/ sábado 20 de noviembre de 2021

Andrés Manuel, estadista que ubica y proyecta a México a nivel internacional

Ustedes, distinguidos lectores de esta columna, y yo, vimos, escuchamos y juzgamos imparcialmente la digna y decorosa presencia de México en las Naciones Unidas y en su reunión con los Presidentes Biden y Trudeau de Andrés Manuel López Obrador.

Si bien Trudeau es el Primer Ministro forma parte importante del Tratado de Libre Comercio de los tres países, que como bien ha dicho el Presidente Andrés Manuel, sumados tenemos aproximadamente entre mexicanos, norteamericanos y canadienses, casi 480 millones de seres humanos que podemos recibir todos los beneficios del Tratado de Libre Comercio (T-MEC) de América del Norte.

La presencia de Andrés Manuel junto con Biden y Trudeau resultan dignos representantes de sus países, porque además hemos recibido un trato igualitario, y quienes me honran leyendo esta columna, como lo expresé antes, escucharon, aplaudieron y expresaron su solidaridad con Andrés Manuel y con sus propuestas de estadista; no de político ni de oportunista.

La información que trasmitió Andrés Manuel el 9 de noviembre en la Organización de las Naciones Unidas en la Reunión Plenaria, lo perfiló como uno de los grandes estadistas del siglo XXI, que no piensa en su papel como Presidente en los próximos tres años; sino como lo expresó, en los próximos 30 años; cuando nos informó, y esto es para llamar la atención de quienes estamos en el área de América del Norte, que la actividad comercial puede ser la que nos saque a todos del subdesarrollo y de la mediocridad; ejemplificó con China que a finales del siglo pasado tenía un incipiente del 1% en la actividad comercial a nivel mundial, y que hoy supera a América del Norte con Canadá, México y Estados Unidos, nos informa y nos previene que en los próximos 30 años, si el Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos y Canadá no da los frutos adecuados, China en ese lapso podrá controlar el 42% del comercio mundial y la zona norte de América se habrá reducido al 12%, con lo que todo esto significaría para nuestros países.

Si como señaló Andrés Manuel al Presidente de Estados Unidos y al Primer Ministro de Canadá, no aprovechamos esta gran oportunidad para mejorar la de los millones de personas que viven y comercian en el área de América del Norte, estaremos condenados al fracaso, y nosotros dijo él como dirigentes de nuestros países, cargaremos con la responsabilidad de haber fracasado.

Igualmente debemos subrayar que desde el año 2018, cuando Andrés Manuel tomó posesión el 1 de diciembre de la Presidencia de la República y como Titular del Ejecutivo Federal, inició una batalla no contra molinos de viento como el Quijote sino contra la realidad testaruda y necia de los liberales, los neoliberales y todos aquellos que se han enriquecido al amparo del poder político vinculándolo con el poder económico; por ello es loable e invitamos a nuestros lectores a cerrar filas con Andrés Manuel, para que en el año que entra, al realizarse la encuesta de la revocación de mandato, no solamente ratifiquemos sino que salgamos a las calles a ponderar y hacer de nuestra parte lo que sea necesario para que la Cuarta Transformación se consolide.

CONCLUSIONES.

Primera. México tiene en Andrés Manuel, no un Presidente de banqueta, sino un estadista de proyección internacional, cuyos frutos están a la vista y en beneficio de todos los mexicanos.

Segunda. América del Norte tiene hoy la oportunidad con el T-MEC, Tratado México, Estados Unidos y Canadá de mejorar la vida específica de los 126 millones de mexicanos; de los 310 millones de norteamericanos y los 39 millones de canadienses; frente a esos números y esta importancia que se le está dando al comercio con el Tratado mencionado, debe ser la llamada de atención para que nos unamos todos con estos estadistas y cada quien en su trinchera hacer lo que debemos realizar para que México salga adelante y sobre todo se mejoren los niveles de vida de todos los mexicanos y las mexicanas.

Tercera. Desde nuestra perspectiva Biden y Trudeau deben seguir el ejemplo de Andrés Manuel quien predica con la verdad, la realidad, atacando la corrupción y sobre todo haciendo realidad los programas como el de Sembrando Vida y haberse convertido en un vigilante para que se mejoren las condiciones de la atmósfera, y sobre todo prevenir la contaminación y lograr con acciones de gobierno conjuntas con Canadá y Estados Unidos que el planeta tierra se salve.


Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. Politólogo Autodidacta. jhernandez366@hotmail.com



Ustedes, distinguidos lectores de esta columna, y yo, vimos, escuchamos y juzgamos imparcialmente la digna y decorosa presencia de México en las Naciones Unidas y en su reunión con los Presidentes Biden y Trudeau de Andrés Manuel López Obrador.

Si bien Trudeau es el Primer Ministro forma parte importante del Tratado de Libre Comercio de los tres países, que como bien ha dicho el Presidente Andrés Manuel, sumados tenemos aproximadamente entre mexicanos, norteamericanos y canadienses, casi 480 millones de seres humanos que podemos recibir todos los beneficios del Tratado de Libre Comercio (T-MEC) de América del Norte.

La presencia de Andrés Manuel junto con Biden y Trudeau resultan dignos representantes de sus países, porque además hemos recibido un trato igualitario, y quienes me honran leyendo esta columna, como lo expresé antes, escucharon, aplaudieron y expresaron su solidaridad con Andrés Manuel y con sus propuestas de estadista; no de político ni de oportunista.

La información que trasmitió Andrés Manuel el 9 de noviembre en la Organización de las Naciones Unidas en la Reunión Plenaria, lo perfiló como uno de los grandes estadistas del siglo XXI, que no piensa en su papel como Presidente en los próximos tres años; sino como lo expresó, en los próximos 30 años; cuando nos informó, y esto es para llamar la atención de quienes estamos en el área de América del Norte, que la actividad comercial puede ser la que nos saque a todos del subdesarrollo y de la mediocridad; ejemplificó con China que a finales del siglo pasado tenía un incipiente del 1% en la actividad comercial a nivel mundial, y que hoy supera a América del Norte con Canadá, México y Estados Unidos, nos informa y nos previene que en los próximos 30 años, si el Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos y Canadá no da los frutos adecuados, China en ese lapso podrá controlar el 42% del comercio mundial y la zona norte de América se habrá reducido al 12%, con lo que todo esto significaría para nuestros países.

Si como señaló Andrés Manuel al Presidente de Estados Unidos y al Primer Ministro de Canadá, no aprovechamos esta gran oportunidad para mejorar la de los millones de personas que viven y comercian en el área de América del Norte, estaremos condenados al fracaso, y nosotros dijo él como dirigentes de nuestros países, cargaremos con la responsabilidad de haber fracasado.

Igualmente debemos subrayar que desde el año 2018, cuando Andrés Manuel tomó posesión el 1 de diciembre de la Presidencia de la República y como Titular del Ejecutivo Federal, inició una batalla no contra molinos de viento como el Quijote sino contra la realidad testaruda y necia de los liberales, los neoliberales y todos aquellos que se han enriquecido al amparo del poder político vinculándolo con el poder económico; por ello es loable e invitamos a nuestros lectores a cerrar filas con Andrés Manuel, para que en el año que entra, al realizarse la encuesta de la revocación de mandato, no solamente ratifiquemos sino que salgamos a las calles a ponderar y hacer de nuestra parte lo que sea necesario para que la Cuarta Transformación se consolide.

CONCLUSIONES.

Primera. México tiene en Andrés Manuel, no un Presidente de banqueta, sino un estadista de proyección internacional, cuyos frutos están a la vista y en beneficio de todos los mexicanos.

Segunda. América del Norte tiene hoy la oportunidad con el T-MEC, Tratado México, Estados Unidos y Canadá de mejorar la vida específica de los 126 millones de mexicanos; de los 310 millones de norteamericanos y los 39 millones de canadienses; frente a esos números y esta importancia que se le está dando al comercio con el Tratado mencionado, debe ser la llamada de atención para que nos unamos todos con estos estadistas y cada quien en su trinchera hacer lo que debemos realizar para que México salga adelante y sobre todo se mejoren los niveles de vida de todos los mexicanos y las mexicanas.

Tercera. Desde nuestra perspectiva Biden y Trudeau deben seguir el ejemplo de Andrés Manuel quien predica con la verdad, la realidad, atacando la corrupción y sobre todo haciendo realidad los programas como el de Sembrando Vida y haberse convertido en un vigilante para que se mejoren las condiciones de la atmósfera, y sobre todo prevenir la contaminación y lograr con acciones de gobierno conjuntas con Canadá y Estados Unidos que el planeta tierra se salve.


Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. Politólogo Autodidacta. jhernandez366@hotmail.com