/ sábado 1 de febrero de 2020

¿Andrés Manuel está a favor o en contra de legalizar el uso total de la marihuana en México?

Si bien es un tema de moda, y sabiendo que Andrés Manuel se caracteriza por su claridad en el pensamiento y la expresión de sus palabras, hasta hoy no se ha manifestado a favor de esta iniciativa.

Tácitamente está en contra. No ha dicho palabra alguna al respecto. El tema ha sido soslayado. Si le han preguntado no tenemos memoria de su respuesta. Evidentemente hasta ahora no está de acuerdo con la legalización de la cannabis índica.

Por otro lado, hay que considerar que distinguidos funcionarios del gobierno de Andrés Manuel, como el coordinador de los Senadores de MORENA, Monreal, no sólo está a favor, tiene todo un estudio y una iniciativa que incluye sembrar, cosechar, industrializar, usos médicos, lúdicos, mercantiles y todo lo que signifique dinero desde el punto de vista de su legalización. No está sólo, también lo sigue Olga Sánchez la actual Secretaria de Gobernación, y otros funcionarios que están de acuerdo, casi al unísono de lo que ha hecho el alto vacío; es decir Fox, que como ya sabemos tiene incluso un invernadero para que en cuanto digan que se legaliza sea el número uno como industria y comerciante de esta hierba.

Aquí quisiéramos llamar la atención de nuestros distinguidos lectores porque sin que seamos expertos en la materia, es evidente que la mariguana es una droga. Que tiene efectos graves en la salud, en el cerebro, y cuando esto se enfoca hacia jóvenes, que no hay razón para decir que no podría llegar a los niños, a los adolescentes, y como bien lo vemos y se reitera en las pantallas del cine norteamericano, consumir mariguana en la familia, en público, en eventos sociales es una práctica cotidiana; habría que preguntarse qué clase de sociedad han generado los norteamericanos en cuanto a valores y sobre todo inclinaciones al consumo indiscriminado de las drogas; además se dice que esto puede ser, -opinión que no compartimos-, solución al grave problema del narcotráfico de mariguana; y no lo compartimos porque si se legalizara el robo no se acabaría; si se legalizara el homicidio tampoco, y en el caso concreto de la mariguana, legalizarla frente a todas las graves carencias que tiene nuestro país y sobre todo que la población más del 60% son jóvenes menores de 25 años, serán la presa fácil, el elemento consumidor de esta iniciativa, que para nosotros no debe aprobarse en ninguna circunstancia.

Además quienes somos padres de familia, y como en mi caso abstemio y no fumamos, nos preocupa que para empezar, el tabaco que es legal, sea la puerta que abra al consumo de la mariguana; y quién nos garantiza que los jóvenes, los adolescentes, los niños mariguanos no van a dar como siguiente paso el uso de alcaloides u otras sustancias más graves y más dañinas, o las propias anfetaminas como productos artificiales que finalmente atentaran contra la salud pública, familiar, de la sociedad y sobre todo no se va a quedar esto en la periferia de legalizar la marihuana sino que va penetrar el núcleo de la familia, la va a poner en graves aprietos y seguramente, ojalá no llegue ese momento, en que en una sobremesa de mexicanos, con hijos, tíos, sobrinos, abuelos, alguien de repente saque un puñado de cigarro de mariguana, e invite a la familia a fumar y a disfrutar, que imagínense que grave será para México, para el país, que ésto llegue a ser una realidad.

Estamos en contra de su consumo. En contra de su legalización en cualquier circunstancia. Incluso el uso medicinal debe ser bajo una supervisión estricta que no nos lleve al extremo de que sea la puerta falsa, el camino para que en muy poco tiempo este país, -y ojalá Andrés Manuel se mantenga firme-, se convierta en un paraíso de los mariguanos, tanto nacionales como extranjeros, lo que vendría a sumarse a las graves calamidades, las carencias, a los problemas elementales que tenemos en las familias, en los jóvenes, y sobre todo que debería haber una preocupación mayor de estos señores funcionarios por buscar alternativas en favor de los niños, de las familias, de los jóvenes, que los saquen de la posibilidad de caer en el vicio de la mariguana, tenerlos en otro tipo de actividades como deportes, lecturas, en fin, estamos como ya lo dijimos, en contra de la legalización de la mariguana, y no admitimos en ninguna circunstancia que esto pueda ser benéfico para el país, como no sea para un grupo determinado de empresarios, de personas sin escrúpulos, que seguramente, y dado lo benigno del clima mexicano, se podrá producir en el país de las mejores clases de la cannabis índica, y esto por supuesto será una mancha más, un problema mayor que venga a atentar contra la familia, sus miembros, y en general contra todos los mexicanos y las mexicanas.

CONCLUSIÓN

Ojalá estas líneas lleguen a nuestro señor Presidente, se mantenga firme, y no autorice ni dé su consentimiento para que se legalice la mariguana en México, así como pretenden, desde la siembra, la industrialización, la comercialización, y que en cualquier esquina, en cualquier botica, en cualquier miscelánea, se pueda comprar esa hierba.


Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. Politólogo Autodidacta. jhernandez366@hotmail.com

Si bien es un tema de moda, y sabiendo que Andrés Manuel se caracteriza por su claridad en el pensamiento y la expresión de sus palabras, hasta hoy no se ha manifestado a favor de esta iniciativa.

Tácitamente está en contra. No ha dicho palabra alguna al respecto. El tema ha sido soslayado. Si le han preguntado no tenemos memoria de su respuesta. Evidentemente hasta ahora no está de acuerdo con la legalización de la cannabis índica.

Por otro lado, hay que considerar que distinguidos funcionarios del gobierno de Andrés Manuel, como el coordinador de los Senadores de MORENA, Monreal, no sólo está a favor, tiene todo un estudio y una iniciativa que incluye sembrar, cosechar, industrializar, usos médicos, lúdicos, mercantiles y todo lo que signifique dinero desde el punto de vista de su legalización. No está sólo, también lo sigue Olga Sánchez la actual Secretaria de Gobernación, y otros funcionarios que están de acuerdo, casi al unísono de lo que ha hecho el alto vacío; es decir Fox, que como ya sabemos tiene incluso un invernadero para que en cuanto digan que se legaliza sea el número uno como industria y comerciante de esta hierba.

Aquí quisiéramos llamar la atención de nuestros distinguidos lectores porque sin que seamos expertos en la materia, es evidente que la mariguana es una droga. Que tiene efectos graves en la salud, en el cerebro, y cuando esto se enfoca hacia jóvenes, que no hay razón para decir que no podría llegar a los niños, a los adolescentes, y como bien lo vemos y se reitera en las pantallas del cine norteamericano, consumir mariguana en la familia, en público, en eventos sociales es una práctica cotidiana; habría que preguntarse qué clase de sociedad han generado los norteamericanos en cuanto a valores y sobre todo inclinaciones al consumo indiscriminado de las drogas; además se dice que esto puede ser, -opinión que no compartimos-, solución al grave problema del narcotráfico de mariguana; y no lo compartimos porque si se legalizara el robo no se acabaría; si se legalizara el homicidio tampoco, y en el caso concreto de la mariguana, legalizarla frente a todas las graves carencias que tiene nuestro país y sobre todo que la población más del 60% son jóvenes menores de 25 años, serán la presa fácil, el elemento consumidor de esta iniciativa, que para nosotros no debe aprobarse en ninguna circunstancia.

Además quienes somos padres de familia, y como en mi caso abstemio y no fumamos, nos preocupa que para empezar, el tabaco que es legal, sea la puerta que abra al consumo de la mariguana; y quién nos garantiza que los jóvenes, los adolescentes, los niños mariguanos no van a dar como siguiente paso el uso de alcaloides u otras sustancias más graves y más dañinas, o las propias anfetaminas como productos artificiales que finalmente atentaran contra la salud pública, familiar, de la sociedad y sobre todo no se va a quedar esto en la periferia de legalizar la marihuana sino que va penetrar el núcleo de la familia, la va a poner en graves aprietos y seguramente, ojalá no llegue ese momento, en que en una sobremesa de mexicanos, con hijos, tíos, sobrinos, abuelos, alguien de repente saque un puñado de cigarro de mariguana, e invite a la familia a fumar y a disfrutar, que imagínense que grave será para México, para el país, que ésto llegue a ser una realidad.

Estamos en contra de su consumo. En contra de su legalización en cualquier circunstancia. Incluso el uso medicinal debe ser bajo una supervisión estricta que no nos lleve al extremo de que sea la puerta falsa, el camino para que en muy poco tiempo este país, -y ojalá Andrés Manuel se mantenga firme-, se convierta en un paraíso de los mariguanos, tanto nacionales como extranjeros, lo que vendría a sumarse a las graves calamidades, las carencias, a los problemas elementales que tenemos en las familias, en los jóvenes, y sobre todo que debería haber una preocupación mayor de estos señores funcionarios por buscar alternativas en favor de los niños, de las familias, de los jóvenes, que los saquen de la posibilidad de caer en el vicio de la mariguana, tenerlos en otro tipo de actividades como deportes, lecturas, en fin, estamos como ya lo dijimos, en contra de la legalización de la mariguana, y no admitimos en ninguna circunstancia que esto pueda ser benéfico para el país, como no sea para un grupo determinado de empresarios, de personas sin escrúpulos, que seguramente, y dado lo benigno del clima mexicano, se podrá producir en el país de las mejores clases de la cannabis índica, y esto por supuesto será una mancha más, un problema mayor que venga a atentar contra la familia, sus miembros, y en general contra todos los mexicanos y las mexicanas.

CONCLUSIÓN

Ojalá estas líneas lleguen a nuestro señor Presidente, se mantenga firme, y no autorice ni dé su consentimiento para que se legalice la mariguana en México, así como pretenden, desde la siembra, la industrialización, la comercialización, y que en cualquier esquina, en cualquier botica, en cualquier miscelánea, se pueda comprar esa hierba.


Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. Politólogo Autodidacta. jhernandez366@hotmail.com