escuelas, hospitales, fábricas y comercios enriqueciendo a la sociedad y generando un constante desarrollo. Sin duda, es clave para la economía mexicana y el bienestar del país. Por el bien de México y su pueblo, no nos quedaremos con los brazos cruzados.


Senadora por Morelos

Redes sociales: @LuciaMezaGzm

Durante las últimas semanas, hemos atestiguado diversas agresiones en contra de automovilistas, por parte de grupos que toman las casetas de cobro exigiendo “cooperaciones voluntarias”. Para contextualizar, esta práctica tiene como antecedente la toma pacífica de estos espacios en donde, efectivamente, se solicitaban donaciones voluntarias para apoyar a sus movimientos sociales de manera pacífica.

Lamentablemente, diversos grupos de personas han utilizado este tipo de actos para aprovecharse de la generosidad de nuestra gente, sin una causa legítima de fondo y, lo peor de todo, haciendo uso de la violencia para amedrentar a las personas que circulan por las arterias del país.

Ejemplo de ello, son las recientes agresiones hacia un camión en la caseta de Alpuyeca, Morelos. Ahí, luego de que el conductor se negara a pagar una “cooperación voluntaria”, personas que se encontraban tomando el lugar lanzaron piedras contra los cristales del vehículo, lo que no solo causó daño a la unidad, sino que, además, puso en riesgo a las personas que viajaban a bordo. Este caso es llamativo por dos motivos, primero, por la violencia ejercida hacia el transporte y sus tripulantes; segundo, porque las personas que tomaron la caseta fueron detenidas y, presuntamente, se dio cuenta que tenían vínculos con un grupo criminal.

También, hace unas semanas nos enteramos de la lamentable noticia de que un joven que tomaban una caseta en Morelia fue atropellado, luego de que el chofer de un automóvil se negó a dar la cuota voluntaria. Muy tristemente, falleció al poco tiempo.

Por otro lado, vale la pena señalar que la ocupación de estos espacios causa graves daños al erario. En 2019, la Hacienda Pública dejó de percibir 3,000 millones de pesos por este tema. Este año, se estima que cuando se bloquea la caseta México-Cuernavaca, se alcanzan recaudaciones de alrededor de 200 mil pesos en unas tres horas, de acuerdo con estimaciones de un ejercicio periodístico.

¿A qué voy con todo esto? A que la toma de casetas ha llegado a niveles descontrolados. La violencia, las intimidaciones y los abusos ocurren cada vez con más frecuencia lo que, lamentablemente, pone en riesgo a todas las personas involucradas y afectadas por este fenómeno. Urge atender este asunto para salvaguardar la integridad, seguridad y tranquilidad de todas y todos quienes transitamos por las vías federales.

En unos días, estaremos abordando en el Senado un punto de acuerdo que presenté el 13 de octubre, con el que hago un llamado a la Secretaria de Comunicaciones y Transportes, y a Caminos y Puentes Federales de Ingresos y Servicios Conexos; a prevenir la toma de casetas en México y, con ello, evitar importantes pérdidas a la Hacienda pública. También, pido a la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana evitar este tipo de actos, coadyuvar a la prevención del delito y proteger a la población ante todo tipo de amenazas y riesgos.

Por mucho tiempo, esta práctica ha sido utilizada para lucrar con la generosidad de nuestra gente. Es una pena que ahora, con abusos y agresiones, diversos grupos pretenden causar miedo para hacerse de ingresos de manera ilícita. No permitiremos que se agreda a la ciudadanía ni que se le arrebate su tranquilidad. El Sistema Nacional de Carreteras brinda acceso a escuelas, hospitales, fábricas y comercios enriqueciendo a la sociedad y generando un constante desarrollo. Sin duda, es clave para la economía mexicana y el bienestar del país. Por el bien de México y su pueblo, no nos quedaremos con los brazos cruzados.


Senadora por Morelos

Redes sociales: @LuciaMezaGzm